*Pero hete aquí que la liebre salta por donde menos se espera, y es Ricardo Benjamín Salinas Pliego quien, en defensa de sus intereses fiscales, abre una grieta en el modelo de corrupción de la 4T y de sojuzgamiento de los gobernados, más saqueados que en la peor época del presidencialismo, porque ellos, los lópezobradoristas intentan regresarnos al silencio obsecuente en favor de los saqueadores del país
*La lucha por el poder real, el de los compromisos del #narcopresidente, dejó de dirimirse en la contienda presidencial. Hoy el combate se da en el espacio social y cívico del que gustamos los mexicanos para vivir, se dirige desde Palacio Nacional, y se transformó en un embate a sangre y fuego que desgarra el ámbito republicano de México. ¿Lo permitiremos?
Gregorio Ortega Molina
Resulta pesada y terrible la mudez de los representantes populares de la oposición e incluso del oficialismo, porque nada hacen por defender los auténticos intereses de sus representados, de ese México bueno y sabio que se ve afectado, por igual, debido a políticas públicas engañosas y de terribles consecuencias.
Quizá resulta más lesivo el silencio de esos líderes políticos, de los reconocidos por la sociedad como personas inteligentes de las cuales, además de orientación y defensa, fueron una voz clara que indicó caminos y posturas, porque la miscelánea de ideas que surge de las contiendas por el poder define intereses partidistas, muy distantes de las necesidades generales.
¿Han realizado un puntual y verdadero análisis de las consecuencias psicológicas, anímicas, políticas y de cultura, de los plásticos del bienestar? ¿En qué medida modifica el comportamiento de los mexicanos que de ellos disfrutan, de los representados por los diputados y senadores, que los dejan hundirse en una dependencia que nulifica voluntades y deseos de superación? ¿Resuelven la pobreza y alientan inversión y creación de riqueza, o nada más son un gasto sin fin?
En estos temas e importancia vital, lo mismo permanecen mudos Ebrard, que Monreal, o Beltrones o Dante Delgado. Son incapaces de decir esta boca es mía, porque tampoco entienden las consecuencias de lo que realmente ocasionan esos plásticos del bienestar en el comportamiento de los mexicanos, de los electores.
Pero hete aquí que la liebre salta por donde menos se espera, y es Ricardo Benjamín Salinas Pliego quien, en defensa de sus intereses fiscales, abre una grieta en el modelo de corrupción de la 4T y de sojuzgamiento de los gobernados, más saqueados que en la peor época del presidencialismo, porque ellos, los lópezobradoristas intentan regresarnos al silencio obsecuente en favor de los saqueadores del país.
Carlos Slim guardará silencio, porque sobre él esta la pesada loza de las muertes de la Línea 12; ¿otros empresarios que decidan defenderse, y con su defensa modificar el futuro que espera a la mayoría de los mexicanos?
¿Y esos arquitectos e ingenieros que trabajaron el diseño y construcción de la Línea Dorada, que tienen con ellos los secretos de lo que realmente ocurrió? Esos permanecerán callados, porque también tienen ya sus plásticos del bienestar. Todo tapado con dinero fiscal. Es la corrupción que denuncia Ricardo Benjamín Salinas Pliego.
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Comprendo en su amplitud plena el sentido del se juntan el hambre con la necesidad, cuando se hace pública la tripulada que Manuel Andrés López Obrador da a su peluche, el Lelo de Larrea.
El daño que se montan en contra de las instituciones republicanas, nos permite captar la dimensión de su íntimo desea cuando decidieron hacérsela más prolongada (dos años) su presidencia en la SCJN.
Desbordados están por sus ambiciones y su necesidad vital de ser los protagonistas de todo este desorden político, que amenaza convertirse en tragedia social y económica. Si esa otra parte de México que sí piensa y ama a su patria, no los detiene.
La lucha por el poder real, el de los compromisos del #narcopresidente, dejó de dirimirse en la contienda presidencial. Hoy el combate se da en el espacio social y cívico del que gustamos los mexicanos para vivir, se dirige desde Palacio Nacional, y se transformó en un embate a sangre y fuego que desgarra el ámbito republicano de México. ¿Lo permitiremos?
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@OrtegaGregorio