* Lo que ella se juega como abanderada por el Frente Amplio es, en primer término, la vida, porque los intereses para que nada cambie, son tan poderosos o más que los que ultimaron a Colosio, y así lo avisan con la pretensión de soltar a Mario Aburto anticipadamente
* Calibraremos la verdadera dimensión de las consecuencias políticas de la manera en que han hecho frente a la tragedia, con la emisión de sufragios para la elección presidencial. Nunca como ahora el futuro de la República, del Estado, está en suspenso
Gregorio Ortega Molina
Lo que tendremos en materia de campañas políticas, promete ser innovador por parte de Xóchitl Gálvez y su equipo, y desconcertante en MORENA, puesto que Andrés Manuel López Obrador no suelta el timón, y se empeña en imponer sus reglas y espacios para los juegos de poder.
Si mis observaciones son correctas y resultan en análisis e hipótesis adecuadas, debemos comprender que el estratega de Palacio Nacional y sus operadores políticos y financieros, sustentan su idea de conservar el poder por medio de la desinformación, que va más allá de la mentira tantas veces repetida que se convierte en verdad.
Desinformar para que se afecte el estado de ánimo de la sociedad, desconcertarla, profundizar su desasosiego y la desconfianza, y los prosélitos tiendan a aferrarse a los estímulos y las migajas de seguridad que les avientan desde el poder, como son los plásticos del bienestar, y la reiterada oferta de construir la cuarta transformación que durará cien años, como el tren maya.
Desconcierto y desasosiego paralizan la voluntad del elector, y así logran que el abstencionismo les facilite la tarea requerida para una elección de Estado, lo mismo que para impulsar el fraude electoral, al suplir la voluntad de los beneficiados por los programas sociales. Olvídense de las mañas de antaño, asistimos a una innovación en el juego de espejos, para que el emperador conserve su traje nuevo y no perciba él su desnudez.
En cuanto a la búsqueda de Xóchitl Gálvez, si mi percepción no me engaña, la señora apuesta a una elección ciudadana, el triunfo de la sociedad, sí amparada en la infraestructura de los institutos políticos a los que ella abandera, y no viceversa.
Vamos más allá del Frente Democrático Nacional, construido con la voluntad de varios líderes, pero en defensa de las estructuras de los institutos políticos abanderados. Creo, sin temor a equivocarme, que la señora Gálvez sí apuesta a la reforma del Estado, a la auténtica, verdadera transición, que quedó atorada en el “yo por qué” de Vicente Fox y su timorata alternancia.
Lo que ella se juega como abanderada por el Frente Amplio es, en primer término, la vida, porque los intereses para que nada cambie, son tan poderosos o más que los que ultimaron a Colosio, y así lo avisan con la pretensión de soltar a Mario Aburto anticipadamente.
En segundo lugar, se juega el futuro de México como nación, como proyecto conculcado desde su nacimiento.
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Alta la factura política de las consecuencias de Otis
¿Hay fotos del senador Félix Salgado Macedonio promoviendo la solución de los conflictos sociales debidos al huracán Otis? ¿Dónde está su pimpollo Evelyn, que no es gobernadora sino hija de papi “toro sin cerca”?
Hay información de que el Centro Nacional de Huracanes, con sede en Miami, Florida, aportó con horas de anticipación los datos suficientes para saber de la tragedia natural que se cernía sobre Acapulco. ¿Pudieron avisar a los que allí los sorprendió Otis? ¿Pudieron evitar que el desastre desbordara los esfuerzos del gobierno?
Un hecho es verificable. Andrés Manuel López Obrador paga, con creces, su debilidad ante Félix Salgado Macedonio y Evelyn Salgado. Otros a cargo habrían enfrentado las consecuencias de muerte, saqueo como manifestación de solidaridad social, distribución de ayuda y protección a los más débiles, de manera eficaz.
Calibraremos la verdadera dimensión de las consecuencias políticas de la manera en que han hecho frente a la tragedia, con la emisión de sufragios para la elección presidencial. Nunca como ahora el futuro de la República, del Estado, está en suspenso.
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@OrtegaGregorio
