Por Claudio De la Llata
Indudablemente que la composición de la plataforma electoral de la 4T, deja mucho que desear por obvias razones; la fundamental, el hecho de que las mejores candidaturas son para los chapulines del PRI, esto sin contar que hay dirigentes de los comités estatales de MORENA que son de reciente cuño, y más aún con una manera de llegar al partido MORENA como quien asalta un tren.
Pero por si algo faltara, el desplazamiento de la izquierda histórica de MORENA, es clara y evidente, dejando a los morenistas en calidad de criados de los recientemente llegados del PRI, de tal suerte que no hay sospecha, ya no sólo es una crisis de identidad, ya es una identidad perdida (o robada), puesto que de la izquierda a corto plazo al interior de MORENA, simplemente no va a quedar nada.
Además hay que añadirle, que los chapulines del PAN se están colando por el verde ecologista de un modo impúdico y descarado, sumando a todo esto que muchos priistas que gozaban de perseguir a la gente de izquierda desde el poder, ahora están arribando vía el PT (partido del trabajo), a las candidaturas comunes de la 4T, eso sin contar con que las dirigencias (por lo menos 15 de ellas en igual número de estados), están siendo presididas por priistas y por ex panistas, lo que es peor.
La vergonzante danza de los chapulines al interior de MORENA es una marabunta de personajes que en su gran mayoría son lo peor del PRI sin objeciones, personajes con pocos o nulos escrúpulos y con una conducta sin miramientos, todo esto con la complacencia de Mario Delgado y con el disimulo de Claudia Sheinbaum, quienes no han dicho una sola palabra, ante el agandalle de los priistas del partido MORENA, sin el menor rubor y sin pena alguna.
Pero también hay que decir, que el maltrato a la izquierda histórica que acompañó a López Obrador en las buenas y en las malas, se hace patente cuando no aparecen nombrados en las candidaturas de poder, remitiéndolos tan sólo a las regidurías en algunos escasos ayuntamientos, y al que mejor le va, en las candidaturas a las diputaciones locales, y sólo en aquellos distritos donde la elección es muy complicada o comprometida, y en el peor de los casos, totalmente perdida por anticipado.
En el caso de las presidencias municipales, de las 10 ciudades más grandes del país, no aparecen, salvo que Claudia Rivera Vivanco gane la nominación a la alcaldía poblana, (cosa que está por verse), pues ya casi la tiene en la bolsa Pepe Chedraui Budib, ex priista en el pasado inmediato; es decir, ha dejado de ser priista hace cuatro meses.
Pero no es todo, las amenazas veladas contra los miembros de la izquierda histórica de MORENA, con el fin de obligarlos a que no compitan, contra los tricolores en la contienda interna, y las acciones tendientes a conminar a los de la izquierda, a ser fieles ciervos de los nuevos tomadores de decisiones al interior de MORENA… todos procedentes del PRI.
Por lo que finalmente concluyo que la cuarta transformación es la del PRI, pues pasó a ser del Partido Revolucionario Mexicano (PRM, aunque muchos dicen que ese no era todavía el mismo PRI), a transformarse el 4 de marzo de 1929 en el Partido Nacional Revolucionario (PNR), para pasar a ser en 1938 y reconstituido por segunda vez, como Partido de la Revolución Mexicana (PRM nuevamente), para entrar a su tercera transformación en el PRI que todos conocemos en el año de 1946, y la cuarta del PRI a MORENA.
Finalmente utilizo este espacio para desearles una feliz navidad, y para agradecerles su preferencia en la lectura de las líneas de quien escribe, para su lectura que mucho agradezco.