Inicia 2024, marcado por las cruciales elecciones en México.
En estos tiempos, la ciudadanía expresará sus demandas, y el éxito de candidatos y gobernantes dependerá de su habilidad para comprender y abordar esas necesidades, conectando auténticamente y canalizando las inquietudes ciudadanas para ganarse la confianza del electorado.
En este contexto, la escucha social digital emerge como un factor clave, a menudo pasado por alto por campañas y gobiernos. La tecnología actual nos brinda herramientas para entender las preocupaciones de la ciudadanía según ubicación, género y edades, un aspecto de primera importancia en la comunicación política: escuchar antes de hablar.
La competencia en el espacio digital será intensa, con partidos, candidatos y gobernantes buscando figurar en la agenda y posicionar sus discursos. Para lograrlo, una estrategia política y de comunicación precisa se vuelve esencial.
Debe ser capaz de dirigirse a los ciudadanos conforme a sus necesidades y preocupaciones, presentándose de manera única con mensajes impactantes que se distingan del resto. En una era donde la saturación publicitaria alcanza niveles sin precedentes, la política requiere una profesionalización destacada.
Contar con equipos de campaña con herramientas y recursos humanos capacitados para monitorear, estudiar e investigar las tendencias y las conversaciones en redes sociales se convierte en un elemento crítico para el éxito electoral.
Quienes lo hagan, obtendrán ventaja. En la actualidad los precandidatos a la presidencia y gobernaturas, tienen dudas en un mensaje claro en la comunicación digital, estamos en los 5 meses de recta final los cuales se definirán muchas dudas de la ciudadanía y la comunicación digital será la pieza clave para ello.