Manuel Zepeda Ramos
El pasado sábado 7 de diciembre, fui invitado a un conversatorio a la preparatoria abierta mixta Antonio María de Rivera organizado por sus alumnos, maestros y directivos, bajo el título de Diálogos Juveniles: El agua requiere una solución sustentable para la zona Metropolitana de Xalapa, Veracruz.
Me llamó mucho la atención y, por supuesto, fui con mucha gana.
Me di cuenta, conforme avanzaba el acto en el auditorio de la escuela después de las nueve de la mañana, que la asistencia de los jóvenes era numerosa y que los ponentes -muchos-, bien tecnificados con equipo de video y audio, pero sobre todo conocedores de la gran problemática de lo que hoy significa el agua para el Mundo y de manera particular para la capital de Veracruz y su zona de influencia, argumentaban con claridad sus análisis y propuestas de sustento.
Hubo más invitados para participar en el conversatorio:
Estuvo la doctora Miriam G. Ramos Escobedo, experta en ecología de ríos, monitoreo comunitario y gestión de cuencas; directora general de Global Water Watch México A.C. y directora nacional de Guardianes del Agua quien enriqueció notablemente lo expresado por los jóvenes con su gran conocimiento de las aguas de México, la importancia toral de contar con aguas libres de contaminación para el consumo humano y la necesaria participación, intensa, de la sociedad civil en todas las acciones sobre el cuidado del agua en el país. La doctora Luisa Paré, luchadora social de muchos años en Veracruz e integrante de Guardianes del agua, también participó en este sorprendente conversatorio de los jóvenes preparatorianos, sintiéndose satisfecha sobre los claros conceptos que los jóvenes ya tienen sobre el cuidado necesario del agua.
Los trabajos de los jóvenes versaron sobre la historia milenaria del Cofre de Perote, sus características geológicas que lo convierten en estratégico para la captación de agua a través de sus bosques ahora deteriorados no obstante que ostenta el título de parque nacional desde el 4 de julio de 1937, entre otros argumentos.
La conciencia de estos jóvenes de que es necesario y urgente descontaminar los manantiales de Xallapan -en náhuatl manantial en la arena; manantial sobre terrenos arenosos-, para que sus aguas vuelvan a ser aptas para el consumo de los seres vivos es ahora, más que nunca -lo pude apreciar directamente-, lúcidamente clara.
En tres años, a más tardar, la inmensa mayoría de estos jóvenes preparatorianos talentosos y con gran conciencia social, estarán inscritos en las diferentes carreras que la Universidad Veracruzana ofrece en Xalapa.
Estoy convencido que serán, para las próximas autoridades que habrán de asumir el nuevo rectorado en el ya cercano septiembre de 2025, un principal activo para mejorar el concepto del servicio social comunitario, al servicio de quien menos tiene, coadyuvando intensamente en lo que muy pronto sea el gran bosque nacional del Cofre de Perote que brinde de abundante agua a las comunidades que lo requieran, hoy lamentablemente escasa.
La idea de convertir al Cofre de Perote en el mejor Geoparque de México, que produzca el agua necesaria para su zona de influencia y sea un atractivo para los habitantes del Planeta que viajan con divisas por el Mundo observando las riquezas naturales y geológicas que se ofrecen en torno al turismo de naturaleza y aventura, es cada día más posible que suceda.
¡Que vivan los jóvenes universitarios y su visión de futuro!