SILOGISMOS
Por Antonio Ortigoza Vázquez/ @ortigoza2010
Especial Expediente Ultra
El presidente Kabala es un mandatario de un no identificado país, quizá del Sudeste Asiático, o más o menos. Ese dato se guardó en secreto por la Presidencia de México por razones de “seguridad nacional”.
Se presentó ayer por la mañana a la puerta principal de Palacio Nacional y fue recibido por el presidente Andrés Manuel López Obrador, con un cariñoso: “Mucho gusto, presidente Kabala” y acto seguido le franqueó la entrada al que fuera recinto de los virreyes.
Eso causó una gran sorpresa entre la prensa internacional y nacional, así como entre millones de televidentes que observaban la escena en vivo.
Es que… pues, lo que se sabía hasta ese momento, no era precisamente, la visita que se esperaba, sino la de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, la que no se pudo saber en dónde demonios se encontraba, porque no se informó absolutamente nada al respecto.
Algunos reporteros atrevidos pidieron explicaciones al vocero oficial, Jesús Ramírez Méndez quien, con gesto agrio, respondió: “Eso fue cosa de ustedes, que inventan noticias”, y les dio la espalda.
Quedó en claro -si acaso- que el presidente, conforme a lo habitual, “tenía otros datos”: La visita era de un presidente de un país del Tercer Mundo (¿O sería del Cuarto Mundo?) y no una enviada del odioso imperio gringo. Tengan para que aprendan.
Pero… quedó pendiente otra explicación más: ¿Por qué. entonces, fue “despejado” el Zócalo, tres días antes, y cerrado todo acceso desde el eje Lázaro Cárdenas?
Poco después, se informó que “nadie ordenó nada de eso, todo fue invento de la prensa fifí, otra vil maniobra de Claudio X. González y de Enrique Krauze”.
(Por la noche, circuló en las redes sociales información falsa que ubicaba a Doña Kamala por rumbos de Garibaldi, con sombrero de charro bien colocado y una botella de tequila animando a los mariachis a “tocarle otra canción”).
Off de the record, uno de sus asistentes explicó, “sotto voce”: “Es que la señora recordó que en sus tiempos de estudiante vio una foto de Alan Garcia, joven y guapo, cantando en este lugar, con mariachis y tequila”.
Eran sus tiempos, aclaró la supuesta fuente, de “estudiante revoltosa y radical”.
Y en cuanto al presidente Kabala… pues se esfumó en el éter, de la misma forma en que llegó.
El presidente AMLO dijo que “fue una entrevista muy provechosa y establecimos valiosos acuerdos de mutua colaboración”.
Cuando los reporteros preguntaron por una foto oficial de la visita, el mandatario aclaró con tono solemne: “Un compló de los conservadores hizo que se velaran todas las fotos”. Pero cuando, azorados, aclararon: “Pero ahora todo es digital”, replicó una vez más: “Yo tengo otros datos”.