José Alberto Sánchez Nava
1.- En el turbulento mar de la política mexicana, desde la insaculación de Guadalupe Taddei como presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE) sin una trayectoria sólida y cualitativa en materia jurídico electoral, ha generado una ola de controversias. Se ha señalado que la designación de Taddei al cargo de presidenta del citado Instituto responde a los intereses de Morena y del presidente, exacerbando la crisis institucional del INE en un país donde la transparencia y el respeto a la pluralidad son fundamentales, especialmente con las elecciones del 2 de junio de 2024 en el horizonte.
2.- La Mañanera: Una Tribuna de Promoción en Colusión con el INE. En un escenario donde la comunicación gubernamental debería ser un baluarte de objetividad y transparencia, las “mañaneras” de López Obrador se han transformado en una plataforma para promover funcionarios y candidatos afines, mientras descalifican a aquellos que critican su gestión o a quien él considera sus adversarios. El uso constante de estos espacios para favorecer a su partido y atacar a sus opositores no solo socava la confianza pública, sino que también infringe los principios establecidos en la Ley General de Comunicación Social y el artículo 134 de la Constitución, que prohíben la propaganda personalizada de servidores públicos. Sin embargo, la presidenta del INE no demuestra interés en el ejercicio de su función para ser determinante en contra de las violaciones constitucionales que el Presidente de la Republica hace diariamente en materia electoral, lo cual ha convertido a esta próxima elección del 2 de julio, en una elección de estado.
3.- La Prohibición del Color Rosa: Un Símbolo de Parcialidad. Un episodio reciente que ilustra la cuestionada imparcialidad de Guadalupe Taddei fue su intento de prohibir a los ciudadanos el uso del color rosa durante la manifestación de la “Marea Rosa” del día de ayer domingo 19 de mayo de 2024, argumentando que este color es institucional del INE, Taddei pidió a la ciudadanía no utilizarlo en apoyo a la oposición, liderada por Xóchitl Gálvez. Este acto, más que una defensa de la neutralidad institucional, se percibió como un abuso de poder y una maniobra ventajosa en favor de Morena. La presidenta del INE pasa por alto, que debe emitir sus órdenes, recomendaciones o determinaciones en materia electoral debidamente fundadas conforme a la ley. De lo contrario, la presidenta del INE, al no fundar sus actos, comete el abuso de poder por falta de legalidad en sus acciones y recomendaciones, y se convierte en una matraquera complaciente del partido del presidente López Obrador. Lo cual pone en peligro la independencia del INE.
4.- El Deber de Informar y la Realidad de Estigmatizar. La falta de formación jurídico electoral de Guadalupe Taddei hace que el principio de legalidad establecido en la Constitución y leyes electorales, sea la estructura neófita de su apatía para entender que la Política de Comunicación Social del Gobierno Federal, publicada en 2019, establece que la propaganda gubernamental debe ser institucional y orientada a informar el desempeño del ejecutivo, sin fines electorales o de estigmatización. Sin embargo, las “mañaneras” de López Obrador se han derivado en un espacio para la confrontación y la autopromoción, donde las críticas se responden con descalificaciones y la gestión se glorifica en una eterna campaña política sin admitir errores. Es por esa razón que la promoción electoral de candidatos afines al presidente, son temas que se desarrollan todos los días desde las mañaneras, frente a un INE, que permite la transgresión de la ley, ocasionando el daño social en materia electoral.
5.- El Principio de Legalidad: Una Obligatoriedad Ignorada. El principio de legalidad obliga a que todas las acciones gubernamentales estén debidamente fundamentadas y motivadas conforme a la aplicación de la ley. Sin embargo, Guadalupe Taddei, al intentar prohibir el uso del color rosa, no solo desbordó sus atribuciones, sino que también mostró una parcialidad evidente, contraria al compromiso que asumió al protestar su cargo. Este tipo de acciones refuerza la percepción de que el INE está al servicio del presidente, en lugar de ser un guardián imparcial de la democracia.
6.- La Presidenta del INE, y su Ignorancia Supina sobre Principios Elementales del Derecho en Materia Electoral. La presidenta del INE exhibe su ignorancia supina en materia electoral, ante el desconocimiento de los principios generales del derecho, que el Jurista Eduardo García Máynez exponía en el axioma de exclusión del medio que se explicaba así: “Si una conducta está jurídicamente regulada, o está prohibida, o está permitida. Ejemplo: Si el deudor tiene a su cargo por mandamiento de una norma, el pagar su deuda, su conducta es la de permitirle pagarla, sin que pueda optar entre hacerlo o no hacerlo, o sea, que no puede estar su conducta prohibida y permitida. De ello se sigue que si un proceder no está jurídicamente prohibido, sí está jurídicamente permitido. En ese tenor, si el uso del color rosa por parte de la ciudadanía no se encuentra prohibido en la ley, respecto de su uso durante una marcha cívica, entonces el uso del color rosa por parte de la ciudadanía en una marcha cívica se encuentra jurídicamente permitido. Sin que sea necesario, que por su parcialidad con el Partido Morena y el Presidente de México, se exhiba a si misma dañando la imparcialidad del INE.
7.- La Necesidad de un Cambio en la Comunicación Gubernamental. La sociedad mexicana debe exigir un cambio en la forma en que se comunica y se ejerce el poder. La democracia se fortalece con la crítica constructiva y la rendición de cuentas, no con la descalificación y la confrontación. Es imperativo que el próximo gobierno recupere el espíritu de objetividad y transparencia en la comunicación social, evitando el uso de recursos públicos para fines electorales o para desacreditar a opositores.
8.- Un Futuro Democrático en Juego. Mientras México se prepara para las elecciones de este 2 de junio de 2024, la integridad y la imparcialidad del INE son más cruciales que nunca. La imposición de Taddei y sus acciones cuestionables son un recordatorio de los peligros que enfrenta nuestra democracia. Los ciudadanos deben permanecer vigilantes y exigir un INE verdaderamente independiente, capaz de garantizar procesos electorales justos y transparentes. En un país donde la democracia aún se encuentra en consolidación, la sociedad mexicana demanda un retorno al respeto, la transparencia y la rendición de cuentas en la comunicación gubernamental. Solo así podremos construir una nación donde todos los ciudadanos se sientan representados y escuchados, y donde la democracia no sea solo una aspiración, sino una realidad palpable.