POR FERNANDO PESCADOR GUZMÁN.
Las elecciones presidenciales de Bolivia muestran una tendencia clara hacia la derecha política en lo que durante más de veinte años se consideró uno de los bastiones del “socialismo del siglo XXI”.
Los dos candidatos punteros, Rodrigo Paz Pereira del Partido Demócrata Cristiano (PDC) con 32.1% de la votación y Jorge “Tuto” Quiroga de Alianza Libertad y Democracia (ALD) con 26.8%, pasarán a la segunda vuelta electoral a llevarse a cabo el próximo 19 de octubre.
Ambos candidatos representan proyectos políticos de derecha y centro derecha que contundentemente desplazaron al Movimientos Al Socialismo (MAS) fundado por el expresidente Evo Morales.
Morales participó a mediados de los años 90 en la creación del Movimiento al Socialismo – Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS – IPSP) cuya primera participación electoral le permitió llegar como Diputado al Congreso en 1997. La Diputación le otorgó visibilidad electoral suficiente para competir por la presidencia de Bolivia en 2002 y vencer en la elección de 2005 con casi 54% de los votos. Morales fue reelecto en 2009 y 2014 con votaciones superiores al 60 por ciento.
Durante 27 años Evo Morales ha sido un referente político de la izquierda latinoamericana. Ello se debe a logros indiscutibles de su gestión presidencial. El analfabetismo disminuyó casi 14 por ciento. Su proyecto de Sistema Único de Salud ofrece servicios de sanidad universales y gratuitos.
Pero no todo fue miel sobre hojuelas. En noviembre de 2019, tras acusaciones de fraude electoral e inestabilidad general, su casa fue asaltada por manifestantes y tuvo que salir de Bolivia “a petición” de las Fuerzas Armadas, refugiándose en México.
La derrota en 2025 del candidato del MAS, Eduardo del Castillo, ha sido calificada de “histórica” dentro y fuera de Bolivia. El resultado de Castillo, candidato oficialista, un sexto lugar con apenas el 3.2% de la votación, así como el previo llamado del propio Evo Morales al voto nulo son sólo dos factores en una serie de desencuentros políticos de la izquierda boliviana.
Analicemos los principales factores económicos y políticos que llevaron a la debacle electoral de 2025.
Bolivia atraviesa una crisis económica estructural exacerbada por un modelo económico agotado. Parte importante del problema ha sido un factor recurrente en Latinoamérica, la dependencia de los hidrocarburos. Esta realidad se refleja en los ingresos, en 2014, Bolivia recibía $5.489 millones de dólares anuales por exportaciones de gas natural. Para 2024, esa cifra cayó a menos de $1.700 millones.
Los gobiernos emanados del MAS no hicieron el esfuerzo por explorar nuevos yacimientos, pasaron por alto la diversificación de la matriz productiva.
Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), fundada en 1936 y nacionalizada en 2006, en pleno boom petrolero global, se limitó a administrar la bonanza heredada sin generar sostenibilidad.
La prioridad nunca fue el largo plazo sino el apuntalamiento de programas sociales a partir de los ingresos por hidrocarburos. El apoyo electoral del MAS, 64.2% en 2009 y 61.4% en 2014 coinciden con el pico de exportaciones en 2013–2014.
La tendencia se confirma cuando a partir de 2016 los ingresos estatales disminuyen drásticamente y el apoyo electoral también muestra una tendencia descendente pasando a 48.7% estimado en 2025.
La caída en los precios internacionales de los hidrocarburos tuvo repercusiones negativas sobre la economía boliviana en general. El MAS mantuvo un tipo de cambio fijo y subsidios a los combustibles, lo que generó un déficit fiscal crónico.
El Banco Central dejó de publicar su reporte sobre reservas internacionales en 2023, alimentando rumores de insolvencia. A partir de marzo de ese año, los bancos enfrentaron dificultades para realizar pagos y transferencias internacionales. El caos en el mercado de divisas generó un mercado negro donde el dólar llegó a duplicar el tipo de cambio oficial. En 2024, la inflación de alimentos alcanzó 15,4%, desatando protestas masivas en La Paz y Cochabamba por falta de liquidez y combustible.
Primer factor de riesgo, construir redes clientelares a partir de la exportación de bienes primarios cuyas oscilaciones en el mercado internacional pueden tornar la abundancia en escasez de un día para otro. Noruega ha podido evitar esta trampa con la creación de un “fondo soberano” el cual en diversos porcentajes entrega parte de las ganancias petroleras y gaseras a los ciudadanos, pero mantiene a la clase política alejada del control del mismo.
A la par de los problemas económicos, el movimiento encabezado por Evo Morales enfrentó problemas de índole estrictamente política. El MAS impulsó una nueva Constitución en 2009 centralizando el poder en el Ejecutivo, debilitando al Legislativo y al Judicial. La reforma estaba diseñada para permitir la reelección indefinida y el control político de órganos clave, lo que generó desconfianza en la independencia institucional.
Durante los últimos años, se denunció el uso del sistema judicial para inhabilitar candidatos opositores y perseguir disidentes, lo que erosionó la legitimidad democrática. Esta captura de instituciones en parte exacerbó la crisis de noviembre 2019 cuando Morales fue “invitado” a abandonar el país.
El gobierno del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador brindó la logística clave para el escape de Evo Morales en un avión Gulfstream G550 de la Fuerza Aérea Mexicana. Reportes posteriores sugieren que el piloto de la aeronave mexicana habría sido golpeado por militares bolivianos y tras el despegue se observó la estela de un cohete [1].
Los problemas políticos internos también aquejaron al propio MAS. La. ruptura en los liderazgos históricos entre Evo Morales y Luis Arce también pasaron factura. Luis Arce fungió como ministro de Finanzas en los tres gobiernos del Evo Morales el período 2006 – 2017, es decir fue un aliado estratégico.
El veto a la candidatura de Morales en las presidenciales de 2020 hizo que Arce fuera postulado, ganado la elección con el 55.17% de la votación, y asumiendo posesión de la presidencia de Bolivia en noviembre de ese año. Pero, como se apuntó arriba, la caída de ingresos estatales y el descontento generalizado hicieron que el apoyo popular a la administración Arce se desplomara.
En septiembre 2023, Evo Morales anunció su intención de postularse de nueva cuenta a la presidencia de Bolivia. El presidente Arce, en un acto de recelo sino es que, de abierta traición, gestionó ante el Tribunal Supremo Electoral la confirmación de la resolución de veto a Morales, cerrándole la puerta a su aspiración.
El veto surge de la limitación de relección presidencial establecido en el artículo 168 de la constitución boliviana del 7 de febrero 2009, que estipula “pueden ser reelectas o reelectos por una sola vez de manera continua”. Evo Morales ha sido electo bajo esta constitución dos veces 2009 (diciembre) y 2014. Al ocupar por cuarta vez la presidencia en 2019 (la primera fue en 2005 bajo una constitución previa), se desató una crisis constitucional precisamente por la interpretación del mencionado artículo constitucional.
En junio 2024, una acción militar en contra del palacio Quemado, sede del poder ejecutivo, nominalmente a cargo del general Juan José Zúñiga, generó un caos político en el que el propio Evo Morales acusó de “autogolpe” al presidente Luis Arce. Si bien el general Zúñiga fue detenido, no está claro porque tuvo acceso a una rueda de prensa en la que afirmó la versión del “autogolpe”.
Puede observarse que la alianza que le había dado viabilidad histórica al MAS se venía abajo [2]. En ese contexto Evo Morales hizo un llamado al voto nulo, que autoridades electorales registraron en torno al 19.3%, el nivel más alto jamás observado en el país. Arce, debilitado por la falta de apoyo interno, impulsó a Eduardo del Castillo como candidato, quien obtuvo solo 3,2% en primera vuelta.
La fragmentación política también obedeció a problemas de renovación y cohesión interna del MAS. En un episodio sin precedentes, Andrónico Rodríguez, figura emergente del ala juvenil del MAS y presidente del Senado, fue apedreado por militantes masistas tras emitir su voto en la región de Cochabamba, bastión político de Evo Morales [3]. Rodríguez de 36 años logró 8.1% de la votación, nivel muy inferior al histórico del MAS.
El mes de octubre próximo trae consigo una serie de definiciones políticas y económicas para Bolivia. Su debate tiene eco en toda la región latinoamericana, haremos bien de parar oreja acá en México.
Uno de los debates de fondo tendría que ser la viabilidad del proyecto de izquierda que financieramente basa los programas sociales y transferencias de dinero en la riqueza natural y no en la productividad de la planta industrial. Nadie se opone a las ayudas a los sectores económicamente desfavorecidos, el tema es como darle sostenibilidad cuando se basa en el precio de materias primas con importantes altibajos.
Otro tema, no sólo para la izquierda, es la dependencia política en la figura providencial, el “hombre fuerte”. El caudillismo tiene plena ciudadanía en nuestra Latinoamérica, es tiempo de considerar el paso formal y consciente al gobierno de instituciones. Pero no de dientes para afuera. Es tiempo de reconocer que la complejidad global impide que una sola persona pueda saberlo todo, decidirlo solo y ser el foco permanente de atención.
SAGRADAS ESCRITURAS: 1 Samuel 18:6-19:7.
Aconteció que cuando volvían ellos, cuando David volvió de matar al filisteo, salieron las mujeres de todas las ciudades de Israel cantando y danzando, para recibir al rey Saúl, con panderos, con cánticos de alegría y con instrumentos de música. Y cantaban las mujeres que danzaban, y decían:
Saúl hirió a sus miles,
Y David a sus diez miles.
Y se enojó Saúl en gran manera, y le desagradó este dicho, y dijo: A David dieron diez miles, y a mí miles; no le falta más que el reino. Y desde aquel día Saúl no miró con buenos ojos a David.
Fuentes:
[1] https://www.proceso.com.mx/nacional/2021/9/1/avion-que-saco-evo-morales-de-bolivia-fue-atacado-con-un-cohete-revela-amlo-en-su-libro-271088.html
[2] https://izquierdaweb.com/bolivia-declive-economico-y-fractura-politica-el-doble-golpe-al-modelo-boliviano/
[3] https://www.infobae.com/america/america-latina/2025/08/17/elecciones-en-bolivia-andronico-rodriguez-fue-atacado-por-un-grupo-de-votantes-en-el-bastion-politico-de-evo-morales/