Horizonte de los eventos
Si duermes con perros, amaneces con pulgas. Marcelo puede ser considerado muchas cosas, no un traidor, pero sí sabe de eso. Superó con creces a su maestro, a quien obsequió la dignidad para morir, al rescatarlo del ostracismo merecido, hacerlo diputado y velarlo como senador.
Esta vez está crujiendo de verdad al movimiento morenista -ya lo hizo en el PRI, a su propio partido, al PRD. El presidente casi lo entendió, pero pronto sus asesores, quienes arrinconaron a Marcelo, lo convencieron de las ventajas –“infalibles y convenientes”- de su salida, que pronto, la superioridad soberbia -y la mayoría, consecuente-, más la convicción de invencibilidad de siempre, creyeron verdad y se desató una campaña de descalificación desde la Mañanera, que dijo: “… es que no entienden: restará votos de la clase media a la que no puedo pronunciar” -casi literal.
Lo ignora y se ambienta la denostación. Que conste, dichos asesores son los mismos que operaron Coahuila, donde también lo convencieron de no necesitar al PT, ni a su candidato (desalineado subsecretario de Alfonso, cuando Seguridad Ciudadana), ni al Verde, que ni reculando de última hora, evitaron la sorpresiva derrota que así propiciaron y evidenciaron una gran descomposición interna del bloque -la soberbia es mala consejera del político; Igual desdeñaron al candidato petista que no declinó, pero Coahuila no es México, ni éste, es Marcelo -será cuestión de esperar, advierto yo.
Históricamente: el desquebrajamiento de un pilar, por mero efecto físico, impacta en sí mismo de inmediato, no enfrente. Más claro, ni el agua, sea estrategia de Palacio Nacional o no. La sobrestimación, la subestimación del derecho y la soberbia, son su Talón de Aquiles.
La promoción jurisdiccional de Marcelo sorprende diversos sectores. Es un requisito legal de procedibilidad, primero intentar ante el órgano interno del Partido, para poder promover después ante el Tribunal Electoral.
Mi lectura parte de la convicción de que la axiología es el criterio con que todo órgano jurisdiccional debe valorar y resolver. Asimismo, que la mayoría de votos tiene un valor axiológico MENOR que impedir que acceda al Poder, personaje alguno de prácticas desaseadas e ilegales: Fue el caso, con tal de cumplir la instrucción proyecto del jefe ¡acatarla a cualquier costo! aunque era innecesario, aunque fue en público, aunque provoquen la inestabilidad del estamento del propio jefe. Aunque todos hayamos visto, luego ¡después! mientan con que sí “estuvieron los representantes presentes” (¡!).
Se sabe y dice que, “quien duerme con perros…” y efectivamente, Mario Delgado llegó allí y antes fue Senador, con el absoluto respaldo de Ebrard, para promover su candidatura. Quien pronto se “achairó” y con ello, se hizo hombre del presidente, y no estatua de sal, apoyó a la Sheinbaum.
Cada quien decide y és, quien és y cada quien sabrá, pero desconocer el derecho de representación en el cómputo, con desdén a la ley, a él y sus representantes (“Cuando la perra es brava, hasta los de casa, muerde”), violenta todo principio democrático de igualdad, legalidad y fraternidad y el acuerdo que sostiene nuestra vida pública y social ¿Así se regirá en adelante? ¡Por supuesto que debe reponerse el proceso, a riesgo de permitir que sigan al frente del Poder y crezcan, los desaseados señalados por él! Contrarios también al sistema de convivencia que pretendemos y establecimos en la Constitución los mexicanos.
Veo que el quo de Marcelo, no pretende destronar a Claudia -que permitiría limpiara su propia elección, y le quitaría bichos traumáticos, nefastos para la salud de la República. Y sobretodo, que su “carnal Manuel”, se deslinde de los operadores. Si no lo hace, está claro quién instruyó y que no cabe en lo que dure el régimen lópezobradorista. La apuesta es cara, para empezar, Rosario.
Marcelo, heredero de Camacho, con todo y ex sindicato de Ruta Cien, del Movimiento Proletario Independiente incrustados en la Ciudad e “interior” y de las organizaciones clientelares que derivaron de ellas, integrantes de Morena. No así, legatario del capricho del exregente, con el que toda su vida ha lidiado, incluso al declinar en favor de Andrés Manuel el 2000 y designarlo albacea de todo aquello -hasta hoy.
Que el presidente “concedió todas las peticiones de Ebrard”, acaso sea cierto pero no cumplieron el acuerdo, de común acuerdo Mario y Poncho, mancharon el proceso de sucesión y la continuidad de la 4T, de Claudia ¿Quién no entiende? Mas la bicéfala cabeza presidencial (de Morena y su CN), creyeron que podían “fallar”.
Y ese es el punto, el desaseo y que tales gañanes, tan mimetizados con Félix, René y camarilla, se conviertan en los futuros candidatos presidenciales ¡No hablamos de Claudia, no hablamos del 2024-2030, sino del 30-36! LO QUE HA GENERADO ARRIBA, UN DESPERTAR NOTORIO, DE UN MARCELINISMO, DEL VIERNES PARA ACÁ.
Ser analista político, incluso politólogo, es muy cómodo. Hablamos de política sin hacerla. Hacer política es otra cosa, a menudo y en lo inmediato, no cabe la sistematización, ni hay tiempo para instrumentar la metodología científica a los hechos y sus reacciones en fa. Menos incorporar teorías y mucho menos entender las consecuencias humanas de los actos de Poder.
Y aquí, al tema jurisdiccional: La resolución que tome la Comisión de Justicia -integrada proporcionalmente a la presencia de las tribus del Partido, quedará hacia dos uno-, podrá ser aceptada por Marcelo e irse o recurrirá ante el Tribunal Electoral, y eventualmente, de allí partirá volver la LEGALIDAD, igualdad y limpieza al Partido y al sistema -porque esto, a todo y a todos enturbia-, que puede resolver y ordenar reponer el proceso.
O ratificar el triunfo de Claudia e imponer las sanciones que amerite, incluso las denuncias penales correspondientes, en contra de las cabezas del bicéfalo y quien resulte, toda vez que esa sola violación constituye un delito establecido en la legislación electoral, eventualmente grave -sin derecho a fianza-, a quienes incumplan dichas normas, las que: OJO, ANTES DE LA CAÍDA DEL PRI, de 1988, PARA CONTAR VOTOS, SIEMPRE DEBE HABER QUORUM, CON LA DEBIDA REPRESENTACIÓN DE LOS CONTENDIENTES Y DE NO HABERLO, DESDE ENTONCES, NO SE RECONOCÍAN LEGITIMIDAD, NI LEGALIDAD AL ACTO O SESIÓN Y HAY QUÉ REPONERLO.
Ya no es cuestión de quién gane, sino de legalidad, respeto y LA SUBORDINACIÓN COMPROMETIDA Y TRANSPARENTE QUE DEBE EL GOBIERNO A LA CIUDADANÍA. Porque de las tramperas políticas electorales venimos y no debemos querer volver: “para atrás, ni para agarrar aviada”. El que llegue, debe someterse a dichos principios o no habrá ni tendremos unidad ni confianza: Por eso no debe tolerarse sino el estricto derecho o perdemos todo.
Tampoco debe extrañarnos, si sucede, pues al caer la URSS, pocos años después, la gente pedía de vuelta a Stalin ¿Y qué creen? A los pocos años eligieron a Putin, y reeligieron dos veces, y luego mejor hasta el 2030 -en principio. Burlesca y sádicamente invitó a votar y votó en las elecciones de las “nuevas provincias ucranianas” anexadas por él, con su guerra.
Para él mismo las elecciones no son necesarias, pues con su mayoría reformó la Constitución, previo referéndum, por el costo de las reelecciones y prácticamente no tener que ser votado antes de morir: Restableciendo “legal-democráticamente” al régimen zarista medieval, sin ciudadanía ni Constitución, versallesco estilo, Luis XIV.
Sentenció la sabiduría china, que debe tenerse cuidado con lo que se desea -incluso el pueblo a través de su voto-, pues puede concedérsenos ¿Los mexicanos qué régimen y a quién legitimaremos con nuestro voto? Y mejor dicho, qué queremos que nos sea concedido.