Norberto Amaya A. ///// Ciudad de México a 22 de marzo de 2017
Twitter: @Amaya5M.
El día de ayer me llegó la invitación de mi amigo, Alejandro Encinas Rodríguez, senador de la reública, para participar en el encuentro denominado : “Llamado por México”, dónde se plantean la realización de análisis en mesas de trabajo y por supuesto la participación de líderes políticos y sociales, pero también de organizaciones y académicos. La convocatoria y los temas son interesantes.
Creo que vamos a acudir para dar el debate. Ya sabemos que ahí se aglutinan muchos que participan en “Por México Hoy” y en la Fundación para la Democracia, que preside el Ingeniero, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano. El evento es éste sábado 25 de marzo (en la sede de la Comisión de Derechos Humanos) y claro que vamos a debatir ideas y a proponer. Por otro lado, estamos impulsando el Frente Amplio y el Acuerdo por un México Democrático. Todo debe sumar y se posible dentro de la tolerancia.
En los recorridos que se han realizado por diversos estados del país, para la firma del “Acuerdo para la Prosperidad y el Renacimiento de México”, impulsado por diversas personalidades y movimientos sociales, observamos como la gente acude entusiasta y se convierte en un grito único que demanda el cambio político, social y económico en México. Reconoce la necesidad de la unidad y las alianzas, pero también del acuerdo entre diferentes y lo que cada uno representa.
Vale también señalar que hay sectores inconformes por la actitud sectaria de algunos dirigentes del aparato de Morena , que por cierto, son los menos y han sido rebasados. El movimiento es por un México de esperanza y alternativa para los nuestros y para nuestros descendientes.
Los ataques contra Andrés Manuel López Obrador (AMLO) son cada vez más arteros y se usan todos los medios posibles para descalificar sus acciones o tergiversar sus declaraciones. Ya ha sucedido en otras ocasiones. Eso pasó en su viaje a Estados Unidos, cuando acudió a solidarizarse con nuestros compatriotas, a denunciar el racismo y la persecución de los migrantes. La provocación estuvo a la orden del día. No falto la prensa o algunos comunicadores que se hicieron eco de las falsas declaraciones y se intento minimizar su participación ante la CIDH o los mensajes que envió a la ONU.
Por cierto, en la OEA, el “lacayo”, Luis Almagro, anda interesado en defender los asuntos del imperio que en asumir una actitud digna y de compromiso con América Latina. AMLO hizo escuchar su voz y su presencia se agigantó ante la pequeñez de sus supuestos rivales para el 2018. Calderón y Margarita Zavala, junto con Enrique Ochoa Reza, ambos del (PRIAN) se vieron minimizados, groseros y faltos de calidad para dirigir a México.
Escuchar a Andrés Manuel López Obrador, nos da frescura y esperanza, con el tiempo y los años nos volvimos más cautos y reflexivos, pero con mayor experiencia. ¿Cuanto perdimos en varias batallas? No sé, pero pienso que ganamos. El recorrido por municipios y estados de la república son reflejo de acción y compromiso. Varios dirigentes o políticos, o académicos y ciudadanos hemos perdido mucho tiempo en lo material y en lo físico, pero ganamos en lo humano, así somos ahora. Lo que venga hay que hacerlo con todo el criterio y esfuerzo. No hay dobleces.
Los años nos demostraron que la organización y el trabajo rinden frutos, debemos entonces impulsar la formación del Frente Amplio con todas las fuerzas y liderazgos políticos, pues una mayoría en el Congreso de la Unión es necesaria para sacar adelante la reconstrucción de la patria y la generación de riqueza para todos. Somos lo que hicimos y vivimos porque así se nos dio la vida. Hablar sobre lo que viene y escuchar a las voces de la sociedad es recuperar lo que algunos dejamos en el camino, pero es volver a soñar, otra vez. López Obrador no es Dios, pero si es un dirigente que ahora demuestra congruencia y debe dejar de lado las exclusiones, sobre todo de quienes con él han hecho política y otros que se alejaron por discrepancias en su forma de actuar y conducir el movimiento que ahora se llama Morena. Lo demás vendrá después. Bueno, así pensamos, a algunos les disgusta y a otros les incomoda.
Desde que nací, entiendo que hay que andar en las buenas y en las malas, nunca nada ha sido fácil, Vivamos con otros la posibilidad de realizar un análisis y relanzar juntos la firma por un México de iguales y relanzar la propuesta de un “Firma por una Gran Alianza y un Frente Amplio por México”, de carácter democrático y que junto con AMLO haga posible el cambio de régimen. Se puede y lo veremos.
Hay necesidad de reflexionar. A nuestro pueblo le está pesando mucho lo que está sucediendo. No se puede vivir con sesenta pesos al día o con las miserias que nos pagan a bajo precio lo que producimos. Es más, hasta nuestro trabajo intelectual y profesional ha sido degradado, ya no sirve lo que te ingresa en familia y lo que gastas día con día. Los altos precios del gas, luz, teléfono, servicios, impuestos o agua, por decir lo menos, son una masacre contra la gente. ¿No ven o no oyen? Es necesario hacer las alianzas, no podemos ser soberbios y mucho menos pensar que tenemos la razón en todo, pues es de lo que nos quejamos y lo que criticamos. El país merece otro rumbo, demos oportunidad de gobernar a Andrés Manuel López Obrador. No seamos ingratos, el tiempo nos dirá si nos equivocamos o acertamos.
Reflexiones. A mis amigos o compañeros que me preguntan les contesto lo que se debe, no se vale mentir. Les digo que ya soy “cincuenton”, que no me alcanza para dar la vuelta, otra vez al país. que no tuve la fortuna de que camínaramos juntos. Lo hice con Cuauhtémoc Cárdenas muy joven e involucre a mi familia, quienes no se anduvieron por las ramas y otorgaron recursos materiales y físicos. Así nos fue, pero mi padre nos guió y orientó. Hoy estamos firmes con el dirigente de Morena y con quienes hemos dado batallas juntos, Andrés Manuel López Obrador, sin medias tintas. Al tiempo.
Correo: norbertoamaya21@gmail.com