Muelle 1
Carlos Alberto Duayhe
Plena coincidencia con muchos colegas y otros analistas en lo que dicen y lo que es, relativo a que el gobierno de Donald Trump evidentemente trae un plan general que está aplicando y que según van los acontecimientos va modificando día con día.
Aunque otros también de seriedad y prestigio aseguran que de plano es tal su carácter, personalidad, soberbia y ambición, que está de mírame y no me toques con su arrogantes y sorprendentes decisiones y calificaciones sin ton ni son.
Sea el caso que sea, recordar que desde antes de asumir la presidencia Donald Trump ya enviaba señales claras en lo que considera recuperar en el mundo, a su manera, la grandeza de su país.
Sean aranceles, desplantes, ataques militares -como los de la semana anterior en Yemen- y lo que se ocurra para sus causas y con muchos medios de comunicación convencionales y redes que todo le celebran y los que no se van a ya saben adónde.
Son determinaciones políticas y económicas vistas hasta hoy, de nervios.
Sus grandes aliados tradicionales del llamado occidente a los que no ha tratado nada bien y que no deja de arremeter contra de ellos, que ya no ven la suya.
Y está más que visto en el horizonte: China.
Trump ya ha mencionado algunas aproximaciones con su contraparte asiática, a la que le aplicó y en serio 125 por ciento de esos impuestos a todo lo que exportan a Estados Unidos y que puede subir hasta 240 por ciento.
Vienen semanas de máxima atención hasta que termine la famosa pausa arancelaria al mundo, a principios de julio entrante, lapso en el que seguramente el equipo de Trump y él mismo habrán de tomar decisiones correspondientes con su política clara de pega y luego averiguas.
El gran discernimiento entre lo que se dice y lo que es con Trump cuenta poco, porque hay que estar muy atentos en ambas circunstancias en tanto hace sus ajustes.
Atraques
1. Ni qué decir de Trump y sus majaderías a México y a Canadá, partícipes con Estados Unidos del Temec, a los que califica que viven de ellos.
2. El subdirector de producción de Liconsa, Hugo Buentello Carbonel, fue detenido la semana anterior por presumible fraude a Segalmex, parece que se llevó o se llevaron mediante contratos falsos algo así como 400 millones de pesos de leche no entregada. Ahora sí el malaleche, otro de nervios.
3. Urgentes campañas de limpieza en carreteras y autopistas del país, parece ser práctica generalizada que no acaba por falta de información y de infracción, en su caso.