Yo Campesino / Asesinatos 140 mil
• Los 650 mil muertos por Covid-19, 36 mil desaparecidos y 200 mil huérfanos no marcharán
*Miguel A. Rocha Valencia*
Me consta que con limosnas el ganso tiene comprados a millones de “agradecidos” que como bien dicen “nadie más les regala”, importándoles poco si a cambio, los servicios de salud se deterioran, si crece el número de muertos de enfermedades crónico degenerativas por ausencia de tratamientos o medicamentos; si por eso sus hijos o nietos carecen de empleo, si no tienen salarios dignos ni mucho menos que el país se endeude y aumente el número de pobres.
Para ellos, las becas y pensiones con que les comprarán su simpatía, será una obligación “moral” acudir a una marcha oficial para ensalzar al mesías tropical y de esa manera muestre a México y al mundo que es el todopoderoso, el más amado del planeta.
Será un acto de desagravio porque unos cuantos ciudadanos se atrevieron a decir; “con el INE no te metas”, y al mismo tiempo, le tomaron la calle multitudinariamente, sin acarreos, lonches, pensiones, becas a croquetas, sino simplemente por considerar que el jefe del Ejecutivo, con el presupuesto, el crimen y las armas a su espalda, pretende destruir la institución que paradójicamente validó su triunfo electoral.
Tal vez por eso y ya envalentonado, una vez más el machuchón tabasqueño se atreva a violentar la ley y dar la voz de arranque a su jauría para con ese mismo método, adelantarse a los tiempos electorales, se asuma como lo que es, el jefe de una pandilla llamada Morena y llame a “votar masivamente” por la permanencia del cambio.
Que vote la gente no sólo a favor del candidato presidencial de Morena sino también de legisladores para así tener manos libres y terminar de destruir institucionalmente al país y gobernar con una dictadura de facto con una Constitución a modo. La actual, la viola permanentemente.
De hecho, quiere mostrar con todo el acarreo a realizar por 22 gobernadores y el aparato federal, que, por proclama, él podría alzarse como el Rey de México, absolutista donde sólo su Ley, la del ganso, prevalezca ya sea con él a la cabeza o a través de alguna de sus incondicionales corcholatas.
Quiere hacer de las calles el terreno electoral, la dizque democracia directa, que el pueblo decida donde el caudillo macuspanense sea el intérprete de los intereses del pueblo bueno, de los pobres, que por cierto de acuerdo con el Inegi, volvieron a aumentar y hoy, México ya es un país de miserables.
Por eso su deseo no es mejorar las condiciones de vida sino deteriorarlas cada vez más, hacer dependientes de la dádiva oficial a un mayor número de mexicanos. Ya tenemos el 52 por ciento de la población en condiciones miserables y otro 12 por ciento en pobreza laboral, que conste, datos del Inegi.
Tal vez por eso tampoco le importa que la gente fallezca por enfermedad, por falta de medicamentos, tratamientos, estudios o atención. La estimación es que al menos por Covid-19 murieron 250 mil más y por males crónicos y sus consecuencias otros 100 mil.
Y como los muertos no marchan ni votan, tampoco importa si las masacres continúan, si la violencia del crimen acumula 140 mil asesinatos y si por diversas razones hay mexicanos que desaparecen sin dejar huella; se tienen contabilizados 100 mil en una década y de ellos 37 mil corresponden al actual gobierno. Se les presume muertos o incorporados como “soldados” en las filas de la delincuencia.
Eso no importa, lo que sí vale la pena para el tlatoani olmeca, es mostrar no sólo que es presidente constitucional de México sino que desde el poder es capaz de mover masas, utilizar recursos financieros municipales, estatales y federales para pagar medios de comunicación que le den cobertura, acarrear gente a que le rindan tributo y a retar a quienes creemos en expresiones democráticas institucionales sin que se nos pague, amenace o nos lancen limosnas que al final hipotecan el futuro de un país.
No se dan cuenta quienes van a la marcha que quienes vienen atrás de ellos, pagarán con futuros e ilusiones rotas las miserables dádivas de los programas clientelares que por cierto queda claro en los análisis de la Auditoría Superior de la Federación, están corrompidas y sirven para desviar “cash” para la causa del ganso de Macuspana.
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