Andy S. K. Brown
Ni se crea usted que son los de Guanajuato, Jalisco y Colima con quienes limó asperezas la semana que hoy termina. Tampoco son aquellos que aparecen rankeados en los primeros cinco lugares de las casas encue$tadoras que, con ellos, han encontrado una nueva fuente de ingresos, luego de que el gobierno federal, el de la “austeridad republicana”, les cortara los jugosos contratos de los que antes disfrutaban.
No. No es Sinhué, mucho menos Alfaro, tampoco Nacho. El miedo no anda en burro, como bien dicen en México, y tras dos que tres ajustes y muestras de expedientes, los primeros dos se allanaron. El tercero también anda con la cola entre las patas por su cercanía con Luis Videgaray, el presunto implicado en las confesiones de Emilio Lozoya.
Y no. Los gobernadores consentidos de AMLO no son, definitivamente, los morenos. Estos más bien lo tienen punto más que decepcionado. Si acaso, quien tiene un poco más de cercanía es su paisano tabasqueño Adán Augusto López, pero no por méritos propios, sino por ser hermano de la esposa del mandatario chiapaneco Rutilio Escandón. Rosalinda López, en efecto, es hija de Payambé López Falconi, amigo íntimo del ahora Presidente de México.
Por sus obras no los conoceréis
Son tres los priístas cercanos al afecto de López Obrador. En primer lugar el sinaloense Quirino Ordaz Coppel. ¿Buen gobierno? No. Comparte con AMLO su afición al rey de los deportes, eso sí, como antes conllevaba con Peña Nieto su afición al golf.
Por coincidencia de proyecto político, López Obrador ha permitido que el hidalguense Omar Fayad Meneses se le acerque. Lo ve con muy buenos ojos, sobre todo después del incidente de Tlahuelilpan, donde casi un centenar de personas murieron tras el incendio de un ducto del que se llevaban gasolina. Fayad y sus más cercanos colaboradores manejaron la situación a satisfacción del Primer Mandatario.
Consentido, consentidazo es el oaxaqueño Alejandro Murat Hinojosa. No hay gobernador que pueda presumir tantas visitas de AMLO a su entidad como él. Le tiene un muy especial aprecio, luego de que fue el único priista que, como diputado, votó en contra de su desafuero en la LIX Legislatura federal.
Le da importancia a lo familiar
El quintanarroense Carlos Joaquín González debe agradecer a su medio hermano Pedro Joaquín Coldwell las migas que él también mantiene con el principal protagonista de las “mañaneras”. La buena relación entre quien fuera secretario de Energía en el sexenio anterior se ha mantenido desde que muy joven fuera también mandatario estatal de Quintana Roo.
Y aunque lo considera muy regionalista, el queretano Pancho Domínguez Servién también goza del oído presidencial, lo que ha convenido al bloque de gobernadores panistas, lo mismo que a la Conago para destrabar conflictos recientes con Palacio Nacional, como es el caso del nuevo pacto fiscal que los blanquiazules, sobre todo, han venido reclamando.
En la cola, muy lejos del afecto, está la sonorense Claudia Pavlovich, a quien no obstante se le brinda el trato caballeroso que se merece una dama. ¿Sabe alguien por qué será?
Lo personal
Miami, Fort Lauderdale y West Palm Beach, en el sur de la Florida, están llenos de mexicanos fifís que poseen condos y residencias. Huyeron de México cuando empezó la pandemia. Ahora que esta zona se ha convertido en el epicentro del Covid-19, ya quieren regresar “aunque todavía sea Presidente López Obrador”. Desde acá dieron la pelea, jajajaja.