* Terrible ridículo enfrenta el ex gobernador de Coahuila, tras subir a su cuenta de “X” un cometario acusando al gobernador, Julio Menchaca, por la agresión sufrida por un padre y su hijo en autopista México-Pachuca, Moreira aseguró que el hecho se dio en las carreteras de Hidalgo, pero no tuvo el cuidado de checar que el asunto se registró en la demarcación mexiquense de Tecámac, municipio que nada tiene que con Hidalgo; además de ignorante el coahuilense puso en evidencia que él viajea como magnate, solo en aviones, y rara lo hace por tierra, razón por la que desconoce las carreteras que los ciudadanos comunes
sí conocemos
SILOGISMOS
Por Antonio Ortigoza Vázquez
Especial de Expediente Ultra
Todavía respirando por la herida, priístas de baja estofa como el ex gobernador de Coahuila, Rubén Moreira, insisten en bordar ataques mediáticos en el vacío o, mejor dicho, en el terreno de la franca ignorancia que raya en la imbecilidad.
Sucede que tras difundirse un video en las redes sociales, entorno a la agresión que sufrieran un padre e hijo en la autopista México-Pachuca, por parte de maleantes a los que grabaron con un celular, lo que provocó la ira de los matarifes, baleando su unidad e hiriendo gravemente al vástago, el esposo de la candidata perdedora a la gubernatura y senaduría del Estado, Carolina Viggiano, se apresuró a subir el hecho a su cuenta de “X”, añadiendo un comentario en contra del gobernador Julio Menchaca, señalándolo de perseguir a sus enemigos políticos pero no al crimen organizado en las carreteras de Hidalgo.
Y qué decir sobre tal disparate del ex mandatario coahuilense porque ni siquiera se tomó la molestia de checar que el kilómetro de la México-Pachuca donde se registró el hecho nada tiene que ver con la jurisdicción hidalguense, pues se ubica en el municipio mexiquense de Tecámac.
Aunque viéndolo bien, podría no ser tan duro este columnista con la monumental pifia de Moreira, pues debe entender que el señor, como su cónyuge y otros miembros más de su agonizante partido, se han dado vida de magnates viajando en aviones, lo que explica su ignorancia y desconocimiento por las carreteras del país.
En septiembre del 2021, el presidente AMLO les dio una tremenda exhibida sobre los mecenazgos que obtuvieron por años de parte del entonces prófugo Alonso Ancira, propietario de Altos Hornos de México, quien en pago a favores y negocios operados desde el poder por los corruptos priístas a favor del también corrupto Ancira, llegó a financiar avión privado, hoteles de gran lujo, limosinas, vinos caros, caviar y otros extravagancias a Rubén Moreira, con montos de alrededor de 58 millones de pesos.
Cómo se recordará, con la llegada de la 4T al poder, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), le detectó al empresario un fraude fiscal por 216 millones de dólares, amén de otras irregularidades más, que sus amigos priístas le permitieron en sexenios como el de Enrique Peña Nieto.
En la investigación enfilada en su contra, aparecieron como consentidos de la “generosidad” del delincuente de cuello blanco, otros personajes como el ex Director de Pemex, Emilio Lozoya, quien se benefició de la chequera del magnate con viajes y otros lujos por 12 millones de pesos; también se mencionó al ex gobernador de Sonora, Manlio Fabio Beltrones, con 8 millones de pesos en sus gastos de avión y otras “chcherías”. La propia e impoluta, Carolina Viggiano, figuró en la piñata de Ancira con dos millones 536 mil pesos.
Con este tren de vida, es fácil deducir que estos políticos no conocen de andar en las carreteras como cualquier ciudadano de a pie; por eso seamos un poco comprensivos con la sandez escrita en su cuenta de “X”, Moreira.
Se entiende su ignorancia sobre lo que ocurre en la vida real y a ras de suelo. Lo menos que puede hacer es pedir una disculpa y salir con el rabo entre las patas; eso sí, a bordo de su avión porque eso de andar por las carreteras no lo es lo suyo, ni de Carolina, ni Beltrones, ni Alito y todo el séquito de hampones políticos que andan todo el tiempo en las nubes y solo se digna bajar cuando se trata de respirar por la herida, producto la terrible derrota de junio pasado, lanzando ataques sin fundamento que los exhiben ante la gente que sabe perfectamente que Tecámac no es parte de Hidalgo.
¿Así o más borrico, señor Moreira?