Diario Ejecutivo
- Los transgénicos y la hipocresía ambiental
- Salvemos al planeta, pero antes a las empresas
- Empleo, tasas, industrias, moda, aeropuerto, reas
Roberto Fuentes Vivar
El secretario de Agricultura estadunidense, Tom Vilsack, anunció ayer que su país considera acudir al Tratado de América del Norte (T-MEC) si no logra una solución favorable a la prohibición mexicana al uso de maíz transgénico a partir de enero de 2024.
Desde México y tras reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador, el representante de la Casa Blanca hizo eco de las protestas de productores estadunidenses que alegan pérdidas multimillonarias por la decisión mexicana y presionan para que su gobierno obligue a nuestro país a eliminar la prohibición.
El presidente mexicano, desde luego, reiteró que se mantendrá el veto al maíz genéticamente modificado. “No queremos maíz transgénico para consumo humano, no lo vamos a permitir”, enfatizó López Obrador.
La amenaza del gobierno estadounidense es una muestra de la hipocresía de ese país y de muchas industrializados que supuestamente claman para salvar al planeta e imponen normas de conducta a naciones pobres, pero defienden la contaminación cuando se trata de proteger a sus empresas.
El caso de los transgénicos es de tal manera contaminante que se han realizado decenas de estudios independientes que demuestran científicamente la forma en que destruyen al planeta, pero Estados Unidos los protege y hasta financia investigaciones para concluir en que hasta ayudan a salvar la tierra.
De hecho, otro ejemplo de esta hipocresía son los llamados “Acuerdos de París”, firmados por alrededor de 160 países (Estados Unidos lo hizo de manera tardía) y centenares de empresas en el cual se busca reducir sustancialmente las emisiones de gases de efecto invernadero para limitar el aumento de la temperatura global en este siglo y ofrecer financiación a los países en desarrollo para que puedan mitigar el cambio climático, fortalecer la resiliencia y mejorar su capacidad de adaptación a los impactos del cambio climático.
Pero ni una sola palabra sobre los organismos genéticamente modificados o transgénicos. Es como si se intentara eliminar el humo que envía un anafre y al mismo tiempo se envían contaminantes al subsuelo. Hipocresía pura, pues.
La destrucción de los transgénicos es tal que hasta dos de los países que son sede de las principales empresas productoras de semillas genéticamente modificadas (Alemania de Bayer-Monsanto y Suiza de Syngenta) los han prohibido total o temporalmente. Mientras tanto Estados Unidos (sede de Dow Chemical y Dupont) intenta que países sobre los que tiene influencia (como México) los aprueben incondicionalmente.
Nada más para dar una idea de lo que significa el comercio de estas cinco empresas, hay que señalar que sus ventas superan los 50 mil millones de dólares, principalmente por concepto de semillas y fertilizantes.
Concretamente la hipocresía de Estados Unidos, sobre todo ahora con Joe Biden, es que mantiene dentro de sus prioridades el cuidado del medio ambiente, pero al mismo tiempo defiende a los productores de transgénicos.
En este sentido, un comunicado del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) informó que, durante el encuentro, Vilsack planteó a López Obrador y a altos funcionarios mexicanos las profundas preocupaciones de la Casa Blanca y los agricultores de su país por prohibir el maíz genéticamente modificado.
México, desde finales de 2020 anunció la eliminación del maíz transgénico y del herbicida glifosato, lo que ha ocasionado una ola de descontento por parte de empresas, pero el apoyo de los productores de maíz criollo o nativo y de decenas de organismos de la sociedad civil no financiados por Washington y hasta de Greenpeace.
Según el secretario de agricultura estadounidense, “el decreto de eliminación gradual del Presidente (mexicano) tiene el potencial para interrumpir sustancialmente el comercio, perjudicar a los agricultores en ambos lados de la frontera y aumentar significativamente los costos para los consumidores mexicanos”.
Y desde luego, para proteger a sus empresas y productores, Tom Vilsack, fue más allá con la amenaza, pues dijo que prohibir el maíz transgénico, impactaría significativamente la relación comercial bilateral, que en 2021 alcanzó un valor récord de más de 63 mil millones de dólares y se estima sea mayor para 2022.
De hecho, este caso será abordado en la Cumbre de Líderes del Norte que se realizará en enero, según informó el canciller Marcelo Ebrard.
De acuerdo con Centro de Estudios para el Cambio en el Campo Mexicano (Ceccam) la historia de los transgénicos comenzó en nuestro país en 1988, cuando el Gobierno mexicano autorizó la primera siembra experimental de tomate genéticamente modificado a la empresa Sinalopasta, en Guasave, Sinaloa. Hasta hace cinco años se habían solicitado 356 sitios distintos de liberación de transgénicos.
El 6 de marzo de 2009, el gobierno de Felipe Calderón publicó en el Diario Oficial una serie de reformas al reglamento de la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (lbogm) que formalizaron el inicio de la desregulación del cultivo de maíz transgénico en México, lo que significó un golpe sucio a la sociedad civil que intentaba prohibirlos.
La situación cambió con el nuevo gobierno y en 2020 se prohibió el maíz genéticamente modificado. Paralelamente, la Suprema Corte ha rechazado todos los amparos presentados por algunas de las mayores empresas agroindustriales del mundo, que buscaban acabar con la suspensión de la siembra de semillas genéticamente modificadas en el país.
Y Estados Unidos se queja desde que desde hace cuatro años no se aprueban los transgénicos, El departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), señalaba hace unos meses: “El entorno de la política regulatoria de la biotecnología en México se ha vuelto cada vez más incierto bajo la administración actual. Hay una creciente acumulación de alimentos y piensos biotecnológicos actualmente pendientes de aprobación, muchos de los cuales han superado el plazo de revisión y aprobación reglamentario”.
Ahora, a fines de este año, el secretario de agricultura estadounidense, con la mayor hipocresía de su país amenaza con afectar las relaciones comerciales con México, si no se aprueba el maíz genéticamente modificado de sus productores.
¿Y el cuidado del medio ambiente, en donde quedó?
Dice el filósofo del metro: para Estados Unidos, lo único verde es el dólar.
Tianguis
El Instituto Nacional de Estadística y geografía (INEGI) dio a conocer la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, Nueva Edición al cierre de octubre. La Población Económicamente Activa fue de 60.4 millones de personas y de ellas, 58.4 millones (96.7 por ciento) estuvieron ocupadas, es decir dos millones más que en el mismo mes de un año antes. Las personas subocupadas fueron 4.4 millones (7.5 por ciento de la población ocupada). Esto es una reducción de 1.9 millones de personas con relación a octubre de 2021.La población desocupada fue de dos millones de personas y la Tasa de Desocupación (TD) de 3.3 por ciento de la población económicamente activa. Respecto año anterior, la población desocupada descendió en 324 mil personas… La mayor parte de los analistas coinciden en la posibilidad de que las tasas de interés comiencen a descender. Un ejemplo es CIBanco que señala: “el mercado empieza a ver el final de las subidas de tasas de interés en el mundo. En un año de caídas en renta fija y en renta variable el dólar se ha convertido en el activo refugio estrella junto con las materias primas”. De hecho, añade, el mercado empieza a ver el final de las subidas de tasas… Abraham Fernández, director para el sector industrial de Newmark, consideró que existen “inigualables” oportunidades de que el nearshoring (acercamiento de producción con los clientes) sea benéfico para México. Dijo que industrias como la farmacéutica, energías renovables, textil, automotriz, se ubican como las más beneficiadas. “Ciertas industrias continúan en una expansión franca y buscarán aprovechar las oportunidades que toda crisis trae consigo, pues como hemos visto históricamente, en los momentos de mayor crisis es donde surgen las oportunidades de negocios más grandes”… Jacob Pulido, director de Fashion Forward, afirmó que la moda mexicana cobra cada vez más fuerza, gracias a que los diseñadores mexicanos entienden cada vez más las necesidades de sus consumidores. “La industria de la moda mexicana se ha consolidado en los últimos años. Creatividad, ideas, potencial y colores se fusionan con talentos mexicanos emprendedores que buscan surgir, a través de colecciones de ropa, zapatos o joyería, llenas de propuestas”, señaló… La Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero) reiteró su compromiso de trabajar en conjunto con las autoridades y desarrollar un plan ordenado con el objetivo de generar las condiciones necesarias en aspectos operativos, comerciales, sociales y de infraestructura. Y consideró que la recuperación de la Categoría 1 debe ser la prioridad principal de gobierno e industria, ya que este importante logro será un catalizador para la conectividad aérea con nuestro principal mercado internacional en donde el AIFA (Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles) podría jugar un papel fundamental… Interesante que la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en México y Tuiio, la iniciativa de Inclusión Financiera de Banco Santander, establecieron una alianza para brindar capacitación en educación financiera a mujeres privadas de la libertad en el Centro Femenil de Santa Martha Acatitla, en el marco del programa “De vuelta a la comunidad”. Norma Castro Reyes, Directora Ejecutiva de Inclusión Financiera de Santander México, enfatizó en la importancia que tiene el empoderamiento para las mujeres mediante la obtención de conocimientos en educación financiera, donde Tuiio ha tenido un impacto destacado los últimos años atendiendo a más de 375 mil clientes, de los que un 98% son mujeres.