José Alberto Sánchez Nava
“La independencia judicial, según Luigi Ferrajoli, es el pilar insustituible de cualquier democracia; sin jueces libres de influencias políticas, México corre el riesgo de someter la justicia al poder, diluyendo los derechos fundamentales en la arbitrariedad del gobierno.”
1.- Introducción
La conversación* con Luigi Ferrajoli, uno de los más grandes juristas contemporáneos, nos invita a reflexionar profundamente sobre la independencia judicial, un principio que él considera fundamental para la preservación de las democracias constitucionales. Ferrajoli, defensor del garantismo y los derechos fundamentales, ha sido un crítico agudo de cualquier intromisión del poder político en el ámbito judicial, una postura que resulta de gran relevancia en el contexto actual de la reforma judicial en México.
2.-Ferrajoli y el Garantismo Judicial
Ferrajoli ha señalado reiteradamente que el garantismo, un enfoque que prioriza la protección de los derechos fundamentales y el sometimiento del poder a la ley, es inconcebible sin una justicia verdaderamente independiente. Este concepto de garantismo, que Ferrajoli ha desarrollado en obras como “Derecho y Razón”, parte de la premisa de que los jueces deben ser agentes imparciales y autónomos frente a los otros poderes del Estado, para evitar cualquier forma de coerción o influencia política.
En la conversación sobre la situación de la justicia en México, Ferrajoli subraya que el mayor peligro de la reforma judicial es que, si no se garantiza esa autonomía, se corre el riesgo de que el poder judicial se convierta en un apéndice del Ejecutivo. Esto, según el jurista, debilitaría las garantías de los ciudadanos, ya que, al perder independencia, los jueces dejarían de ser los guardianes de los derechos fundamentales para convertirse en instrumentos del poder político.
3.-La Reforma Judicial en México: ¿Hacia un Poder Judicial Más Fuerte o Más Sumiso?
En el marco de la reciente reforma judicial en México, se ha promovido un discurso sobre la necesidad de transformar el poder judicial para hacerlo más eficiente y accesible. Si bien estos objetivos parecen loables, Ferrajoli advertiría sobre los riesgos que esto implica si no se implementan las salvaguardas adecuadas para preservar la autonomía de los jueces.
Uno de los puntos clave de preocupación es la creciente concentración de poder en manos del presidente y la posibilidad de que esta reforma judicial sea utilizada para consolidar un control indirecto sobre el poder judicial. Ferrajoli ha advertido en otras ocasiones sobre las amenazas que esto representa para el sistema de pesos y contrapesos que debería caracterizar a cualquier democracia constitucional. Para él, los jueces no deben estar subordinados ni al gobierno ni a las mayorías, sino únicamente a la ley y a la Constitución.
4.-El Peligro de las Reformas Politizadas
Ferrajoli ha sostenido que la politización de la justicia es uno de los grandes males que enfrenta la democracia moderna. En su análisis, cualquier reforma judicial que no garantice de manera explícita y efectiva la independencia de los jueces, se convierte en un arma política que puede ser utilizada para silenciar o coaccionar a aquellos que deberían actuar como contrapeso. En el caso de México, Ferrajoli podría ver con preocupación cualquier intento de influir en el Consejo de la Judicatura o en las instancias que nombran y supervisan a los jueces, ya que estos órganos deben estar blindados frente a las presiones del Ejecutivo.
El jurista también subraya la importancia de un poder judicial independiente para la lucha contra la corrupción y la impunidad, dos problemas endémicos en México. Sin jueces que sean inmunes a las influencias políticas y económicas, es imposible llevar a cabo una verdadera justicia en casos de corrupción de alto nivel. Para Ferrajoli, solo un poder judicial autónomo puede cumplir su papel de freno y contrapeso en la sociedad.
5.-Reflexiones Finales: Ferrajoli y el Futuro de la Justicia en México
El pensamiento de Ferrajoli nos invita a mirar más allá de las reformas que prometen modernizar el sistema judicial. Nos urge a preguntarnos: ¿Estas reformas realmente fortalecerán la independencia judicial? ¿O, por el contrario, crearán mecanismos que permitan un mayor control político sobre los jueces? En su visión, cualquier intento de intervención política en el poder judicial, por más noble que parezca, es un atentado contra los derechos fundamentales de los ciudadanos y contra la esencia misma del Estado de Derecho.
El debate sobre la reforma judicial en México, a la luz de la filosofía de Ferrajoli, debe centrarse en cómo preservar y fortalecer la independencia judicial. Porque solo un sistema de justicia que esté libre de interferencias externas puede garantizar la equidad, la protección de los derechos y el imperio de la ley.
Luigi Ferrajoli, con su vasto conocimiento y su defensa inquebrantable del garantismo, nos recuerda que la verdadera reforma judicial no consiste en concentrar más poder, sino en garantizar que el poder esté distribuido y sometido a las normas y principios que protegen a los ciudadanos. El futuro de la justicia en México depende de cómo se resuelvan estas tensiones fundamentales.
*Conversación con Luigi Ferrajoli sobre la Independencia Judicial