El fin de semana anterior fue totalmente mediático a favor de Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno del Distrito Federal. El retorno del Gran Premio de Fórmula 1 (GPF1) en terrenos de la Ciudad de México, lo puso en el top entre los medios de comunicación.
No obstante los arrestos del presidente Enrique Peña Nieto por dejar en claro que el Gobierno federal y la Iniciativa Privada (IP), fueron quienes más aportaron en materia económica y hasta promoción al proyecto para que la Fórmula 1 (F1) regresara a México; sus esfuerzos fueron opacados por la simple ubicación geográfica en donde se desarrollo el GP de México: En el Distrito Federal.
En Los Pinos advierten que todo el trabajo y dinero que invirtieron como federación para traer al país esta justa deportiva internacional, recayó en beneficio del mismísimo Mancera a quien igual le hacen el trabajo de la desindexación del salario mínimo, como la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el aperturar de nuevo el debate sobre la despenalización del consumo de la mariguana.
Para ser justos empero, cabe advertir que el costo anual de 72 millones de dólares (mdd) del GP de México, es cubierto de la siguiente forma: El Gobierno federal es el que cada año habrá de desembolsar –como lo hizo en este 2015–, la cantidad de 42 mdd a través del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), el cual depende de la Secretaría de Turismo y la Corporación Interamericana de Entretenimiento (CIE) pagará 30 mdd por los derechos comerciales de la carrera automovilística. Esto lo harán durante cinco años para un acumulado de 210 mdd por la Administración federal y de 150 mdd por CIE.
El Gobierno de la capital –ahora encabezado por Mancera–, sólo alberga el evento deportivo del GP de México y se compromete a mantener la accesibilidad y mobiliario urbano colindante con el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Así que Miguel Ángel Mancera fue el campeón de la justa política y económica del GP de México, pese a todos los esfuerzos por de último momento por arrebatarle este triunfo que hicieron desde el mismo Peña Nieto, como Claudia Ruiz Massieu, Enrique de la Madrid Cordero –ex y actual secretarios de Turismo, respectivamente–, así como otros tantos más funcionarios de la Administración peñista que se pasearon por el recinto del Autódromo. Sin embargo, de ninguna manera lograron quitarle reflectores a Mancera, no obstante ellos los colocaron.
Acta Divina… Desde la Presidencia de México se advirtió con oportunidad que todo estaba listo para el GP de México.
Para advertir… Un gran punto para Mancera a cargo del Gobierno de Peña Nieto.
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