Somos presas indiscriminadas de los poderes fácticos, la campaña orquestada en contra del gobierno de Donald Trump ha sido totalmente manipulada por los grandes consorcios financieros del mundo.
La gran mayoría han girado sus miradas hacia los efectos más escandalosos y superficiales de la ideología seguida y aplicada por el nuevo gobierno de USA, Trump aunque sea el peor de los seres humanos ha sido consecuente con lo prometido, pero no todo lo que prometió ha sido publicitado de igual manera.
Trump efectivamente está dispuesto a expulsar a millones de indocumentados, pero lo que no se dice es que está iniciativa ya existía con Obama y se cumplía sin enfado alguno durante su mandato.
Tampoco se dice que otra solución para muchos miles de indocumentados es que se reconozca su estatus migratorio otorgándoles el beneficio de un trabajo legal, pero no hay muchos empresarios o amas de casa gringos que estén dispuestos a legalizar a sus albañiles, campesinos. trabajadores y domesticas esclavizados. Si son ilegales no es porque sean flojos o pendencieros, sucios o desleales, es simplemente porque los contactos que encuentran los USA les explotan, y de más está decir que esos contactos en su mayoría están en la principales ciudades de estados que señalan a Donald Trump como un criminal racista y xenófobo, la solución es tan sencilla como que cada artista , empresario, político, gringos indignados hipócritamente con las políticas migratorias de Trump, apadrinen el estatus de migrantes ilegales regularizándolos en su trabajo. Pero no será así, la razón oculta como siempre está velada pero a la vista de todos los que la quieran encontrarla.
En California, por ejemplo, se están rasgando las vestiduras por una ley migratoria ejercida antes por del demócrata Obama, pero la diferencia es que estás movilizaciones son pagadas y promovidas por el clan Clinton-Bush-Soros y toda la judería Hollywoodense, amén de que Trump ha cancelado las ayudas federales a quienes se nieguen a acatar la ley, ley que antes habían aceptado de buena gana con Obama.
Entretanto aquí en México se está convocando básicamente a una marcha anti Trump, una marcha claramente promovida por la oligarquía que aún no perdona se les excluya del nuevo orden regional utilizando protagonistas de baja estofa como Krauze, Carlos Loret de Mola y otros perros falderos del lobby judío mexicano, todo encubierto bajo la botarga de “amor a los migrantes indocumentados”.
Sólo esperemos que no se detonen movilizaciones sociales de similares caracteristicas en Guatemala, Honduras y Salvador por el trato inhumano que el estado mexicano dispensa a los migrantes que cruzan por nuestro corrupto territorio.
Luego tenemos otro dato muy relevante, Trump está disolviendo el virtual triunvirato del Consejo Nacional de Seguridad (Homeland Security) formado desde 1947 por la CIA, Estado Mayor Conjunto y la Casa Blanca, retirándole de facto tal poder a la mal afamada y siniestra Central Intelligency Agency, todo ello mediante un “Memorándum sobre la organización del Consejo de Seguridad Nacional y del Consejo de Seguridad de la Patria”.
La CIA ha estado vinculada con prácticamente todos los golpes de estado y conflictos, asesinatos, ejecuciones, desapariciones, terrorismo, primaveras revolucionarias,etc, en donde los intereses de USA deban ser impuestos o puedan estar en riesgo, es decir en prácticamente todo el mundo. Además buena parte de la CIA era y es cómplice de los peores crímenes perpetrados por Hillary Clinton & Co., por lo cual su campaña era tan importante y su presidencia esencial para la continuidad de tal poder.
Esto evidentemente no ha sido del agrado de la oligarquía estadounidense que utiliza a la CIA como un grupo “democratizador” en el mundo.
Y por último, para completar brevemente que se esconde detrás de la muestras de odio en contra de Trump, tenemos la mejor parte, la posibilidad de reactivar la Glass-Steagal Act que protege a la banca comercial de riesgos de firmas de inversión y aseguradoras (burbujas financieras) blindando la base de la economía.
Fue durante la presidencia de Clinton donde la Glass Steagal Act fue dejada de lado para evitar cualquier regulación ante el ejercicio de derivados financieros y otros instrumentos exóticos (especulativos).
Tan sólo imaginemos que para la década de 1950 la industria manufacturera en USA era 4 veces mayor que el sector financiero. Se había establecido una regulación que separaba la banca comercial de la banca de inversiones manteniendo seguro el dinero de ahorradores de los riesgos de inversión o especulación.
Fue en 1970 cuando lo que se conoce como financiarización de la economía se dispara, las ganancias se obtenían tan sólo en el movimiento de dinero de formas muy complicadas.
Ya para 2007 los grupos financieros en USA obtenían el 40% de los beneficios empresariales, esto fue detonante de las ya conocidas crisis bursátiles y burbujas financieras, y rescates bancarios.
Imagine el lector la indignación de quienes se han beneficiado de la pantagruélica financiarización de la economía de reactivarse la regulación financiera por parte del gobierno.
Y como cereza del pastel, D. Trump parece a dado indicaciones a la nueva embajadora de Estados Unidos en la ONU, Nikki Haley, quien llegó exigiendo una auditoría sobre 16 “misiones de paz” y anunció que piensa poner fin a todas las que parezcan ineficaces, lo cual es el caso de todas sin excepción, a la luz de la Carta de las Naciones Unidas.
Así que, cuidado con quien esta sacudiendo el panal de masiosares…
-Victor Roccas