Cuando hace un año millones de negocios alrededor de todo el mundo colgaban el cartel de “cerrado”, no quedó otro remedio que aprender a realizar diferentes gestiones a través de internet. Fuese usando las tecnologías y herramientas ya existentes o bien a través de nuevas alternativas, todos nos hemos acostumbrado a realizar trámites, compras o incluso a entretenernos y comunicarnos de forma diferente. Hubo sectores económicos que tuvieron más dificultades que otros, e incluso algunos que han salido favorecidos, experimentando un fuerte auge, como los gigantes del video bajo demanda (Netflix, Disney+, HBO, Amazon Prime Video) o herramientas de comunicación y socialización como Zoom y TikTok. En el caso concreto de las loterías, también se han apreciado cambios significativos.
No sólo es que las boleterías cerrasen sus locales físicos, es que los sorteos se dejaron de celebrar a nivel mundial. Todos menos uno: el de la lotería estadounidense PowerBall, que no interrumpió su calendario. A partir del mes de junio del pasado año, poco a poco comenzó a reactivarse el orden habitual de sorteos loteros tanto nacionales como internacionales y las boleterías nuevamente abrieron sus puertas, pero ya se había sembrado la semilla de las boleterías online. Estas ya existían desde hace tiempo, con ciertas ventajas frente a las locales, como por ejemplo la posibilidad de cobrar los premios directamente en la cuenta bancaria o la notificación de boletos premiados vía email, o la falta de necesidad de conservar un boleto físico para poder reclamar un premio, pero además de todo esto, una de las grandes diferencias es poder acceder a las loterías internacionales sin dificultad. Las boleterías online dan acceso no sólo a las loterías locales y nacionales, sino también a las extranjeras, sean del continente que sean.
En el momento presente, vemos que las loterías no se han recuperado del todo, como ejemplo acá la Lotería Nacional no celebró ni el Sorteo de Navidad ni el de Año Nuevo. Son muchos, por tanto, los que se han animado a descubrir estas loterías internacionales jugándolas a través de internet. Los precios de los boletos son diferentes, pero también sus probabilidades de premio y condiciones para el cobro. Por ejemplo, las tasas no suponen el mismo porcentaje del total del premio que en las loterías mexicanas, y en algunos casos es obligatorio revelar nuestra identidad para poder reclamar el premio. No obstante, el atractivo principal es acceder a premios incluso billonarios, como en la ya mencionada PowerBall y en su mayor rival, MegaMillions, ambas estadounidenses.
Estas no son las únicas grandes loterías a las que se puede acceder más allá de la oferta nacional. Directamente de Europa, EuroMillions y EuroJackpot vienen con una probabilidad más alta de éxito, aunque con premios no tan elevados (aún así, muy interesantes). Curiosamente, el precio de los boletos está muy equiparado, y, a excepción de EuroJackpot, también el valor del premio mínimo (alrededor de 20 millones de dólares estadounidenses, siendo EuroJackpot prácticamente la mitad). Sin embargo, los mayores premios entregados por PowerBall y MegaMillions son de alrededor de un billón y medio de dólares, y aquí es donde vemos la gran diferencia con las loterías europeas: EuroMillions tiene un premio máximo de 220 millones de euros (algo más de 259 millones de dólares) y EuroJackpot de 90 millones de euros. Comparando con la Lotería Nacional, Melate o incluso con Mega-Sena, la lotería más importante de Brasil, siguen quedando por encima.
La probabilidad de ganar las loterías estadounidenses es alrededor de una entre trescientos millones, que son diez veces menos que Melate. Para Europa, la probabilidad es un poco más accesible que para EE. UU, siendo para EuroMillions una de alrededor de 140 millones, y una entre 95 millones para EuroJackpot. Aún así, si nos conformamos con los nada modestos premios mínimos, la probabilidad de ganar cualquier premio es alta, ronda una entre 26 para todas excepto para EuroMillions, que es más fácil, una entre 13.