Ricardo Del Muro / Austral
De cara al proceso electoral y a tres meses del inicio de las campañas, Aquiles Espinoza García se perfila para ser el candidato de Morena en Tuxtla Gutiérrez, su principal bastión en la entidad, donde el reto, después de ganar la alcaldía, es garantizar la seguridad y mantener las finanzas sanas para avanzar en la resolución de los múltiples problemas de la capital chiapaneca, cuya población ya supera el millón de habitantes.
Sin embargo, Espinoza García advirtió que como tuxtleco, considera que el mayor peligro es que regresen los gobiernos frívolos, deshonestos y sin compromiso con los ciudadanos que dejaron al municipio en bancarrota.
Esto, dijo, significaría un grave retroceso de los avances logrados por la administración, presidida por el morenista Carlos Morales Vázquez, quien a través de una disciplina financiera logró que el ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez alcanzara finanzas sanas y ha dejado con cero deudas a la siguiente administración.
Durante los años de la hegemonía del PRI en la entidad, los ciudadanos de Tuxtla Gutiérrez lograron elegir a un candidato del Partido Acción Nacional (PAN), el doctor Valdemar Rojas como alcalde (1976 – 1979); posteriormente, Tuxtla se convirtió en un bastión panista, entre 1995 y 2004, donde se sucedieron en el cargo Enoc Araujo Sánchez, Francisco Rojas Toledo y Victoria Rincón Carrillo.
Sin embargo, en 2004 el PRD logró ganar la capital chiapaneca llevando como candidato a Juan Sabines Guerrero, quien desde allí logró avanzar hacia el gobierno estatal, mientras que en la alcaldía tuxtleca se sucedieron las administraciones perredistas de Rosario Pariente y Jaime Valls Esponda, entre 2006 y 2010.
Posteriormente, vino una sucesión de alcaldes, algunos que sólo gobernaron un año, donde se alternaron Flor de María Coello del PVEM y Yassir Vázquez de la alianza PRD – Convergencia (2010); Felipe Granda del PAN (2012); Samuel Toledo del PRI (2012 – 2015); Fernando Cal y Mayor del PVEM (2015 – 2018) y Carlos Molano.
En las elecciones de 2018, a semejanza del triunfo de Andrés Manuel López Obrador en la elección presidencial, Morena ganó la gubernatura, la mayoría del Congreso y de los ayuntamientos, incluyendo el de Tuxtla Gutiérrez.
Sin embargo, el alcalde Morenista, Carlos Morales Vázquez, al asumir el cargo, se encontró con que el municipio estaba en quiebra y no había dinero para pagar los salarios de los empleados del ayuntamiento, menos para saldar las deudas con proveedores y ni un quinto para realizar obras.
En consecuencia, Morales Vázquez estableció una política de saneamiento financiero y estricto control entre gastos e ingresos, que permitió pagar deudas acumuladas y heredadas de administraciones anteriores, las que sumadas entre SMAPA y el Ayuntamiento alcanzaron una cifra de aproximadamente 2 mil 500 millones de pesos, entre deudas registradas y no registradas.
“Encontramos un gobierno en un caos financiero, sin viabilidad financiera, sin recursos para pagar las últimas quincenas y sin aguinaldos; sin unidades móviles para poder prestar los servicios fundamentales del Ayuntamiento, con equipos sin mantenimiento, como bombas, alumbrado público, transformadores, un sinfín de problemas que fuimos resolviendo paulatinamente”, señalaba Morales Vázquez, que, en consecuencia, logró ser reelegido como alcalde en 2021.
Después de que concluyó el proceso interno de candidato a gobernador en Chiapas por Morena, donde fue elegido Eduardo Ramírez Aguilar y ante un panorama donde el Frente Amplio por Chiapas aún no define quién será su abanderado, muchos políticos locales que fueron precandidatos a la gubernatura, ahora se han apuntado para contender por la candidatura a la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez.
Así, la capital chiapaneca está sobrecargada de espectaculares con los rostros de muchos aspirantes a una candidatura, presentándolos con diseños que semejan portadas de revistas inexistentes o avisos comerciales, como una forma de evadir la legislación electoral.
En este contexto, Aquiles Espinoza se perfila para ser candidato de Morena y continuar la obra – “el renacimiento de Tuxtla”, como se ha llamado – que inició Morales Vázquez. Otros precandidatos son Ángel Torres Culebro, exsecretario de Obras Públicas, quien era un desconocido hace seis años y que ha enfrentado críticas y protestas de los tuxtlecos por obras impopulares como un puente elevado junto al principal parque de la ciudad (“Caña Hueca”) e intentar abrir un atajo al Libramiento Norte, sin el consentimiento de los vecinos de la colonia Monte Real.
También están como precandidatos los empresarios Felipe Granda y María Mandiola en Morena; Bayardo Robles en el PRD y, por supuesto, al igual que en otros procesos, se menciona el nombre del expanista Paco Rojas, aunque todavía se desconoce si se registrará y bajo qué siglas.