Claudia Rodríguez
No es mala leche de verdad, pero cuando uno escucha no sólo hablar sino hasta observa las gesticulaciones y reacciones perezosas del secretario de Educación Pública de este nuestro país, Aurelio Nuño Mayer; uno se pregunta si es la persona idónea para defender y encaminar la Reforma Educativa ya aprobada, y a la que aún se muestra gran reticencia no sólo por miles de maestros del país, sino incluso por muchos más mexicanos que advierten que todo se trata de un ajuste salarial y reducción de prestaciones a los mentores, más que una mejora al nivel educativo.
Cuando uno escucha decir ler tres veces en apenas diez segundos al señor titular de Educación Pública, Aurelio Nuño ante alumnos de primaria, en lugar de la voz correcta que es leer, no se pueden pasar por alto los cuestionamientos de cómo se tituló en la Universidad Iberoamericana como licenciado de Ciencias Políticas y Administración Pública, así como también el cómo habrá obtenido un posgrado en la Universidad de Oxford.
Inaudito también que una persona que seguramente no lee porque no sabe que la palabra correcta es leer, porque nunca ha leído que ler, no existe; tenga en sus manos decisiones torales en las que se involucran la vida de millones de mexicanos.
Nuño Mayer no sólo es secretario de Educación Pública –válgame Dios y la expresión–, ha desempeñado otros cargos en donde era imperativo la lectura para tomar decisiones.
El histórico marca que su carrera política la inició como vicecoordinador de Planeación Estratégica del grupo parlamentario del PRI en el Senado de la República durante las LVIII y LIX legislaturas. Más tarde se desempeñó como coordinador de asesores de Luis Videgaray entonces presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública.
El siguiente puesto de Nuño fue el de asesor de Enrique Peña Nieto durante su gubernatura en el Estado de México y luego coordinador de mercadotecnia y mensaje de la campaña de Eruviel Ávila. Más tarde fue coordinador del área de educación del equipo de transición de Peña Nieto hacia la Presidencia, Jefe de Oficina del mismo y luego dio el salto a la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Entre y a la par de los anteriores cargos, Nuño desempeño otras tareas de negociación a nivel público.
¿Cómo puede uno recomendar la lectura, cuando no la practica?
Podrán salir a decirnos ahora que Nuño Mayer sí dijo leer durante su participación en la XXXVI Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil, celebrada en el Parque Bicentenario de la Ciudad de México y que todo fue un asunto de fallas en el sonido.
Pero que se haya escuchado ler, en vez de leer cuando Nuño enfatizaba que la lectura era fundamental para el desarrollo de la mente y para el aprendizaje, nos lleva a concluir que el señor no ha desarrollado su mente, ni tampoco ha logrado aprender.
Acta Divina…“Muy bien, pus ahorita los van a llevar para que vayan y puedan tener los libros que les gustan para que los empiecen a ler. ¿Seguro van a ler, sí o no?”: Aurelio Nuño Mayer, secretario de Educación Pública, durante la XXXVI Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil.
Para advertir… Aunque indiquen ler, no es posible.
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