HÉCTOR MOCTEZUMA DE LEÓN
Este miércoles apenas se conoció de la detención de Emilio Lozoya Austin, en Mallorca, España, los comentarios sobre de que el gobierno iría más arriba no se hicieron esperar, “todos los caminos conducen a Peña Nieto”; “sigue Peña Nieto” dijeron algunos que se consideran analistas; qué equivocados están, no se hagan bolas, como dijo el clásico cuando la residencia oficial del presidente era Los Pinos, Enrique Peña Nieto no va en el paquete que seguramente no se quedará en el ex -director de Petróleos Mexicanos.
Si han estado atentos a lo que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha dicho en torno a los expresidentes, en especial al caso de Peña Nieto es que no hizo ningún arreglo en lo oscurito para garantizar la impunidad del mexiquense, sin embargo, recientemente reconoció que él se comprometió a no intervenir en la elección, creo que en más que eso.
El presidente Peña Nieto no sólo traicionó al PRI, también se burló de José Antonio Meade, a quien escogió como el cabdidato oficial, y hasta del panista, Ricado Anaya un alido incondicional para sacar adelante la reforma energética en la Cámara de Diputados, no se les olvide.
¿Por qué Ricardo Anaya fue perseguido con saña por la PGR, incluso fue citado a esa dependencia acusado de lavado de dinero? Y ¿Por qué a Andrés Manuel López Obrador no se le tocó ni con el pétalo de una rosa? ¿no piensa que ahí está la clave de que con todo y lo que pueda decir Emilio Lozoya, su ex -jefe no pisará la cárcel en ningún momento.
López Obrador dice que Peña Nieto sólo se comprometió a no intervenir en la elección del 2018, pero las evidencias lo desmienten, el ex -presidente sí intervino y, lo hizo para frenar la panista, sobre todo después de que Anaya, creció cuando postuló como principal compromiso de campaña electoral, de meter a Peña a la cárcel. Fue entonces cuando giró instrucciones para que la PGR en donde despachó un incondicional, se fuera con todo en contra del queretarno, es cuestión de hacer un recuento de aquellos hechos.
Definitivamente Peña Nieto al ver López Obrador ya nadie lo paraba, decidió abrirle la puerta, sobre todo, porque el tabasqueño tenía como principal objetivo al llegar a la presidencia, el combate a la corrupción, entonces no le quedó más que cargarse hacía él, lógico, para tapar las corruptelas que cometió en ese sexenio de pesadilla para los mexicanos.
El mexiquense traicionó a su partido y a su candidato, de eso no cabe duda y, justamente eso es lo que hace verlo en distintos puntos del extranjero confiado y hasta burlón. Sobre Vicente Fox y Felipe Calderón, esa es otra historia que pronto irá develando, sobre todo en el caso de este último en donde no se puede descartar la venganza.
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La Fiscalía para Delitos Electorales, a cargo de José Agustín Ortíz Pincheti podría dar su primer golpe espectacular en los próximos meses, iniciar el proceso para la anulación del registro del PRI, bajo el argumento de que recibió financiamiento ilícito en las elecciones del 2018, lo que podría salir del caso Emilio Lozoya y los 10 millones de dólares que le dio la brasileña Odebrecht para la campaña de Enrique Peña Nieto. Hace unos meses la familia Lozoya canceló su participación, este año, en un exclusivo club europeo…El rector de la UNAM, Enrique Graue, contrató a un comunicador que trabajó para encubrir las corruptelas del ex -Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruíz Esparza, ¿qué quiere tapar señor rector?
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@HctorMoctezuma1
