La Espinita
Andy S. K. Brown
- ¿Para qué miente, señora Presidente?
- Taddei: Lo necesario no es suficiente
- Pago de $800 MDP por liberar a CDMX
El gran estratega Otto von Bismark dejó asentada para la Historia una frase que hoy aplica: “Nunca se miente tanto como antes de las elecciones, durante la guerra y después de la cacería”.
Y es conveniente citarla porque, con total desparpajo y una enorme cantidad de cinismo, la señora Claudia Sheinbaum lanzó a las redes un video este último sábado un video propagandístico –en plena veda electoral– en el que hizo un enésimo llamado a las urnas, sin dejar de atacar a quienes ella y su mentor consideran corruptos y privilegiados, pero sobre todo mintiendo.
Dijo la señora presidente formal –“la mejor del mundo”, dijo ayer AMLO en su primera reaparición pública– que no es verdad lo que decimos muchos “… que esta elección está amañada, o dicen también que es para que un partido político se apropie de la Suprema Corte, o también dicen que es para que la presidenta (sic) ponga a modo a los ministros y ministras de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, nada más falso”.
¿Quién le cree, señora?
No, para empezar, todos aquellos que recibieron acordeones y, mediante el chantaje de quitarles los llamados programas sociales, se vieron obligados a votar por quienes ustedes los guindas ordenaron. Ellos saben que usted mintió.
Tampoco los acarreados que los morenistas “transportaron” a las urnas con la obligación de votar de acuerdo con los traídos, llevados e ilegales acordeones, so pena de no recibir la paga por emitir sus sufragios. También ellos saben que está usted mintiendo, señora.
Y mucho menos le creemos los ciudadanos informados que atestiguamos como desde mediados de agosto del año pasado ustedes se apoderaron espuriamente del Poder Legislativo federal, de las trampas y hasta errores que sin siquiera haber leído las iniciativas aprobaron la manadas de Morena –más dos que tres senadores comprados o, para no variar, chantajeados–, de cómo se pasaron por el arco del triunfo las suspensiones judiciales y, ahora, de las indicaciones impresas que les dieron a sus sumisos e ignorantes votantes.
Nadie le creyó, doña Claudia. Menos cuando nos enteramos de la presencia de elementos del Ejército y de la Guardia Nacional en la sesión del consejo general del INE. ¿Para amedrentar a sus integrantes?
Entonces, ¿para qué mentir tan descarada e impunemente?
¡Qué pena que usted, doña Claudia, habiendo llegado al mundo desde un vientre judío adopte una frase del nazi Paul Joseph Goebbels!: “Una mentira repetida adecuadamente mil veces se convierte en una verdad”.
Y ni así.
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Justo en medio de la mayor crisis de credibilidad por la que ha atravesado el INE, la morenista Guadalupe Taddei cerró con candado de oro los preparativos para la farsa judicial que se desarrolló ayer con música de acordeón.
En entrevista para el diario Reforma, la presidente del órgano administrativo de las elecciones salió con la muletilla de haber hecho lo necesario para que los comicios se llevaran a cabo.
Hacer lo necesario, pero no lo suficiente, cierto, porque se realizaron mínimas acciones requeridas para alcanzar el objetivo.
Es como si se estuviera cumpliendo con un requisito mínimo, pero sin poner el esfuerzo extra para obtener mejores resultados.
La van a regañar, doña Guadalupe. La van a regañar.
Ahora a ver cómo le va con el también amañado conteo.
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Los manifestantes de la CNTE se fueron de CDMX con los bolsillos repletos de oro.
Los ciudadanos tuvimos que desembolsar 800 millones de pesos para beneficiar a quienes durante 15 tortuosos días mantuvieron bajo su dominio el Centro Histórico, las principales avenidas primarias, mientras las mal llamadas autoridades –sin ninguna autoridad– miraban complacientes el desmadre.
A eso llegaron a la capital nacional pues sabían que, como siempre ha sucedido, los dirigentes conseguirían beneficios personales y algunos pocos más para quienes dicen representar.
La 4T cedió. Permitió que la chantajearan sus propios correligionarios.
Ahora pagamos los contribuyentes, pero ya llegará el momento, en 2027, en el que la ciudadanía les cobre a estos medrosos dizque gobernantes.
@AndySKBrown1