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- Premian Mediocridad de Curuleros
[…] preparamos el preámbulo de la construcción de un gobierno honesto, austero y democrático que dé inicio en 2018.
Rocío Nahle
Gracias a la Marca AMLO, Alejandra Pani, Brenda Espinoza, Juanita Guerra y José Guadalupe Ambrosio ganaron en 2018 un redituable banco en San Lázaro. En 11 días dejarán de serlo, tras seis años de parasitar el cargo, junto a su igual Jorge Barrera, que sólo se aprovechó el cargo tres años.
Esta semana es probable de cada uno se embolse 75 mil 609 pesos de dieta mensual, 45 mil 786 pesos por asistencia legislativa y 93 mil 669 pesos de la parte proporcional del aguinaldo. Además, para Atención Ciudadana 28 mil 772 pesos, apoyo de fin de año 25 mil 575 pesos, informe legislativo 60 mil pesos y bono cuatrimestral 90 mil pesos, para hacer un gran total de 419 mil 411 pesos, libre de impuestos.
El cobro de tales privilegios es legal, ciertamente. Pero a los ojos de la congruencia, inmoral. Por contraste, la bolsa de dinero es inmerecida ante los exiguos resultados como legisladores y representantes populares. Si la contabilidad de su quehacer legislativo incluyera las fotografías acomodadas en sus redes sociales, casi siempre con comentarios de falsa idolatría, los casi 500 mil pesos son un taco placero de huevo duro.
Pero como no hay registro de una cosa positiva, una, en favor de Morelos en su conjunto, recibir tanto dinero es una incongruencia. Tanto por tan poco. Si hubiera congruencia entre el cobrar y el hacer —los cinco no saben que es la congruencia—, debían no aceptar el dinero, que es público, o en su caso regresarlo por inmerecido. Incluso ningún otro cargo por elección o designación.
Pero débiles de voluntad —y de trabajo prolífico— son capaces de pedir más, pues sus servicios a la patria fueron cuasi heroicos. Tan pronto como protestaron cumplir, se olvidaron hasta de sus promesas de campaña, y de quien lo proyectó para sentarse en Congreso de la Unión 66, sirviendo a la Cuatroté, no a las familias que los votaron en sus respectivos distritos.
Es Barrera un oportunista que quiere más, Pani tiene la obligación de revisar las cuentas cuauhtemistas y denunciarlas, a Espinoza se le acabaron sus 15 minutos de fama fotográfica y Guerra ya empezó con noticias falsas y autofotos su carrera a la candidatura de 2030, sin merecimientos. Un caso es Ambrosio Gachuz, de imagen gris, aunque se haya quitado las botas y los calcetines para meterse al agua a sembrar crías. Por cierto, el líder de casi todos ellos, Rabindranath Salazar, se ha quedado en solitario; ninguno de sus diputados federales, con excepción de la cuauhtemista Espinoza, dice pertenecer a su grupo.
Se acabó la fiesta a los representantes federales de los cinco distritos que desaprovecharon la oportunidad de servir, de hacer carrera de resultados, de cumplirle a quienes depositaron su confianza en ellos, y que al final, como siempre sucede, traicionaron esa confianza, terminando sin credibilidad, sin honor. Los casi 500 mil pesos no les alcanzarán para hacer llevadero el trato de apestados políticos que ya empezaron a sentir, eso sí, con merecidamente.
letraschiquitas
SU BUENA ESTRELLA. Con mejores perfiles, tal parece que la señora presidenta electa, Claudia Sheinbaum, no tuvo otra opción que Citlalli Hernández para secretaria de la Mujer. No se duda de su capacidad, es indiscutible, pero durante su paso por el senado y por la dirección nacional de MORENA dejó mucho qué desear, y, además, ejerció violencia política igual con hombres que con mujeres de comunión ideológica distinta.
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EXGÓBER ACORRALADO. Si el encargado de Despacho Ulises Lara no le consigue a Javier Corral una constancia de antecedentes no penales, derecha o chueca, en la Fiscalía de la Ciudad de México, el exgobernador de Chihuahua podría no alcanzar escaño senatorial pluri, y con ello tener fuero, pues en su patria chica lo ficharon como prófugo de la justicia por dos delitos que se pagan con pena corporal y sin derecho a fianza.
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DESOBLIGADOS AL PODER. Obligado por ley a dar manutención a su hija, César Arnulfo Cravioto será secretario de Gobierno, según decidió Clara Brugada, la inminente jefa de Gobierno de la CDMX. Hace 14 años, el hoy senador se comprometió a depositar el 30 por ciento de su sueldo, incumpliendo. Gracias a que le descontaron de la nómina, el distinguido morenista se salvó de pisar la cárcel.
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