Yo Campesino
* Revés al ganso con todo y chaqueteros de otros partidos; podría repetir a nivel nacional
Miguel A. Rocha Valencia
Lejos de realizar una campaña tradicional, la 4T donde se suman morena y las rémoras PT y Verde, apretaron la maquinaria para la guerra sucia que en esta ocasión no sólo son baños de lodo contra todo posible adversario para desacreditarlo con el uso faccioso de las instituciones judiciales y ministeriales, perseguirlos y de ser posible encarcelarlos.
Forzarán la marcha para mediante ofrecimientos tanto de posiciones políticas como chantajes y amenazas de persecuciones o al menos exhibiciones desde Palacio Nacional para manchar sus vidas con imputaciones ciertas o falsas, resquebrajar a los opositores, dividirlos, restarles liderazgos y seguidores.
Para ello, un equipo de morenos a nivel local y nacional trabajan en el análisis de aquéllos susceptibles de ser convencidos mediante el apapacho o “abriéndoles los ojos” respecto a otros aliados que según les meten en el ánimo, abusan de ellos, los ningunean o simplemente los utilizan como si fueran sirvientes imponiéndoles agendas y propuestas.
El viejo truco de “te están usando, no consensan contigo, sólo te ordenan como si ellos fueran los patrones abusando que son la mayor minoría”. Estimulan las envidias incluso dentro de los partidos y entre quienes integran la oposición que no es adepta al mesías tropical.
Además les dicen que en Morena, PT o Verde, tienen asegurado su porvenir político, les ofertan facilidades para que alcancen posiciones anheladas, no hacerles trampa y dejarlos ir por la “libre” sin oponer resistencia a dejarles el cargo.
A otros ya hacia la recta final de este sexenio les ofrecen los relevos en secretarias locales o federales, en organismos y al final, les aseguran un cargo administrativo dentro de los nuevos gobiernos que de todos modos “vamos a ganar”, les prometen.
Algunos ya cedieron, sus posiciones se tiñen de guinda o simplemente no se muestran opositoras. Las garrafales fallas de la 4T ahora ya son errores mínimos a cuya corrección son invitados a participar con sus brillantes ideas.
En términos de mis abuelos, les “untan manteca en el hocico”. Eso si es por las buenas. Por las malas, proliferan las carpetas de investigación que surgen como hongos en las fiscalías con datos ciertos o falsos pero que al final sirven para “ablandar al cliente”, ese es el estilo cuatrotero, el que implantó desde la consejería Jurídica de la Presidencia Julio Scherer. Este método es el que mejores resultados les da, pues al menos en la Ciudad de México hay muchos ejemplos.
Como por la vía electoral la ven muy difícil y en especial en alcaldías como Benito Juárez, se sacaron de la chistera un cartel inmobiliario que frente a lo hecho por el tlatoani tabasqueño y su sucesor Marcelo Ebrard, son de párvulos, pues entregaron medio centro histórico a Carlos Slim y le financiaron demoliciones, remodelaciones y construcciones, además de una serie de contratos que hoy están vigentes como la línea 12 del Metro, precisamente en la tramo que se derrumbó.
Pero como tienen las fiscalías federal y la mayoría de las locales en sus manos, persiguen a priistas y panistas con ferocidad, a sus hermanos mayores del PRD, les dan otro trato. Por eso hay tricolores en la cárcel, por eso lo del diputado blanquiazul Christian Von Roehrich y “aprietan” al actual alcalde Santiago Taboada Cortina. EL primero anda prófugo y el segundo se echó para adelante y se destapó como aspirante a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México.
La estrategia no sólo es “reventar” a la alianza opositora que le dio palo a Morena y aliados incluso en reductos como Gustavo A. Madero o en Miguel Hidalgo y le arrebató la mayoría calificada en el Congreso donde hasta el año pasado frenaron las acciones de reforma constitucional oficiales. Hoy el panorama es otro.
Lo mismo ocurre a nivel nacional donde desde súper delegados, dirigentes de la 4T y gobernadores, realizan labor de zapa ya sea como bloque oficialista o cada partido por su lado, con la instrucciones “de que” si es necesario, sacrifiquen alguna de sus actuales posiciones o prebendas de dinero para sumar adeptos individuales o de “cuadros” enteros.
El problema es que el descrédito de Morena ya es muy grande y los políticos profesionales le miden pues saben que hoy jugar con ese partido no es nada seguro especialmente porque el profeta “delirante y mentiroso como lo llamó un diario estadunidense, ya mostró que el proyecto es él y no le importa traicionar o cambiar la jugada a sus seguidores, pues el único interés valedero es el suyo.
Si están preocupados por eso al Plan B le sigue el C y si no, ya está en marcha el D.
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