Yo Campesino / Economía 4T
• Perversa mente de El Ganso: entre peores expectativas para el país, mejor para su causa
Miguel A. Rocha Valencia
Con dichos y hechos, el Ganso confirma que el proyecto de la 4T se nutre de las desgracias de los mexicanos. Por eso lo de anillo al dedo de la pandemia que ya costó cerca de 500 mil muertos y cuya responsabilidad no aceptará, aunque la historia habrá de apuntarlo.
Ese fundamentalismo también explica por qué a pesar de saber que se necesita dinero, el machuchón los mantiene a raya, amenazados, extorsionados y defenestrados, procurando en todo momento la fuga y cancelaciones de inversión privada, no sólo especulativa de la cual ya se fue casi la tercera parte y representa cerca de un billón y medio de pesos, sino también la fija bruta que de acuerdo al Inegi, retrocedió y sus rangos están por abajo del 2011.
Y como esa inversión es factor de empleo y éste no se recupera por más que presuman recuperación de plazas, el consumo también se fue para atrás los últimos cuatro meses del año pasado y en esta cuesta enero-febrero, con inflación ya por arriba del 7.35, nadie espera mejora.
Quienes conocen al prócer de Tepetitán, saben que no acepta consejos, si alguien lo topa se vuelve su enemigo y sus venganzas son proverbiales, amén de que a sabiendas de que no va a cumplir promesas, miente porque “eso le gusta oír al pueblo”. De ahí que cuando por hígado o contento saca expresiones, deben reconocérsele.
Como cuando afirma “primero los pobres” pues en una mase de menesterosos y necesitados de limosnas donde encuentra la base de su proyecto cuatrotero que implica un retroceso del país en todos sentidos y si se vive en desgracia, confrontación y permanente crisis, mejor. Entre más depauperados y enfermos, mejor.
También de ahí sus críticas a los clasemedieros-aspiracionistas que desean superarse pues representan la antítesis de su perversa filosofía. Un pueblo preparado y en bienestar no aceptará limosnas ni conformarse con un estatus de atraso, pobreza e ignorancia.
De ahí que a pesar de que México pierde competitividad en todos los aspectos, no se hace nada al respecto, se reúne con empresarios, pero no se llega a nada. Ejemplo la industria de la construcción o la turística donde la caída es del 30 por ciento respecto a 2019.
Datos del Inegi indican que de enero a noviembre del año pasado ingresaron a México 28.1 millones de turistas internacionales, mientras que en 2019 fueron 40.3 millones. Este hecho no sólo pega a la inversión y empleo sino a las finanzas públicas, pues el AICM no tuvo ingresos para pagar los 200 millones de dólares de la deuda pendiente de la “fibra Verde” por la cancelación del NAIM, de la cual faltan por liquidar 17 años.
México recibió tres mil 900 millones de dólares menos por ese motivo.
Y en lo laboral, no pasó mucho tiempo en que el festejo del Ganso se fuera al pozo por el alza en salarios mínimos que a final de cuentas descontando inflación, quedó en 0.8 por ciento real en tanto que las contractuales quedaron por debajo del nivel inflacionario casi un punto porcentual en su mejor caso, de acuerdo a la misma secretaría de Trabajo federal. Es decir que las revisiones de contratos-ley de sindicatos y empresas, quedaron sepultadas por carestía. Se calcula la caída en 2.02 por ciento.
Más aún, si se toma en cuenta la inflación subyacente que como pocas veces alcanzó nivel histórico al duplicarse su expectativa y alcanzar un 5.7 por ciento, la mayor desde 1999, lo cual, a pesar de los festejos del mesías tropical, fue motivado por la desconfianza incluso del productor, el movimiento alcista de impuestos y la presión cambiaria. La 4T recibió un dólar de 20.35 y hoy, sube y baja a veces hasta 22 pesos lo que necesariamente gravita en incremento de deuda en billetes mexicanos.
Total, que al final del camino si el caudillo de Tepetitán festeja “sus datos” es porque con ellos es feliz, feliz, aunque para los mexicanos eso signifique desgracia, muerte, enfermedad, pobreza, violencia, confrontación o incertidumbre en el futuro, que al menos en estos años no pinta para mejorar, por el contrario, de acuerdo a los especialistas aun no tocamos fondo pues los efectos negativos de las políticas cuatroteras se reflejarán más adelante.