Por Arturo Sandoval
“Si no peleas para acabar con la corrupción y la podredumbre, acabarás formando parte de ella”. Joan Baez.
El moche, cochupo, maiceada o propina; el chayote, beca de aviador o vacaciones pagadas son el pan de cada día. Disminuye sustancialmente de parte del Gobierno de la 4T, sigue campante por algunos empresarios, gobiernos estatales y municipales, sin brincarse sindicatos, ONG’s, fundaciones, centros religiosos, parte de la milicia y policías.
En la mafia italiana llamada Cosa Nostra, con influencia enorme en Chicago y Nueva York en los años 80 y 90, se dieron múltiples traiciones entre ellos. Padres sin escrúpulos con intenciones de matar a sus propios hijos. Cuando Rudy Giuliani los apresó a todos, pero a todos, algunos hijos no tuvieron empacho a denunciar los crímenes de sus padres con tal de reducir sus penas, tuvieran protección ellos con sus familias y salieran libres en pocos años. Sus padres y sus cercanos colaboradores condenados a cadena perpetua, hoy unos murieron en prisión.
No todos los testigos protegidos la salvaron antes de declarar, varios fueron ejecutados. La serie de National Geographic Channel “Los Secretos de la mafia” detalla las entrañas de esta red criminal, donde también se dan delitos en relación con la gasolina; no como huachicoleo, mas bien sobre la venta legal en gasolinerías, pero con el delito de evasión de impuestos y lavado de dinero por medio de una cadena de empresas fantasmas. Estricto es el código de honor, donde nadie puede meterse con la esposa de un integrante de la mafia; y cuando el mejor amigo de un hijo de los jefes sedujo a la esposa de su amigo, éste tendría que matarlo. Se negó y otros hicieron el trabajo. Muchos de los violadores del pacto del silencio, la salvaron hasta ahora: están libres y con relativa calma.
Lucky Luciano, Vito Genovese, John Gotti, Sam Giancana son algunos de los protagonistas de esta serie documental.
El delincuente, el corrupto en México, también introduce al olvido estos pactos o códigos de honor muy detallados: en la política los presidentes salientes se metían al ostracismo sin participar en política ni patentar su presencia en medios o cargo público. No sólo los presidentes, la conducta de la invisibilidad se replicó en gobernadores y regentes; sin embargo la participación en puestos públicos después de ser presidente surge con Miguel de la Madrid, el cual se convierte en director del Fondo de Cultura Económica y de una oficina mediana en avenida Universidad y Parroquia, se construye su torre en las faldas del Ajusco. Es precisamente Miguel de la Madrid quien se gana un funeral en Bellas Artes, quizás por abrir la caja de pandora en una entrevista con Carmen Aristegui, realizada en la casa del ex presidente en Coyoacán hace 11 años. Ahí rompe el pacto del silencio y se lava la conciencia con declaraciones en contra de los Salinas de Gortari (liga de la entrevista al final). Más tarde lo obligan a retractarse y hasta lo declaran no apto mentalmente.
Pero no se olvida la conversación entre Adriana Salinas y Raúl Salinas desde la cárcel, en un audio clandestino, dado a conocer en el noticiero nocturno de López Dóriga donde Raúl acusa a Carlos de usar ilícitamente dinero del erario, en irascible respuesta a las declaraciones de Carlos en entrevista de televisión con Aguilar Camín donde se deslinda de los actos ilegales de Raúl, sin reconocer que Raúl no se mandaba solo. De ida y vuelta el pacto del silencio se esfuma.
Ernesto Zedillo hizo más que romper este código: metió a la cárcel a Raúl Salinas, lo acusó de varios delitos. En el sexenio de Vicente Fox, Raúl salió libre, exonerado años después y le regresaron 74 millones de dólares depositado en Suiza. Tiempos cuando las carpetas de investigación no importaban si estaban bien o mal armadas; sólo se aplicaba el autoritarismo para encarcelar al enemigo político.
Zedillo se gasta una fortuna en el Pemexgate para apoyar a Labastida, a quién finalmente entrega a los “soldados romanos” y provoca el cambio de poder del PRI al Pan.
Vicente Fox gana legitamente las elecciones, no rompe el pacto del silencio, no traiciona a nadie más que al pueblo que voto por él y al que no lo hizo. Recibe un país con riqueza petrolera y con recursos naturales enormes; pero él, su familia, su esposa conducen al país a un desmesurado saqueo, superado exponencialmente en los siguientes dos sexenios.
Lejos de ser mejores amigos, Felipe Calderón recibe la presidencia de Vicente Fox a través de fraude electoral pactado por ambos panistas; no acusa de nada a su antecesor, pero sí lo supera en vaciar las arcas del País. Convierte a México en un cementerio de enemigos del cartel de Sinaloa, más miles de muertes colaterales según él, en su supuesta guerra contra el narco.
Al final de su sexenio, se cubre la espalda y formaliza el pacto del silencio con un avión presidencial nuevo convertido en faraónico palacio con alas, además de vicios y negocios ya firmados para enriquecer al gabinete entrante. También le hereda la continuidad de lo que el presidente López Obrador califica como Narco Estado.
Enrique Peña Nieto gana las elecciones por medio de trampas y dinero ilícito; desde luego no denuncia nada contra de Calderón y hace lo imposible de creer: supera por mucho, pero por mucho la corrupción, la impunidad y el saqueo que existió en los dos sexenios anteriores.
Y llega el 2018. Se cree en un pacto entre López Obrador y Peña Nieto para hacer una tersa transferencia del poder. Pero Andrés Manuel, sin mala intención, da independencia a la Fiscalía General con la mano dura de Gertz Manero al frente y respeta a la Unidad de Inteligencia Financiera presidida por el jurista Santiago Nieto; ambos funcionarios de excelencia quienes se espera no perdonen a presuntos corruptos ex presidentes y sus pandillas. Para poner la lápida a la impunidad, el Presidente confirma que en una consulta el pueblo decida si se juzga o no a los ex presidentes. Dicha consulta, de hecho se hace diariamente en benditas redes sociales, con gente real y no bots, para expresar su deseo apabullante de encarcelar a estos funestos personajes.
El castillo de naipes, se derrumba y los pactos de silencio se convierten en copas de frágil cristal, se rompen para salvar el pellejo de los acusados y de sus familias. Javi Duarte protege a su esposa en Londres, Lozoya habla y habla; entrega dos de sus casas compradas con dinero sucio con tal de salvarse él y su familia. En Estados Unidos García Luna y César Duarte llenan aparatos de grabación con sus declaraciones sin menor respeto al silencio pactado.
Anabel Hernández, empuja con sus investigaciones a gente del equipo de García Luna, aún infiltrada en las policías actuales, en TV Azteca, en Secretarías de Estado, en el Gobierno de Claudia Sheinbaum. Da una lista con nombres, apellidos y cargos actuales.
No está exento el Gobierno de la Ciudad de México de ir tras delincuentes saqueadores de nuestra ciudad. Sheinbaum va con todo tras el cartel inmobiliario en el gobierno de Miguel Ángel Mancera denunciado ampliamente por la revista Proceso. Quizás le dé por hablar al ex jefe de Gobierno de la CDMX., y en el futuro esté voceando por las calles: “bisquetes calientitos, yo se los recomiendo”, un día lluvioso pase en su auto por ahí Marcelo Ebrard y lo salpique de agua de un charco.
Esto se convierte en una verdadera verbena de rupturas de silencios, de pactos agrietados inimaginables antaño. No es gratis ese 59% en favor de AMLO en la última encuesta de De las Heras Demotecnia. No es tan disparatado el comentario en varios medios de que si Peña va a prisión, AMLO sería presidente vitalicio.
“En muchas empresas el silencio no es oro, el silencio es un sobre”. Jaume Perich.
Lo que reportan diariamente Carmen Aristegui, Anabel Hernández, Pepe Reveles, Ana Lilia Pérez, Zepeda Patterson, Álvaro Delgado, Lydia Cacho, Rubén Luengas, Lorenzo Meyer, Jorge Meléndez Preciado, Julio Astillero, Ernesto Ledesma, Nancy Flores, Gibrán Ramírez, Jesús Esquivel, Peniley Ramírez, Alejandro Páez, Ricardo Raphael entre muchos periodista que hoy gozan de mayor libertad de expresión en México, nos muestran la imagen de un País en llamas, donde la Mafia del Poder haría ruborizar a la Cosa Nostra. Este tipo de valientes periodistas y periodismo audaz, con sus investigaciones, ayudan al Gobierno de hoy a extinguir el fuego y acorralan a los corruptos a romper la Omertá.
NOTA: Gobernar desde la soberbia y la corrupción, es gobernar desde el más obscuro, ruin, putrefacto y espeluznante rincón de un lupanar en el alma. Así fuimos gobernados los tres sexenios pasados.
https://www.jornada.com.mx/2009/05/18/politica/006n1pol