Viernes 16 de septiembre de 2016
La atención integral a la primera infancia debería ser uno de los temas prioritarios de la agenda pública, sostiene el senador Benjamín Robles Montoya, quien propuso modificaciones a la Ley General de Salud para la detección y atención temprana de trastornos en el desarrollo infantil, mediante la aplicación de pruebas de tamizaje diseñadas para identificar riegos de retraso en el desarrollo de menores de 5 años.
Al fundamentar su propuesta, el legislador por Oaxaca señaló que en México la política pública en materia de salud referente al desarrollo infantil temprano se ha limitado a facilitar la custodia en guarderías y no al desarrollo integral de los menores.
“La política pública en este tema ha sido inexistente en la agenda del Gobierno federal y de los gobiernos estatales y municipales de México”, aseguró el senador Benjamín Robles Montoya.
Sin embargo, dijo, la atención integral a la primera infancia debería ser uno de los temas prioritarios de la agenda pública, tomando en cuenta que los hechos científicos que demuestran la trascendencia de este periodo de la vida en el que se forman el 40 por ciento de las habilidades mentales y comienzan a tener impacto en los niveles de decisión de las personas adultas.
“Si bien es cierto existen programas dirigidos a la infancia temprana, también lo es que estos no atienden desde el origen las causas de la problemática y no dan seguimiento a los resultados de los mismos; además de que dichos programas no llegan a toda la población de manera oportuna”, aseveró.
Robles Montoya reconoció que los Objetivos de Desarrollo del Milenio fueron en México un parteaguas, ya que permitieron visibilizar y sensibilizar respecto de temas como: erradicar la pobreza y el hambre, reducir la mortalidad infantil y mejorar la salud materna.
No obstante, dijo, esto no ha sido suficiente para cubrir las necesidades de atención de los aproximadamente 12 millones 260 mil 555 niñas y niños menores de 5 años en México.
Por ello, Benjamín Robles destacó la necesidad de diseñar programas y estrategias que brinden la atención debida a los distintos aspectos del desarrollo infantil, más allá de los cuidados básicos para asegurar la supervivencia de las niñas y los niños.
“Debemos invertir no sólo recursos económicos, sino además humanos y técnicos capaces de ofrecer a las niñas y niños mexicanos las mejores oportunidades para su desarrollo temprano e integral, otorgando claro está, mayor atención a las niñas y niños que viven en situación de pobreza”, sostuvo.
Benjamín Robles detalló que su propuesta pretende que sea materia de salubridad general la detección de trastornos del desarrollo infantil de manera temprana y se brinde la atención correspondiente que permita a las niñas y niños menores de 5 años alcanzar su grado máximo de desarrollo, atendiendo sus propias condiciones.
“Esto constituye un reto para los diferentes niveles de atención médica (primaria y especializada), no obstante, es un esfuerzo que tenemos que realizar en beneficio de los millones de niñas y niños menores de 5 años en México”, concluyó.
La iniciativa fue turnada a las comisiones unidas de Salud y de Estudios Legislativos para su análisis y posterior dictamen.