La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
No es lo mismo la negritud a que nos las veamos ‘negras’
En los últimos días, se han presentado en la entidad, al menos, dos hechos que demuestran la falta de quehacer político o para decirlo de forma eufemística, un grave déficit de gobernanza, lo cual constituye una alerta de cara a los comicios concurrentes de 2024.
En este sentido, no debemos olvidar que, durante las elecciones de 2021, Veracruz estuvo en el top de los estados con más violencia política, con 117 de las 782 agresiones que se registraron, lo que representó el 15% del total nacional, además, de los 89 homicidios reportados en todo el país, 16 se cometieron, precisamente, acá, lo que significó el 18%.
Volviendo al tema, uno de los casos señalados, ocurrió en la capital Xalapa, donde un numeroso grupo de vecinos, se oponen a la construcción de un puente vehicular, sobre una de las principales avenidas, argumentado, con toda legitimidad, que se comete un ecocidio con la inapropiada tala de árboles.
El desaguisado se pudo evitar, si el área de operación política gubernamental, hubiese realizado un intenso cabildeo con la comunidad, para con ello construir un proyecto que dejara satisfechos a todos, pero no, optaron por imponer y ahora se quejan de un ‘complot’.
El segundo punto, fue más complejo, ocurrió en el municipio de Tantoyuca, lugar en el cual un grupo de integrantes del Frente Nacional de Lucha por el Socialismo, incendió 14 automotores en protesta por el asesinato de uno de sus compañeros, o sea, no hubo respuesta oficial inmediata y la reacción resultó furibunda.
En ambos fenómenos, insistimos, faltaron reflejos políticos, situación que puede explicarse o por desdén del responsable o de plano, porque es más importante ‘promover’ la cultura.
Ahí la llevan.