Cicuta
Jaime Flores Martínez
Decidido a retacarse las alforjas desde la titularidad de la Secretaría General de Gobierno de Tijuana, al señor Jorge Salazar Miramontes no le importa descalabrar la imagen de la alcaldesa Monserrat Caballero Ramírez.
Sépase que el señor Salazar presume a gritos que su relación sentimental con la alcaldesa, le permite decidir asuntos importantes que más tarde salen de la boca de Monserrat.
Recientemente el señor Salazar cacareó frente a un grupo de personas que fue su decisión mantener en su puesto a Jesús Gabriel Sánchez Farfán, detenido a finales de noviembre en un auto con estrobos policiacos, en cuyo interior fueron localizados 200 mil pesos en efectivo y mil dólares, además que en su celular fue detectada una conversación en donde señalaba que tenía 20 kilos de mota.
Dos días después de estallado el escándalo, la alcaldesa Monserrat Caballero convocó a una rueda de prensa donde aseguró que este funcionario conservaría su puesto y refirió que el dinero que llevaba correspondía a su salario.
La señora alcaldesa buscó minimizar el tema de los estroboscopios al decir que eran “unas lucecitas” con las que intentó adornar su automóvil.
En una reunión, el señor Salazar dijo que fue su decisión rescatar a Sánchez Farfán pues desde su estancia en el Congreso del Estado le demostró absoluta lealtad.
Desde luego que no se refirió al tema de “las lucecitas”, porque seguramente sus interlocutores lo tacharían de imbécil.
También se refirió a “su experiencia” como funcionario de la dirección de Inspección y Verificación (Reglamentos) donde su titular Adolfo García Dworak “responde” a sus instrucciones.
Alguien pudo decirle que García Dworak “le pica los ojos”, aunque Salazar desestima esos comentarios pues está convencido que su experiencia en Reglamentos le permite saber hasta dónde pueden llegar a pellizcarlo.
Seguro que Salazar no sabe que más de tres propietarios de bares de la Zona Norte de Tijuana (zona de tolerancia), decidieron reunir evidencias sobre las extorsiones que aplican sobre ellos algunos inspectores de Reglamentos.
Algunos de ellos han cometido el error de decir que “los incrementos a las cuotas” son órdenes del secretario Salazar.
Según comentan a Cicuta, los burdeleros tienen videograbados a esos empleados de Inspección y Verificación.
Positivo
Qué bueno que el Colegio de Abogados Constitucionalistas de Tijuana tendrán como presidente al abogado Humberto Rodríguez Romero, un jurista honesto y trabajador.
La tarde noche del pasado miércoles venció el plazo para la inscripción de aspirantes a la presidencia y al saber que Humberto Rodríguez ya se había inscrito, los integrantes de ese Colegio decidieron abstenerse de inscribirse.
En otras palabras, hay consenso entre ellos.
Humberto Rodríguez será su próximo presidente.
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