La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Cuando presentó la 4T en Shark Tank le dijeron: mucho circo y pocas nueces
El presidente López Obrador, está obsesionado con que los principales comunicadores del país revelen sus (‘inmorales’) ganancias, todos los días insiste en ello, por lo tanto, no sería raro que pronto se filtre un PowerPoint con los presuntos ingresos de los referidos.
El tabasqueño ya lo hizo con Carlos Loret de Mola y señaló que ‘alguien’ le dio la información, aunque resulta obvio que recurrió a la SHCP para exhibir al reportero.
Suponiendo que el villano favorito de la 4T, haya ganado 35 mdp en 2021 y que este fuera el promedio de sus colegas (tendríamos que los diez principales conductores de noticieros ganarían 350 mdp al año), preguntamos ¿esa es la causa de la desigualdad en México?
Desde luego que no, la salvaje asimetría social de nuestro país, se debe a que el 1% de la población (los Slim, los Larrea, los Salinas Pliego, los Baillères, los Aramburuzabala, etc.), acumulan una riqueza equivalente a la del 95% de los mexicanos, de acuerdo a un estudio de Miguel del Castillo Negrete (https://bit.ly/3I7tpSN).
Además, en lugar de corregirse el fenómeno, los machuchones siguen incrementando su fortuna favorecidos por el Estado Mexicano, son asiduos al Palacio Nacional e, incluso, dada su ‘gran sensibilidad social’, son asesores de YSQ.
Así pues, si el señor presidente se espanta por lo que ganan Aristegui o López Dóriga, que mejor busque otros datos e indague como podría aplicar un impuesto a la riqueza (desmedida) y con ello, fortalecer la recaudación del fisco.
Estudios de OXFAM (organismo que busca la erradicación de la pobreza), indican que un impuesto progresivo anual en México, a las personas con capital de más de cien mdp, permitiría recaudar alrededor de 400 mil mdp, suficientes para cubrir el presupuesto anual de todos los programas sociales.
No se enrede don Andrés, ya somos mayores de edad, no nos quiera chamaquear.