NO PASA…NADA
Por Jesús Solano Lira
Nuevamente el presidente López Obrador reiteró su condición para reunirse con los padres de los 43 jóvenes desaparecidos de Ayotzinapa, como siempre, quiere que sus chicharrones truenen. A qué le teme, a qué le saca. Será que piensa que los asesores, representantes legales y organizaciones defensoras de los derechos humanos no respetarán su investidura presidencial.
Bueno, ni él la respeta, cuando ha sido indolente e indiferente con el dolor ajeno. Pues ya tiene respuesta. De acuerdo con una entrevista concedida a El Sol de México, Clemente Rodríguez, padre del estudiante Cristian Alfonso Rodríguez Telumbre rechazó las condiciones que impone el inquilino de Palacio Nacional., para reunirse con los familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Tras reprobar la actitud del presidente, el papá de Cristian Alfonso, advirtió que no van aceptar ningún condicionamiento del tabasqueño. Subrayó que ya lo platicó con “algunos padres y pues no vamos a aceptar las condiciones que nos está imponiendo el presidente de que no vayan nuestros representantes, y van a ir nuestros representantes para que nos ayuden con las dudas que tengamos con el presidente”.
El presidente carga con uno más de los compromisos incumplidos, cuando en campaña prometió justicia para los normalistas desaparecidos, utilizó esa desgracia para ganar simpatías, ahora en el ocaso de su administración dice que sí se reúne con los padres de los 43, pero con sus condiciones. No la chifle presidente que es cantada.
EN CAMPAÑA
En su documento Brújula Electoral, la organización México Cómo Vamos, da cuenta de la situación económica en la Ciudad de México, y destaca, entre otros interesantes temas, que 3 de cada 10 habitantes se encuentran en situación de pobreza laboral, es decir, los ingresos laborales de su hogar no son suficientes para adquirir la canasta alimentaria básica para todos sus integrantes. Esta proporción es menor al agregado nacional, pero aún preocupante.
Además, ahí le van otras cifras, para que vea que no todo es bien bonito en la capirucha, como pregona su ex jefa de gobierno y su sucesor, Martí Batres, que también la hace de jefe de campaña de Clara Brugada. 5 de cada 10 trabajadores se ocupan en la informalidad, sin vínculo reconocido ni prestaciones laborales. Se encuentra ligeramente mejor que antes de la pandemia, perooooo aún representa un reto importante.
Y qué decir de las brechas salariales. De acuerdo con México Cómo Vamos, al último trimestre de 2023, por cada 100 pesos que ganó un hombre en un empleo formal, una mujer recibió 89.3 pesos. Y por cada 100 pesos que ganó un hombre en la informalidad, una mujer percibió 79.3 pesos.
Ahora bien, los indicadores sociales señalan que, aunque es la entidad con mayor progreso social del país, la tercera con menor carencia por acceso a la alimentación, y la que cuenta con las mejores condiciones de vivienda entre sus habitantes, así como la que muestra la menor tasa de analfabetismo y la que ofrece las mayores oportunidades de acceso a la educación superior, también tiene sus prietitos en el arroz. Y esos prietitos o negritos en el arroz, cómo usted le quiera llamar, son los siguientes:
Es la cuarta entidad con mayor mortalidad por enfermedades infecciosas, la tercera con mayor mortalidad por enfermedades circulatorias, la segunda con mayor índice de crimen violento, la cuarta con mayor tasa de agresión a periodistas, deporte favorito del presidente López Obrador y banda que le acompaña, así como la segunda con mayor percepción de corrupción en instituciones que imparten justicia.
Ahhhh, pero para el jefe de gobierno, Martí Batres, la candidata a la presidencia de Morena, Claudia Sheinbaum, y la aspirante del mismo partido al gobierno capitalino, Clara Brugada, en la Ciudad de México NO PASA… NADA y todo es bien chido. Quiúboles.