homopolíticus
- Milagro en MORENA de ‘san Juditas’
El ciudadano cualquiera que empezará a ser el sábado Ulises Bravo, identificado por ser hermano de un exfutbolista mexicano que jugó en la zona donde se juega el peor futbol del mundo, convocó a una rueda de prensa que debió publicarse en la sección de nota roja.
Sin embargo, La Jornada, Diario de Morelos, El Sol de Cuernavaca y Lo de hoy, le dispensaron espacios que jerarquizaron en páginas de política, acaso por su espuriato en MORENA.
Durante su exposición, habló de delitos, de seguridad ciudadana, de procuración de justicia, de administración de justicia, los pasos usuales que se siguen desde la perpetración de un delito hasta la judicialización y encarcelamiento.
Cometió tres errores de cálculo de cabildeo en la barandilla de comisaría, que podrían jugarle en contra sentido:
1. Le puso el dedo —para continuar con el argot delincuencial-policiaco— a un magistrado judicial, a quien públicamente delató con su nombre, dándole trato criminal de testigo protegido.
2. Lo mismo hizo cuando agredió con su argumento en la rueda de prensa de nota roja a la madre de la hija de ambos, Liu León, a quien violentó nuevamente, confirmándose: «Me quería matar», sin mostrar pruebas judiciales.
3. Evocó el asunto de la hermana agnada —NFBF— de su hermano uterino —Cuauhtémoc Blanco— que, según consta en fojas de papel periódico y en páginas de redes de chismes, fue atacada sexualmente y por él amenazada, lo que no negó.
Como príncipe azul, Ulises despertó con un beso a la hija de la Reina del cuento, sin haber necesidad, porque para efectos de errática litigación de asuntos que castiga el Código Penal, la princesa se convirtió en una rana venenosa llamada Karma.
En su elocuente disertación, el ciudadano Ulises no sólo reconoció, sino aceptó responsabilidad, en uso de otras palabras y en la estructura de su historia contada, en esos tres errores que ponen en riesgo su libertad.
letraschiquitas
El sábado 16, el incompleto consejo estatal de MORENA elegirá a su primer presidente en 15 años. Entre los consejeros hay cuadros políticos de Rabindranath Salazar, Víctor Mercado y Ulises Bravo —y los que no quieren a ninguno de los tres—. Los momios se inclinan a Raúl Tadeo Nava, san Juditas***. Su jefe Adán Augusto López le dio la boleta de votación marcada a favor al cenador Víctor Mercado, sólo para depositarla en la urna, en la designación de Rosario Piedra en Derechos Humanos. —No es que desconfíe en ustedes, pero hay que garantizar los votos, les dijo a los senadores***. Mientras la diputada Jazmín Solano se muestra dócil ante la necesidad de reemplazó en la Fiscalía, un Rafael Reyes más institucional y por tanto leal, urge la necesidad de que el zar anticrimen a que renunció ser Uriel Carmona, haga eso: renunciar.
