Yo Campesino / Gabinetazo
• Secretarios para trabajar o para cubrir plazas pero sin decisión ni iniciativa
Miguel A. Rocha Valencia
Hace seis años se designó a un gabinete que dio esperanzas acerca de cuál sería el desempeño del gobierno del ganso, al final todos los que iniciaron renunciaron o fueron removidos de sus cargos; algunos de plano se fueron diciéndose traicionados, otros se convirtieron en floreros como Olga Sánchez Cordero y unos más aguantaron que los criticara el profeta en público, los desacreditara y se fueron al destierro.
Entre los primeros, estuvieron dos exsecretarios de Hacienda quienes se tornaron en críticos del proyecto al cual fueron invitados y otros se fueron en silencio luego de servir de plataforma y enlace al principio como Julio Scherer Ibarra, Consejero y Santiago Nieto en la UIF quienes fueron la horca y el cuchillo para chantajear, perseguir y acuchillar a empresarios y políticos para que el de los pies fríos, Alejandro Gertz Manero, en la FGR les “tendiera su camita” con carpetas de investigación para así doblar a disidentes y críticos que de esa manera, cambiaron de opinión o cooperaron con el régimen.
Igual sucedió con el exjefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Carlos Romo Garza quien luego de dos al servicio de la nueva mafia del poder de la que se dijo converso, donde sirvió a señalar y acercar empresarios que confiaron de la 4T hasta que fueron traicionados y al igual que el ex jinete, se retiraron en silencio.
Eso sí con unos cuantos millones más. Hubo desperdicios como Juan Ramón de la Fuente a quien muchos señalaron como mandamás en Educación y lo mandaron a Washington o sobre valoraciones como la Clouthier en Economía donde dio lástima lo mismo que “la consen de los negocios” Rocía Nahle García quien energía sólo hizo ridículos y mucho dinero para ella y sus parientes, así como puestas en escena con una refinería que al final, no refinó, pero sí costó casi tres veces más.
Total, que de la alineación inicial de primer nivel se fueron más de 20 y los que quedaron sólo fueron, material y literalmente encargados de despacho. De tal suerte que, si la que viene es la segunda parte de la 4T, o sea, remasterizada y con mayor poder concentrado en la silla presidencial, de poco o nada servirá que nos presenten un “gabinetazo” con todo y las limitaciones de los cuatroteros que no concentran mucho talento y menos experiencia en sus filas. Imagínense a un tipo como Gerardo Fernández Noroña como coordinador parlamentario o presidiendo la Jucopo.
Alguien se salvará desde luego, pero algunos como con traumas de revancha como quien será secretario de Agricultura con muchos entorchados académicos, pero tan carente de “cancha” que salió a decir que México no necesita importar maíz transgénico, a pesar de que las compras al exterior crecieron en tres millones de toneladas.
Está urgido de reconocimiento y no se diga Marcelo Ebrard, quien entra a negociar con los gringos, pero ¿lo van a dejar? Ese es el tema, insistimos el poder estará más concentrado en una sola persona tanto que podrá hacer lo que se le de la gana como el caudillo que se va, pero de manera legal, como el poder perdonar a quien quiera sin necesidad de jueces o magistrados, tendrá la horca y el cuchillo en sus manos con un Legislativo federal al que, con sólo tronarle los dedos, hará lo que diga.
Ni hablar del poder Judicial, aun sin reformas, en pocos meses estará totalmente sometido, sin estridencias ni pleitos y menos aún confrontaciones con gobiernos ajenos, por simple colonización como ocurrió con el INE donde llegó Guadalupe Taddei a hincar al instituto a los pies del profeta. O sea, si el que se va ni siquiera tuvo que recibir, platicar o negociar con la oposición, quien se queda mucho menos, más con la soberbia que le caracteriza, incluso más allá de si tendrá poder de decisión o si obedecerá la voz del amo a quien todo le debe.
Con el que se va quedó quien mandaba, que los secretarios, salvo el de la Defensa Nacional, no tenían voz ni voto, menos sugerir o cuestionar los preceptos del profeta. Se hizo lo que ordenó sin quitar o mover un punto o una coma. Tuvo como únicos diques a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y, en algunos casos a las minorías en la Cámara de Senadores que hoy, estará a las órdenes de la nueva presidenta con sólo comprar a dos de sus miembros, varios de los cuales están listos para vender su amor aunque no sea caro.
Finalmente podrán llegar experimentados y entorchados afines a la 4T, algunos con capacidades reales, y hasta les darían chance de actuar para aprovechar sus relaciones como pasó con Romo Garza con los empresarios y Marcelo con personalidades al otro lado de la frontera, pero ¿Hasta dónde? Porque la decisión para el tercer piso ya está tomada y muchos de quienes se creen corcholatas, no van a llegar ¿o sí? Esta vez la decisión y el control será más determinante, como en aquel PRI de las decisiones verticales donde nadie se movía, pero esta vez con mayor dureza. Lo veremos.