NO PASA… NADA
Por Jesús Solano Lira
Al parecer, ahora sí los sabuesos del gobierno federal hicieron bien la tarea, hasta estrellita podríamos ponerles, por la detención de René Gavira Segreste, ex director de Administración de Segalmex, por el desfalco a ese organismo descentralizado, por 9, 500 millones de pesos. Tras echarle el guante fue trasladado a la Fiscalía General de la República.
Ojalá no sea el chivo expiatorio. Sobre este distinguido personaje, pesan cuatro órdenes de aprehensión por presunta defraudación fiscal de 2 millones 37 mil pesos, por la pérdida de mil 687 millones de pesos de Segalmex, derivado del incumplimiento de la entrega de leche bronca a proveedores, así como por uso ilícito de atribuciones y facultades.
Así se las gastaba el subordinado del ex director de Segalmex, Ignacio Ovalle Fernández, otra finísima persona que el inquilino de Palacio Nacional se ha empeñado en proteger, a pesar del fraude cometido a ese ente, que a decir del tabasqueño le dolió mucho porque se puso al descubierto un caso, de muchos que han imperado en su administración.
Es más, el presidente prometió, bueno eso de prometer, es parte de su narrativa diaria, que no habrá impunidad en el caso, y cómo siempre la pregunta es ¿entonces porque no procedió contra Ignacio Ovalle Fernández?, y hasta lo premió con la Coordinación del Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal (Inafed).
Y vaya que el priista de la vieja guardia tiene un negro, pero negro historial. Y ahí le van los datos: en la administración de Carlos Salinas de Gortari, Ovalle Fernández, fue director de la CONASUPO y su gestión también estuvo llena de irregularidades como la compra de maíz amarillo para consumo humano, cuando ese grano es para consumo animal, y la adquisición de leche irlandesa contaminada.
Pero en la 4T NO PASA… NADA. TERMINÓ LA INFAMIA Vaya revés para la Fiscalía General de República con la exoneración de Rosario Robles Berlanga, en el caso de “La Estafa Maestra”. Ojalá a estas horas el presidente López Obrador y el Fiscal Alejandro Gertz Manero, ya se hayan recuperado del coraje y de su frustración de haber perdido.
Para Rosario Robles Berlanga, con su exoneración “terminó la infamia” y su “trayectoria y mi nombre siguen intactos” y fue más allá al refrendar sus convicciones, al asegurar que pese a estar encerrada “jamás dejé de ser libre y nunca me doblaron ni me arrebataron mi dignidad”.
Sin lugar a dudas, Rosario Robles Berlanga, fue víctima del sistema y de una persecución política y judicial del Estado, y de la venganza de un presidente que asegura que la venganza no es su fuerte, que bueno que no es su fuerte, y lo peor de todo, que tenga tan corta memoria por la ruptura que tuvieron hace 15 años, cuando ambos eran militantes del PRD.
Y vaya ejemplo que deja Rosario Robles para muchos políticos, al reiterar que utilizar las instituciones para “venganza” no es de un gobierno demócrata. A ver si entiende presidente.
40 AÑOS
El Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad Autónoma Chapingo, STAUACh, estuvo de manteles largos por sus cuatro décadas de existencia, con el compromiso de reivindicar los derechos de los maestros, como el derecho al trabajo, ante los cada vez más persistentes casos de rescisión de contratos de académicos.
En la partida del pastel, el combativo sindicato denunció que “la presente administración de la Universidad Autónoma de Chapingo”, atenta “contra este derecho y rescinden a maestros sin hacer una investigación real”, además de violar el Contrato Colectivo de Trabajo” pisoteando derechos que les corresponden.
Y su dirigente, Saúl Castañeda Díaz, le puso sal y pimienta al reclamó, al llamar a sumar esfuerzos para combatir la desigualdad y el abuso de autoridad por parte de las autoridades, y demandó a la comunidad académica sensibilidad y conciencia de la importancia del Sindicato para defender su lugar de trabajo y su permanencia.