Aníbal Mujica
Hemos denunciado y probado la corrupción galopante de Claudia Sheinbaum, Rosaura Ruiz Gutiérrez, Juan José Serrano y otros más de menor nivel, que no solo están impunes sino premiados con nuevos y mejores cargos, servidores públicos corruptos, déspotas y prepotentes; pero ahora encontramos que el Alcalde de Coyoacán, Giovani Gutiérrez también tiene su historia de terror.
Un grupo cada vez más nutrido de comerciantes establecidos en locales comerciales formales, acusan extorsión por personal de la Alcaldía Coyoacán.
Luis Serio, Cecilia Obregón, Daniela Salado y el propio Alcalde Giovani Gutiérrez están enterados y no hacen nada para evitarlo, en cambio parecen fomentarlo.
El seguimiento dado por el que escribe, a un intento de un ciudadano comerciante en sentido de regularización de locales comerciales lleva ya más de 3 años sin éxito, los documentos y la platicas con malos “servidores públicos” son pruebas fehaciente del contubernio generalizado del personal de la Alcaldía Coyoacán, la extorsión es práctica común en Coyoacán. Desde los inspectores, supervisores o visitadores que se presentan bajo amenaza de clausurar a los comercios, hasta el mismo Giovani Gutiérrez.
El ciudadano que emprendió el viacrucis de la tramitología en la Alcaldía Coyoacán data de 2022, los denominados servidores públicos, que deberían de ser eso: Servidores públicos, pero se comportan más como contra-parte en un litigio contra la ciudadanía, en lugar de ser un facilitador del cumplimiento de la norma, orquestan el andamiaje para que imperen las mordidas en Coyoacán.
Después de comunicación abierta con más de una decena de empleados de la Alcaldía Coyoacán, entre los cuales figuran Luis Serio, Daniela Salado, Cecilia Obregón y Saul Rodríguez Cabello, tenemos la certeza de que Giovani Gutiérrez no solo está enterado de lo que pasa sino que lo comanda.
Luis Serio da a los ciudadanos inconformes, con la puerta en la nariz y reta a que se levanten las denuncias correspondientes, Daniela Salado recomienda asistir a ver a todo el escalafón de la alcadía ¿para que la gente se canse, desista y siga dando mordidas?, Cecilia Obregón se compromete a orientar de manera correcta y asertiva, Saúl Rodríguez se concreta a encontrar algún elemento que exonere a la alcadía de la responsabilidad de la extorsión al negar trámites, en lugar de buscar solución al trámite y al final nada, no hay solución. Incluso el diputado Paniista Ricardo Rubio de Coyoacán ofrece apoyar con Giovani para agilizar el trámite, pero en los hecho nadie hace nada, nadie orienta ni resuelve.
La alcaldía hace acto de presencia en los comercios coyoacanenses con amenaza de clausura, el ciudadano visita las oficinas del órgano político-administrativo para cumplimentar la norma y ahí encuentra negativa del permiso o autorización correspondiente, todas las veces que se presentan trámites, en cada oportunidad, “Coyoacán” observa algo más y piden otra cosa adicional en la negativa de trámite. ¡Ah!… pero después aparecen “héroes” los mágicos gestores “recomendados” por personal de la Alcaldía Coyoacán, qué tampoco resuelven nada dejando intacto el negocio de extorsión de Giovani Gutierrez.
¿Por qué la Alcaldía de Giovani es un “stopper” del cumplimento de la norma, del fometo económico que representa dejar a los emprendedores producir riquezas? ¿Por qué los tramites no son resueltos? ¿A quién conviene comerciantes irregulares?
Algún servidor de nivel medio bajo, cinicamente afirma: ” El Jefe Giovani tiene razón, los comerciantes reciben mucho dinero en efectivo cuyo impuesto no pasa por las arcas públicas, que se mochen”.
Resulta que Jorge Castañeda tiene razón cuando afirma: “creíamos que la corrupción era muy priista, pero al cambiar de gobiernos nos damos cuenta que la corrupción es muy mexicana”
¿Será que siempre estaremos Atrapados entre comprobados corruptos gobernantes como Claudia Sheinbaum, Rosaura Ruiz, Juan José Serrano y ahora Giovani Gutierrez?
¿Por qué no castigados con el voto a Giovani Gutierrez, Ricardo Rubio y panistas secuaces?
Si hay indicios de corrupción, a la basura y el que sigue.
Atrapados entre malos gobiernos y peores, estamos ordenados a padecerlo por no castigarlos al votar.