NO PASA….NADA
Por: Jesús Solano Lira
Apenas el viernes pasado la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, aseguró que el paquete económico es sólido, como el hierro, y que tendría cambios significativos en la distribución del presupuesto, pero a que costo.
Por eso no sé Rick, creo que fueron falsas las declaraciones de la jefa del ejecutivo, y no lo digo yo, lo han manifestado legisladores de oposición, productores, empresarios y dirigentes de trabajadores agrícolas. Y los chismes, como el dinero son para contarse, ahí le va. Para el líder de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas, Álvaro López Ríos, el recorte presupuestal de 4.7% al campo, mantendrá el fracaso en la producción de granos básico, que se arrastra desde el sexenio pasado, y aniquila la autosuficiencia alimentaria, que se ubica en 44 por ciento. Uffff.
López Ríos fue más allá, al señalar que la reducción equivale a 3 mil 644 millones de pesos menos, por lo que el “ discurso de Autosuficiencia o Soberanía Alimentaria sin presupuesto para apoyos productivos es pura demagogia populista y continuidad del abandono al campo”.
Tómala. Ahora bien, si a eso le añadimos la austeridad republicana y la miseria franciscana durante la pasada administración, se mantiene la histórica deuda con el campo mexicano, que a decir del líder de la UNTA, con López Obrador el campo vivió un “abandono criminal”. No es que le tenga tirria al que se fue a La Chingada, peroooo Álvaro López, denunció que ese abandono fue producto del desmantelamiento de políticas públicas, eliminación de instituciones de apoyo a pequeños agricultores como la Financiera Rural y “crecimiento de importaciones de granos y oleaginosas convirtiendo a México en el país número uno en importación de maíz a nivel mundial”.
Quiúboles cual autosuficiencia alimentaria. Aquí no aplica la política del NO PASA…NADA, ya que con ese sombrío panorama, se aleja la posibilidad de alcanzar la autosuficiencia y soberanía alimentaria pues al tercer trimestre de este año la importación en granos marcó un récord histórico, con cerca de 29 millones de toneladas.
De acuerdo con el líder de la UNTA, con esas cifras queda claro que la demanda nacional, en dicho rubro, se cubre con el 66% de importaciones mientras que la producción nacional cubre el 44%, con lo que México importa maíz, trigo, soya y sorgo de Estados Unidos”, no pues está cabrera el panorama. Por si eso no fuera poco, López Ríos destacó que de acuerdo con el CENSO Agropecuario 2024 del INEGI, existe una superficie no sembrada de 4 millones 067 mil 206 hectáreas debido al mal temporal, la falta de crédito, por enfermedad, por falta de dinero o apoyos o porque no hubo quien la sembrara, entre otras causas.
Y no es por alarmarlo, pero a eso hay que agregarle más limón a la herida, con los amagos del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump de imponer aranceles si el Gobierno mexicano, si no frena lo migración hacia ese país y no combate al narcotráfico, lo que afectará el rubro alimentario.
“La imposición de aranceles por parte de Estados Unidos tendría efectos adversos para nuestro país ya que México enfrentaría mayores costos en las importaciones de granos básicos necesarios para satisfacer su demanda interna”, estimo el dirigente de la UNTA. Vaya que no hay que echar en saco roto la amenaza de Donald Trump, quien eligió este martes al multimillonario Howard Lutnick como secretario de Comercio, un cargo estratégico desde el que liderará la implementación de su política proteccionista, centrada en la imposición de elevados aranceles, especialmente contra China.
El empresario, de 63 años, ha sido desde hace años un ferviente defensor de la agenda económica de Trump, incluidas sus propuestas sobre aranceles, que han generado preocupación en algunos sectores de Wall Street. Hay que recordar que en un acto de campaña celebrado en el Madison Square Garden de Nueva York, Lutnick destacó que Estados Unidos alcanzó su mayor prosperidad a principios del siglo XX, cuando “no existía el impuesto sobre la renta y todo se financiaba con aranceles”. Así que sobre amenaza no hay engaño, si, ya sé que es sobre advertencia no hay engaño. .