Por María Manuela de la Rosa Aguilar.
Desde el inicio de la guerra el, presidente Volodímir Zelenski ha demostrado un gran liderazgo para enfrentar a Rusia, en donde ha sido acompañado por el bloque occidental, en un combate que se ha tornado de desgaste, no sólo para Ucrania, sino para los mismos rusos, que han tenido que recurrir a sus reservistas. No obstante, en esta guerra Vladimir Putin está decidido a no ceder y la invasión tiene como objetivo apoderarse de Ucrania, porque el botín es irresistible:
Uno de los principales productores de grano del mundo, con 42.5 millones de hectáreas de cultivos;
Con la tercera central nuclear más grande del mundo;
Uno de los mayores productores globales minerales metálicos y no metálicos, cuenta con 117 de los 120 minerales conocidos y con 8,6761 depósitos de importancia Industrial;
El segundo mayor productor de extracción de galio (utilizado en la producción de semiconductores);
El quinto lugar en producción de germanio, un mineral utilizado en electrónica, fibra óptica, lentes y joyería;
El sexto productor de titanio;
El séptimo mayor productor de hierro del mundo;
El octavo lugar en la extracción de grafeno, que es un nanomaterial muy duro, flexible y ligero de muy alta resistencia, 200nveces mayuor que el acero estructural, por lo que se utiliza en la industria del sector energético, la electrónica, la construcción y la salud;
Con importantes reservas de magnesio, níquel y mercurio;
Con la segunda reserva más grande de gas natural de Europa.
Y con una situación geográfica envidiable, pues no sólo es el segundo país más grande de Europa, sino que además de limitar con varios países del bloque oriental, también con Occidente y tiene salida al Mar de Azob y al Mar Negro, a través el cual tiene comunicación con Turquía y puede acceder al Mar Mediterráneo, una posición geoestratégica muy apetecible por Rusia.
En un nuevo intento para recibir apoyo de sus aliados, el presidente de Ucrania se dirigirá al Congreso de los Estados Unidos este martes 5 de diciembre, para que apoyen el presupuesto que incluye la ayuda a Kiev, por lo que Zelenski, junto con los asesores de seguridad del presidente norteamericano Joe Biden, expondrán ante la Cámara de Representantes las razones por las que se requieren refuerzos de asistencia militar.
El presidente de Ucrania se dirigirá al Congreso a través de una video-llamada para pedir a los congresistas su apoyo, ya que existe el riesgo de que Rusia pueda avasallar por completo al país. Para Biden la situación se torna compleja, dado que no cuenta con la mayoría en el Congreso y se acercan las elecciones. Ya en octubre, el presidente solicitó al Congreso la aprobación de unos 106.000 millones de dólares, no sólo para la financiar la guerra en Ucrania, sino también la de Israel con Hamás y reforzar la seguridad en la frontera de Estados Unidos, pero la respuesta fue negativa.
Por otra parte, para Ucrania está muy claro desde un principio que Rusia nunca ha tenido la intención de negociar y ha estado moviendo sus fichas de ajedrez durante meses dando sutiles señales a través de la diplomacia para mover a los países de occidente hacia la búsqueda de una negociación y dar fin a la guerra. Por eso la visita del presidente francés Emmanuel Macron a Rusia, cuya presencia dio una esperanza de acuerdo.
En un principio la ONU se pronunció y dijo que debía buscarse una solución diplomática, el gobierno ucraniano intentó negociar a través de Bielorrusia y tuvieron lugar diversos encuentros diplomáticos, pero sin ningún resultado concreto y estos esfuerzos se realizaron a través de tres rondas en Bielorrusia, pero nada sucedió; el 3 de marzo de 2022, Naftalí Bennett, el primer ministro israelí, viajó a Moscú a petición del presidente Zelenski para mediar en el conflicto, pero sin éxito.
Uno de los que también han sido muy activos ha sido el presidente turco, Recep Tayipp Erdogan, quien no sólo logró que Rusia permitiera las exportaciones de grano controladas, sino que ha tratado de mediar en el conflicto para llegar a un acuerdo de paz, el cual no se ha concretado. Los países europeos por su parte se han decantado a favor de Ucrania, con importantes apoyos militares y económicos, pero la guerra continúa y si bien los ataques han disminuido, la tensión continúa y no se ve fin a corto plazo.
El conflicto Israelí también ha favorecido los intereses rusos y Ucrania se encuentra ante un futuro cada vez más incierto, ahora con la esperanza del apoyo norteamericano.
Rusia es inflexible y sólo aceptará un tratado de paz si se queda con las zonas ocupadas y si Ucrania no entra en la OTAN, entonces la lucha de los ucranianos habría sido en vano y quedaría totalmente a expensas de Rusia. Para Putin esta situación ha sido favorable, pues mientras trata de recuperarse de las pérdidas, hace tiempo, debilitando poco a poco a su víctima, que se va quedando sin apoyo suficiente.
Europa asfixiada por los problemas políticos y económicos, pero sobre todo, invadida por la migración constante, Estados Unidos de igual manera. Lo curioso es que la ola de migrantes no cesa y en momentos de crisis diplomáticas y la guerra, aumenta la cantidad de personas tratando de ingresar a la UE y a los EEUU a través de su frontera con México.