Utopía
Eduardo Ibarra Aguirre
La presidenta Claudia Sheinbaum informó que el gabinete de seguridad prepara un informe de lo hecho por su gobierno en seguridad pública en 9.5 meses, en particular sobre fentanilo porque tiene la impresión de que el magnate –enriquecido ilegalmente– no está enterado o no le informan sus colaboradores.
Las dos aseveraciones son correctas y existe una tercera que, por lo visto, es del conocimiento de la doctora y consiste en que Donald John Trump no lee ni los informes de inteligencia, si nos atenemos a lo declarado por académicos en Washington. Es pertinente que el informe consistirá en un video para el presidente, gobernadores y legisladores. Y de aquí puede colegirse que la serenidad y paciencia de Sheinbaum Pardo, misma que recomendaba Kalimán, todavía no pierde un gramo, tras la más reciente y colonizadora amenaza del imperio en retroceso, como es costumbre de presidentes republicanos y demócratas, porque son iguales al buscar responsables en el extranjero de los graves problemas que ellos y sus políticas generan en Estados Unidos.
Donaldo Juan Drumpf (apellido original) amenazó a México, como es su imperialista costumbre, al promulgar la Ley Alto al Fentanilo: “Hoy damos un golpe justo a los comerciantes de droga, traficantes de narcóticos y los cárteles criminales… los salvajes cárteles de droga y los traficantes criminales tienen un control tremendo sobre México y los políticos y las personas electas… Tenemos que hacer algo al respecto, no podemos dejar que eso pase”. Y culpó a cárteles y políticos de México en general, pues “Las autoridades mexicanas están aterradas, aterradas de presentarse en sus oficinas, aterradas de ir a trabajar por los cárteles”.
Desde 2017-21, su primer periodo de gobierno, Trump conquistó el más prestigiado de los premios a la mitomanía, pero no se da por enterado, agobiado como está porque se halla muy lejos de cumplir con sus promesas electorales. Los 15 minutos para materializar la paz en Ucrania ya consumió un semestre sin resultados; las ocurrencias y reculamientos arancelarios amenazan con reflejarse en los bolsillos de los consumidores; la política en Medio Oriente gira alrededor de los objetivos de Benjamin Netanyahu, el criminal de guerra como lo acaba de ratificar la Corte Penal Internacional; la mayoría de los ciudadanos consideran que los migrantes hacen un aporte decisivo a USA; mientras que el supremacista es el presidente con el más bajo respaldo ciudadano en 80 años.
Por si no fuera suficiente, su extraordinaria incontinencia verbal e indisposición para usar la escala de grises y observar a EU y al mundo desde la perspectiva del blanco y negro lo enredó en la trampa que él se metió sobre los documentos del fallecido Jeffrey Epstein, explotador sexual y pederasta impar. En campaña ofreció revelar los documentos que todo indica lo incriminan como distinguido cliente y ahora resulta que fue una falsedad, que lo relacionado con él es una “teoría de la conspiración”.
Ni una palabra dijo el extraordinario demagogo sobre su primer gobierno, el Centro de Control de Enfermedades reportó que las muertes por sobredosis de fentanilo crecieron hasta las 111 000 anuales en los primeros años de Joseph Biden. Pero el número de muertes se desplomó 30% en los últimos 16 meses del gobierno de Biden, para llegar sólo a 76 000.
Mucho menos mencionó a los intocados cárteles de las drogas en USA: Latin Kings, California Mexican Mafia,18th Street, Bloods, Pagan’s OMG, Crips, MS-13 y Hells Angels.
Acuse de recibo
“(…) Son ya once los países que componen el Grupo Político Económico que se nombra BRICS, por las iniciales de los países que lo conformaron inicialmente. Su reunión más reciente tuvo lugar en Brasil y Lula fue un personaje que destacó en el evento, no sólo porque fungió como anfitrión, sino porque por esas mismas fechas realizó una visita a Cristina Kirchner, quien sufre la represión a manos del régimen neofascista de Javier Milei. Dos fueron los temas en los que hubo consenso: la urgencia de que el mundo marcha hacia la multipolaridad, en lugar de buscar un relevo al hegemón estadounidense, cuyo declive nos está causando muchos dolores de cabeza, pues los encabeza un personaje muy ocurrente, de nombre Donald Trump. También fue motivo de pronunciamiento especial el asunto de la salud, debido a que el mismo Trump ha intentado desarticular la OMS, porque no se somete a sus directrices. Frente al G7, que agrupa a los países más armados del globo, BRICS no representa gran cosa. (…) Pero en lo económico tiene ya un peso superior a Occidente. No obstante las muchas señales de preocupación que se levantan por las políticas trumpeanas, el BRICS representa una esperanza. Yo sólo sugeriría que revisen su postura frente al gran pueblo de Venezuela, que es hoy por hoy uno de los más agredidos por el Imperio del Norte. Un abrazo. Enrique González Ruiz”. https://monitorfinanciero.com.mx/utopia-brics-y-la-declaracion-de-rio-de-janeiro-eduardo-ibarra-aguirre/
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