Fuera de Todo
Denise Díaz Ricárdez
Si hay excelentes oportunidades de acercar a quienes se dedican a la escritura, quienes editan y quienes gustan de leer son, sin dudar, las llamadas ferias de libro.
Concluyó el domingo anterior la ya muy acreditada de la Ciudad de Guadalajara, en la cual registraron la visita de aproximadamente 975 mil personas en los ocho días que estuvo abierta.
Vale mucho la pena destacar la presencia de escritoras y escritores tanto de México como del exterior en la capital tapatía, casi mil y; cuando menos dos mil 800 editoriales grandes, medianas y pequeñas, así como ilustradores, bibliotecarios, correctores, todos en contacto con un gran público asistente de todas las edades y gustos por los libros, que siguen vivitos y coleando.
Este año estuvo dedicada la feria a Barcelona y se ha visto por mucho la muy grata presencia del gran cantador Joan Manuel Serrat, quien dígase lo que se diga sigue cautivando a generaciones anteriores y los que le siguen descubriendo, con sus mensajes de unidad, paz, diversidad y pluralismo como lo hizo en sus discursos.
Y no menos la presencia del gran actor Richard Gere quien junto con Serrat y el cineasta Gael García Bernal repletaron los espacios de sus conferencias y levantaron más de un suspiro como la barcelonesa Amat Kiro.
En Guadalajara, el año entrante su feria estará dedicada a Italia.
Se estima que en México hay 130 ferias del libro cada año, principalmente de centros de estudios y universidades como las de Yucatán, Sonora, Baja California, Campeche, Veracruz, la Ciudad de México, e todas despiertan inusitado interés de niños, jóvenes y adultos.
De verdad son imperdibles, así que cuando sea posible hay que asistir y permitir que la lectura siga su camino hacia el mundo diferente y mejor en todos los órdenes, al que tanto se aspira en medio de tantos enredos.
Así que libros, otras vez vivitos en poesía, cuento, novela, ensayo, investigaciones. Todo pues.




