Corruptos y Jactanciosos
Obsecuentes sirvientes de Palacio Nacional como todos los de su especie, los diputados federales de Morelos presumen la aprobación del presupuesto 2025 con frases y fotografías que ofenden la inteligencia.
Los diputados, que no legisladores, Sandra Anaya, Ariadna Barrera, Juan Ángel Flores y Agustín Alonso chico, no hicieron nada, ni siquiera leyeron el dictamen, glorificándose como rescatadores de la Universidad estatal.
Lo único realizado fue votar a favor, como se les ordenó.
Candidatos los cuatro gracias a una de las peores formas de reparto del poder, es decir, al dedazo, dos de ellos son egresados de la UAEM, Anaya y Flores, pero ninguno ha hecho sino simular estar a favor de su alma mater.
La comunidad universitaria no está representada por ninguno de los cuatro y no hay registro de que profesorado o alumnado se sientan representados —y menos identificados— por estos dos. De Flores recuerdan que fue uno de los provocadores de una de las movilizaciones más grandes de universitarios, que encabezó su rector, contra el gobernador del estado y su bancada diputadil perredista-panista-priísta, en 2015.
Con sospechas de corrupción en Rectoría, los diputados —los perredistas Lucy Meza y Juan Ángel, preponderantemente— intentaron el envío de un contralor para revisar los gastos peso a peso, y pasar por esa figura la autorización de gastos, lo que constituye aún una flagrante violación a la autonomía universitaria. El intento de mantener bajo control a la UAEM, abortó. «Nos vemos en las urnas», le gritaron a Meza. Flores, huidizo, se puso a favor de Palacio de Gobierno, contra su alma mater. Desde Francia, donde fue a festejar su cumpleaños en familia, el mandatario trató infructuosamente de hacer abortar el movimiento estatal universitario.
Cada cual desde sus anteriores responsabilidades, Anaya, Barrera, Flores y Alonso chico, no beneficiaron en absoluto a la comunidad universitaria. Los incrementos presupuestales a la Universidad han sido decisiones de gobernadores. La servidumbre ataca instrucciones. En ningún momento, no obstante poder hacerlo, rescataron a la UAEM de la crisis financiera. Sólo obedecieron, como ahora en San Lázaro, votar a favor de lo que sea, como con la altamente dañina Reforma Judicial, sin leer los dictámenes. Por eso sus letreritos de «Presupuesto histórico» se asemejan en mucho al festejo antropomorfo de quien fue su líder seis años: Cuauhtémoc Blanco.
letraschiquitas
«Se lo lleva el diablo», tituló la nota en su tapa El Gráfico, al negarle posada un sacerdote a un indigente en una parroquia católica de la Ciudad de México, y quién, además, al estar en el atrio necesitado de ayuda, fue sacado en un ‘diablito’ de carga, muriendo en la calle***. Del ataque ayer en Culiacán contra elementos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, falleciendo uno de dos agentes heridos, se señala a Alfredo Beltrán, el Mochomito, como autor intelectual, bajo las órdenes de Iván Archivaldo Guzmán, el Chapito. Anoche ya los buscaban la SSyPC, Sedena y Semar***. Gabriela Albores, hermana de la secretaria María Luisa Albores de Seguridad Alimentaria Mexicana [Segalmex, hoy Alimentación para el Bienestar], fue herida en cuatro ocasiones en un asalto en una cooperativa del pueblo mágico de Cuetzalan, Puebla.