SENTIDO COMÚN
Gabriel García-Márquez
Con el estreno de las Mañaneras de la Verdad, la precandidata de la Coalición Fuerza y Corazón por México (PAN-PRI-PRD) pretende desmentir los datos aportados por el Gobierno Federal en las mañaneras y las que ella considera fake news que se publican en redes sociales, Xóchitl Gálvez da un giro al estilo que venía utilizando en su campaña, para refrescar su imagen durante el periodo de intercampaña, por lo que estas conferencias que serán a las 11.45 am se presentarán desde este lunes 29 de enero hasta el 29 de febrero, como para no perder presencia en los medios nacionales y en las redes.
En un formato similar, pero no igual al del presidente de la República, Xóchitl Gálvez se alternará con sus coordinadores, que darán las conferencias desde la casa de campaña que se encuentra en la Alcaldía Miguel Hidalgo.
Aun cuando el presidente López Obrador hizo un comentario sarcástico al enterarse de que habría mañaneras de Xóchitl Gálvez, no parece haberle hecho ninguna gracia, toda vez que comentó textualmente: “Ya me enteré de que una candidata del bloque conservador va a tener mañanera, me da mucho gusto, es a las 10 de la mañana, no le hace, no crean que los fifís se levantan tan temprano, pero lo celebro”. Sin embargo, agregó: “pero que no solo se dedique a atacarnos, tiene que presentar propuestas: que no nos diga cómo enfrentar la dictadura de Andrés Manuel, cómo enfrentar al populismo y cómo evitar que se destruya el país”, cerró con ironía.
En esta primera mañanera de la verdad, Xóchitl Gálvez se presentó con un nuevo estilo de vestir, que la hizo lucir como una candidata consolidada y declaró que en cada conferencia daría un dato verificado, para desmentir los datos del presidente. Inició con el dato duro de que este ha sido el sexenio más violento en la historia del país, haciendo mención de que durante el sexenio de Felipe Calderón hubo en promedio 52 homicidios diarios, con Peña Nieto 66 y en estos cinco años de gobierno ha habido 93 diarios. Luego afirmó que incluirá participación ciudadana en su proyecto de nación y en referencia al INAI y la CNDH dijo que “hay que recuperar esos espacios que están en la ley y que no se ejercen porque el gobierno no quiere tener quién los supervise”.
Aprovechó la ocasión para celebrar que ha subido 6 puntos en las encuestas, a pesar de que como dijo: la embestida que hay en su contra en portales pagados.
Aseveró que el nearshoring es una oportunidad para atraer inversión extranjera y solucionar la crisis migratoria que enfrenta actualmente el país. Dijo que es el momento de generar empleos bien pagados y evitar la migración. Y consideró que el cierre de la frontera de México con Estados Unidos sería un caos.
EL LASTRE DE MARKO CORTÉS Y ALITO MORENO
Cuando la cuestionaron sobre la presencia de Marko Cortés y Alejandro Moreno en los primeros lugares de las listas plurinominales de sus partidos, solamente respondió que: “les reconozco y respeto a los dirigentes de los partidos y celebro la designación de Manlio Fabio Beltrones en la lista para el senado”.
En resumen fue un buen arranque el de las Mañaneras de la Verdad, mostrando Xóchitl una renovación en su discurso y su imagen, donde el expresidente Felipe Calderón abonó en su favor al declarar que la ambición de Marko Cortés y aliados es un lastre para Xóchitl Gálvez, toda vez que tanto ellos como Jesús Zambrano del PRD se lanzaron como precandidatos plurinominales al Senado encabezando las listas. Y en su cuenta de X publicó: “La vulgar ambición de Marco Cortés y aliados es un lastre para @XóchitlGalvez. Sólo les importan sus puestos y los de sus amigos, no el país. Pierden elecciones, han dejado a los ciudadanos a un lado. Ahora sólo buscan que X los lleve en ancas”.
De manera que Xóchitl Gálvez tendrá que cargar con el lastre de los presidentes de los partidos que la “apoyan” (¿?), para trabajar más con las bases y con los ciudadanos de la sociedad civil, porque con todo y el esfuerzo que ha realizado se encuentra muy lejos de Claudia Sheinbaum quien sigue a la delantera en las encuestas, aun cuando todavía falta un buen tramo por recorrer antes de llegar a las urnas.