Claudia Rodríguez
De acuerdo a los sesudos análisis de Aurelio Nuño Mayer, que de su fracaso como titular en la Secretaría de Educación (SEP) pasó a ser uno de los tantos jefes de campaña –también fallidos–, de José Antonio Meade, candidato presidencial del Revolucionario Institucional; la maestra Elba Esther Gordillo es el factor más importante del rezago educativo nacional.
En el 2016, tras revelarse el bajo rendimiento de los educandos del país a través de los resultados de la prueba PISA, al entonces secretario de Educación, el mismo Nuño, se le fue la boca en señalar a la maestra Gordillo como la responsable de esos resultados tan nefastos por oponerse a la aplicación de la Reforma Educativa.
Poniendo las cosas en claro, los responsables de la educación de los mexicanos son las autoridades de gobierno del ramo, en tanto quien ocupe el cargo de representar a los maestros en un sindicato, estará encargada de defender sus derechos y mejoras en su profesión.
Nuño nunca dejó de señalar a la maestra Elba Esther de excesos que lastimaron el proceso de educación del país, pero nunca reconoció que las erogaciones que se hicieron para promocionar su imagen desde la SEP con miras a la Presidencia, poco tuvieron que ver con mejorar el nivel educativo nacional.
Durante el encargo de Aurelio Nuño en Educación, al relevar a Emilio Chuayffet el 27 de agosto de 2015, el gasto promedio para promover la Reforma Educativa fue del orden de 5 millones de pesos diarios. Sólo en el 2017, se gastaron para ese rubro, 3 mil millones de pesos, cuando el presupuesto aprobado en esa esa partida por el Congreso de la Unión, fue de 70.8 millones de pesos.
Es así como se explica que alguien que ni siquiera sabe expresar las palabras comunes del día a día, ha podido estar en la escena pública como uno de los posibles presidenciables del Revolucionario Institucional y delfín de Peña Nieto.
Los excesos de Nuño, no sólo lo sobrado, sino lo que respecta al despilfarro del dinero público destinado a elevar el nivel educativo, es algo que no debe pasar por alto y de lo que también tiene que rendir cuentas.
A la maestra Elba Esther quienes tienen que solicitarle cualquier tipo de rendición de cuentas, son los maestros del país; pero seguro millones de mexicanos queremos saber a dónde fueron en realidad a parar 5 millones de pesos diarios para dizque promover los trabajos de la SEP, respecto a una Reforma Educativa que en la práctica sólo ha sido administrativa y laboral.
Hagamos cuentas ahora sí, de cuántas becas, escuelas, baños, redes de drenaje y electricidad, bancas, pizarras, desayunos escolares y más, nos debe Nuño.
Acta Divina… La propia ex maestra de primaria de Aurelio Nuño, Olga Payán, le reclamó su nefasta actuación para con el magisterio.
Para advertir… También a Nuño le gusta vestir, calzar y portar relojes muy pero muy caros. ¿Quién le inicio un juicio por ostentoso?
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