DIARIO DE ANTHONY
12:00 p.m. Resolveré lo que me resta. Luego, buscaré empleo de sirviente en casa de un ricachón.
Este será el capítulo final del “Libro de Mi Vida” “Y Anthony consiguió empleo como sirviente en casa de un ricachón. Y allí se quedó… por siempre y para siempre”. Fin.
“Y todas las mañanas al sacarle brillo al coche de su amo, con un dejo de apatía la mente de Anthony volvía a repetirle: “¡Idiota! ¡¿Pero dónde quedaron tus sueños de triunfar como escritor en Hollywood?!”
Hollywood; eso y escribir una grandiosa historia.
“De repente, mientras Anthony cepillaba la tasa donde su amo cagaba todos los días, las lágrimas comenzaron a brotarle de sus ojos tristes. ¡Otra vez volvía a llorar por toda la vida que el dolor le había arrebatado!”.
“Acostándose allí mismo, junto a la tasa, Anthony doblegó su cuerpo. Y, como si de estar en un vientre materno se tratase, se puso a llorar mares. Una y otra vez apretaba los dientes, sin dejar nunca de maldecir su pasado, su presente y… El futuro ya jamás existiría para él”.
“¡Vida!”, sollozó con la saliva escurriéndosele por las comisuras de sus labios. “¡¿Por qué jamás me quisiste; MALDITA?!” “¿Dónde están tus sueños olvidados, idiota?”, otra vez su mente le preguntó.
“¡Jódete! ¡JÓDETE! ¡TE ADIO!, gritó Anthony. Y su llanto, que antes había disminuido, ¡otra vez volvió a arreciar!”
Un joven con mucho talento. Ni más ni menos que eso fue siempre Anthony. Pero entonces la Vida decidió regalarle el peor de los males. Y, gracias a todo esto, ahora él solamente decidió convertirse en el sirviente de un hombre millonario…
Sus SUEÑOS de triunfar, él, los había olvidado por completo. Fin.
Anthony Smart
Enero/31/2021