- Aplican a Salinas, Romo, López, Blanco, Bartlett, Rocha, Bedolla y más Ley Juárez
Miguel A. Rocha Valencia
La consigna que le atribuyen a Benito Juárez de “Justica y gracia para los cuates y para los otros, justicia a secas” la hicieron suya los cuatroteros desde que asumieron el poder Federal. De 2018 para acá, se sumó el axioma de “no me vengan conque la ley es la ley” y desde luego la afirmación de que “yo mando”.
Es decir, la Ley es la 4T, más ahora que cuenta con instituciones y un poder Judicial que le son sumisos gracias a la mayoría calificada que kes entregó el INE de doña Guadalupe Tadeii y le conformó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Mónica Aralí Soto Fregoso quien, cumplida su misión, dejó la presidencia del organismo y es premiada con años más cobrando en la nómina de la institución y “algún regalito” de parte de los diputados morenos y compinches.
Gracias a ello, Morena y sus rémoras pavimentaron el camino a la autocracia con reformas que hoy espantan no sólo a muchos mexicanos sino también, y probado está, a la inversión extranjera que se reduce y se encapsula ante un margo legal que les provoca escozor y desconfianza. Lo dicen bancos internacionales y empresarios no los comentócratas ni los jilgueros al servicio de la ex mafia en el poder que busca recuperar sus privilegios, privilegios que por cierto hoy, son exclusividad de quienes están ¿gobernando?
Los casos los comentábamos apenas en la entrega anterior donde apuntamos que morena no investiga a morena ni muchos menos se van a acusar entre ellos aunque se exhiban y se ventiles sus trapos sucios en público como el atraco con Segalmex, la compra-robo con medicamentos y vacunas, la farmaciota, los programas clientelares, el tráfico de influencia para entregar el 78 por ciento los contratos de gobierno a los cuates o a falsas empresas e incluso propiciar lavado de dinero, enriquecimiento y redes de corrupción que llegan hasta arriba.
Todo viene a cuento porque desde Estados Unidos llegó el aviso de que Vector Casa de Bolsa del ilustre y amigo presidencial y gestor empresarial, el nunca bien ponderado Alfonso Carlos Romo Garza servía para lavar dinero no sólo de los robos al presupuesto de importantes funcionarios sino también de personajes del crimen organizado. Incluyendo entre sus clientes al satanizado y odiado Genaro García Luna a quien los delincuentazos le pusieron el dedo y se la cobraron en complicidad de su aliado político, por andar persiguiéndolos, detenerlos y consignarlos.
Finalmente Vector entregó sus activos y clientela a Finamex, ya que el sólo señalamiento del departamento del Tesoro de Estados Unidos de sus prácticas negativas, le hizo perder credibilidad y salieron a la luz irregularidades como las mencionadas en el párrafo anterior, situación que no fue desmentida por el excolaborador del jefe del Ejecutivo anterior.
Pero a pesar de ello, en México no se le fincó responsabilidad alguna ni se le inició una investigación “oficial” por parte de la Unidad de Inteligencia Financiera de la secretaria de Hacienda, en se tiempo en manos de Pablo Gómez, quien sin embargo estaba en conocimiento de las anomalías, tanto que tenía santo y seña de las operaciones de García Luna a través de Vector. Casi de inmediato el rábano de las Lomas de Chapultepec fue relevado del cargo para no “salpicarlo” y lo mandaron comisionado a la reforma electoral donde preside “consultas” inocuas en torno a su nuevo encargo.
Es decir, a los cuates se les da la gracia de no ser investigados, acusados ni mucho menos condenados pues si así lo hicieran con cualquiera de sus distinguidos miembros, aceptaría que en la 4T hay corrupción, la cual es evidente, pero no se investiga ni menos se acusa a nadie. Simplemente no se acepta.
Recuérdese incluso que con Peña Nieto 12 exgobernadores algunos aun en funciones, fueron investigados y ocho de ellos, incluyendo del PRI, fueron procesados. Hoy todos son inocentes a p0esar de las pruebas públicas en contrario.
Pero con los que critican o son “adversarios”, se aplica la justicia a secas, no la legal sino la de la 4T como ocurre con un empresario que se rebeló al oficialismo y que de ser privilegiado pasó a ser considerado enemigo y así se le persigue desde hace años.
Porque a Ricardo Salinas Pliego se le persigue desde el sexenio pasado imputándole deudas fiscales por el monto de todos sus activos, cuestiones que fueron defendidas en los tribunales y la Suprema Corte de Justicia cuando aun existía el poder Judicial autónomo y que hoy, ya al estar sometido y con las reformas a le ley de amparo, seguramente harán pedazos al empresario.
Y como se trata de una venganza, lo van a exprimir, lo obligarán a autoexiliarse porque además lo ven como un serio contendiente electoral y le encontrarán delitos penalmente castigados; buscarán no sólo despellejarlo financieramente sino también colocarlo tras las rejas. Por eso lo de los casinos de su propiedad.
Lo vamos a ver, la película de terror para el “azteco” ya empezó y ni los legisladores que +el impulsó lo van a sacar del atolladero, si no, que le pregunten al verde Carlos Puente y compañía.




