ÍNDICE POLÍTICO
FRANCISCO RODRÍGUEZ
Pesimista, desafortunado, protagonista de su propia tragedia.
Andrés Manuel López Obrador se auto conmisera.
Pobrecito de él.
Con su “moratoria constitucional” los legisladores de las oposiciones partidistas no lo dejan avanzar hacia la seguridad pública prometida a la sociedad.
Pobre de él.
Y es que fue a él a quien le tocó heredar, dice, todos los problemas creados hace ya 14 años.
Porque, como también twittea su video biógrafo Epigmenio Ibarra, la culpa del asesinato de dos sacerdotes jesuitas y de un guía de turistas en la sierra Tarahumara es responsabilidad ¡de Felipe Calderón!
Los ridículos que tiene qué hacer este otro pobre (sic) para justificar el “regalo” de 120 millones de pesos que dizque le prestó uno de los bancos del Estado mexicano para que siga grabando series para las plataformas de streaming en las que los narcotraficantes son los personajes por interpretar.
Esa auto conmiseración de AMLO, dicen los expertos, “pareciera la descripción de un sentimiento que surgiera del egoísmo pero en realidad su raíz es el miedo.
“Quien se auto conmisera, quien siente pena por sí mismo es incapaz de considerarse merecedor de algo bueno, lo cual por un lado habla de carencias internas, de necesidades no satisfechas en la infancia, pero también de un miedo a que las cosas ‘buenas’ le sucedan.”
Yo creo, empero, que no tiene miedo, ni siquiera al juicio de la Historia que tanto le preocupa.
Lo que hay es displicencia, desgano e ignorancia para actuar y, en la sociedad, absoluta certeza en el fracaso de su gobiernito en todos los flancos.
Su miedo estriba en el pasmo ante su propia incompetencia.
La certeza de los ciudadanos está plenamente avalada por los desplantes de los incapaces.
¿No cree usted?
Quiere que le tengamos lástima
Pero su auto conmiseración muchas veces es la justificación para hacer cosas –o dejar de hacerlas– que solo traen más problemas. como por ejemplo: drogarse, beber alcohol, autolesionarse, tener sexo descontrolado, conducir de forma arriesgada, pelearse con otros, dejar de cumplir con sus obligaciones, dejar el trabajo, dejar los estudios, tratar mal a los que no rodean, discutir con su pareja, ser infieles, etc.
Claro que hasta ahora no lo hemos visto drogado ni bebido, pero sí embriagado de poder.
Del sexo descontrolado y aún de la infidelidad sólo puede dar cuenta su señora esposa.
Del maltrato a quienes lo rodean, eso que ni qué.
Lo mismo puede decirse de que ha dejado a un lado sus obligaciones presidenciales para adoptar una especie de papel de pastor que cada mañana, entre semana, nos habla desde su púlpito.
Esto siempre puede venir bien para decir: “esto lo he hecho porque estaba muy mal” ” no he podido hacer otra cosa” “Yo no sé hacer nada bien” “Me encontraba muy mal y por eso lo he hecho” “Ustedes, Calderón y todos mis adversarios tienen la culpa de que yo actúe así”.
El todo me pasa a mí, el pobrecito yo, no puedo con esto, o hasta el “ya estoy chocheando y me voy a morir… busca la compasión de los demás.
¡Pobrecito Andrés Manuel!
Le tocó sufrir la Presidencia de la República por tantas cosas malas que hicieron quienes le antecedieron en el poder.
Da lástima, ¿no cree usted?
Indicios
Un buen ejemplo de auto conmiseración lo dio AMLO en la “mañanera” de este jueves 23 de junio: Explotó. ante las críticas a su gobierno por los asesinatos de los dos sacerdotes sin mencionar la violencia en todo el país y responsabilizó directamente a la autoridad de Chihuahua de estos actos. “Es un asunto muy polémico… se me hace muy ruin que se da un hecho muy lamentable y estos hipócritas lo primero que hacen es voltearnos a ver a nosotros y a mí, y si actuamos en estricto apego a la ley, esto no es un asunto del fuero común, tiene que ver con una responsabilidad del fuero local y no mencionan eso… no se cuestionan cuánto tiempo el mismo partido ha gobernado ese estado, ¿Y ellos no fueron los que hicieron la alianza con Carlos Salinas? Y hay pruebas que muchos gobernadores se apoyaban en los grupos criminales…” Aseguró que es de extrañarse que el asesino de los sacerdotes y el guía de turistas (El Chueco) era conocido por toda la comunidad y hasta patrocinaba a un equipo de béisbol. Acusó de posible protección de parte de las autoridades, “se está investigando y se va a ir al fondo…” Lo dicho. Él no. Los demás sí. Todos le echamos la culpa. Y él nada tiene qué ver (aunque sea el Presidente de la República). ¡Pobre! * * * Señalado como el patrocinador de la alianza electoral PAN-PRI-PRD, Claudio X. González Jr. ya les advirtió a sus convocados que no tienen ni un chancesito siquiera de ganar los comicios de 2024. El porqué de semejante advertencia es desconocido. A menos, claro, que ya quiera dejar de ser patrono de Marko, Alito y de Jesús. * * * A propósito de “apagones”… Hace una semana, aproximadamente, estalló un transformador de energía eléctrica en la céntrica esquina del Paseo de la Reforma y Sevilla en la capital nacional. ¿Sabe usted cuanto tiempo tardaron los técnicos de la CFE en reparar el desperfecto y, con ello, que la energía eléctrica volviera a fluir por el vecindario? Pues, si acaso, 15 minutos. Así de eficientes. Pero ¿sabe usted por qué? Pues porque justo enfrente vive ahora Manuel Bartlett Díaz. En uno de los varios departamentos que posee en el edificio que también alberga al hotel St. Regis. * * * Volví a abusar de espacio. Y creo que también de su paciencia. Le agradezco me haya acompañado leyendo estas líneas. Y como siempre, ya sabe usted que le deseo tener ¡buenas gracias y muchos, muchos días!
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