El sábado pasado que el presidente Enrique Peña Nieto festejó sus 47 años de vida, también anunció una mayor inversión presupuestal al sector salud con la construcción de mayor número de hospitales, así como la adquisición de nuevos aparatos en el apoyo a los servicios médicos para los mexicanos, pero lamentablemente; sigue faltando una visión social en lo que respecta a la salud de todos los gobernados.
Cada vez más, los mexicanos desarrollamos enfermedades que tienen que ver con nuestro estilo generalizado de vida, pero: ¿Alguien ha puesto el énfasis en quienes propician el mismo?
No se necesita aval de ningún estudio científico para afirmar que la alimentación que provoca a la larga un sin número de afecciones médicas a los mexicanos, es en primera, el resultado de la permisibilidad que tiene la industria de los alimentos en México para saturarlos de grasas, carbohidratos y aditivos.
Es también comprobable cómo el stress va minando la salud desde edades tempranas y el mismo tiene causas muy diversas, entre éstas la inseguridad y la violencia que se viven en todas las partes del país.
Si los niños hoy en día se apropian de las calles para jugar en ellas o simplemente para transitarlas en solitario o con chicos de sus mismas edades sin compañía de un adulto, es más por necesidad familiar que por la confianza que se tenga sobre la seguridad de los pequeños en las calles.
Hemos perdido los espacios públicos frente a la delincuencia y también por favorecer a la industria de los juegos generados en cajas electrónicas y digitales, al grado que hay niños que ven entre sorprendente y fascinante ver a otros de sus mismas edades, moverse en las aceras sin compañía de un adulto, y eso, en definitiva, va gestando comportamientos conductuales antisociales y también enfermedades que de manera irremediable los llevarán a visitas continuas a centros de salud o unidades hospitalarias.
Nuestra sociedad va convirtiéndose poco a poco en una masa encerrada, moviéndose siempre entre paredes para cuidarse de todo y de todos y así pasamos de la casa, a los centros comerciales, para luego llegar a los hospitales.
Sí requerimos clínicas, pero también estamos muy necesitados de recuperar nuestros espacios al aire libre.
Acta Divina… Norma del Río, profesora e investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) afirma que las altas tasas de delincuencia en las ciudades, la violencia, los disturbios en comunidades y calles, así como la proliferación de espacios dominados por jóvenes o adultos, son factores de riesgo que impiden a los menores ejercer su derechos al juego y al esparcimiento y que esto, erosiona desde edades tempranas al tejido social.
Para advertir… Enrique Peña Nieto, deja para otra ocasión los festejos tumultuarios en razón de su cumpleaños.