En el Senado de la República se realizará el 15 de noviembre a las 11:00 horas, el foro “Mitos y realidades del vapeo: ¿Hacia dónde debe ir México?”, con el propósito de hablar de las consecuencias de la prohibición contra los vapeadores, cigarros electrónicos y calentadores de tabaco.
Durante éste, se planea discutir la necesidad de que el Congreso impulse una regulación integral, estricta e inteligente para evitar el consumo de menores de edad y el mercado negro.
El evento estará a cargo de la senadora morenista por Coahuila, Eva Eugenia Galaz Caletti, y se tocarán temas como los antecedentes, evolución y actualidad de los vapeadores y otros productos alternativos, igualmente sobre sus beneficios y el nivel máximo de nicotina deseable que deben contener estos artículos.
También retomarán las consecuencias del consumo ilegal de las alternativas al cigarro y la necesidad de su regulación para prevenir el consumo entre niños y adolescentes y adicionalmente, darán a conocer el estatus actual del vapeo en México y el método de control sanitario y política pública.
Desde que se aprobó el decreto presidencial el 31 de mayo de 2022, por el que se prohíbe la circulación y comercialización de los vapeadores en el país, varios legisladores de diferentes partidos han destacado la importancia de abrir espacios de diálogo para evidenciar los riesgos que representa la venta ilegal de vapeadores en las calles y el mercado negro.
De igual manera, organizaciones como Allvape México y el Mundo Vapeando, han alertado que no regular los vapeadores ocasiona que los consumidores adultos no dispongan de alternativas menos riesgosas para su salud, así como la falta de certeza de la calidad del producto.
De hecho, estudios realizados autoridades sanitarias internacionales como la Food & Drug Administration (FDA) de Estados Unidos o el Public Health England, de Reino Unido, también comprobaron que los productos sin humo reducen aproximadamente 90 por ciento la exposición a los seis mil compuestos tóxicos que están presentes en el humo de los cigarrillos.
La Public Health England también sostiene que entre el 65 y 68 por ciento de fumadores que usaron vapeadores, calentadores de tabaco y otros métodos para reducir el consumo de nicotina, consiguieron dejar de fumar.
A la par, el aumento acelerado del mercado negro y del contrabando de estos dispositivos es otro de los riesgos a la salud y seguridad que los especialistas han detectado debido a que exponen a 975 mil personas que utilizan vapeadores en el país, con productos, en su mayoría, adulterados y que no reportan la cantidad de nicotina o sustancias que tienen sus cartuchos.
En México, 6.5 por ciento de la población entre 12 y 17 años, es decir 160 mil adolescentes, admitió haber probado el cigarro electrónico en la última Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco 2016-2017, por lo que otro punto preocupante es que estos productos adulterados están llegando a los menores de edad con la prohibición.
Al carecer de una regulación adecuada, no existe un mínimo control en su venta y los jóvenes pueden encontrar estos productos en máquinas expendedoras, en redes sociales, en la ilegalidad o hasta con el contrabando.
México se ubica en el lugar 45 de países con el peor desempeño en materia de acceso a innovaciones para reducir el tabaquismo, según el Índice Global de Políticas Antitabaco Efectivas, que analizó las políticas públicas y acceso a la información que tienen a la mano los consumidores de 59 naciones.
De regularse los vapeadores, el Congreso evitaría el crecimiento del mercado negro y, al mismo tiempo, protegería a los menores de edad e inhibiría su consumo, otorgaría la oportunidad a los fumadores de consumir nicotina y tabaco de una forma menos dañina que la actual, además, permitiría aplicar mejores filtros sanitarios, incentiva el derecho a tomar decisiones sobre su consumo y el acceso a información científica y precisa sobre sus beneficios o riesgos.