Lilia Arellano
“Nadie puede continuar siendo un rebelde sin acabar siendo un autócrata”: L. Durrell
● 4T “transforma” la política exterior
● Usa EU a Perú y Argentina para mensajear
● AMLO: pese a Monreal, la reforma pasará
Ciudad de México, 8 de diciembre de 2022.- Lo sucedido en Perú y en Argentina, no puede verse aislado de quien maneja, todavía, al mundo. Los recados se envían de diferente manera y los mensajes debieran interpretarse en su justa dimensión. En el caso de México, mientras se mantuvo un respeto total a la determinación de los pueblos, estos envíos eran innecesarios aunque no por ello dejaban de poner algunos “frenos” cuando las manifestaciones de simpatía, como sucedía con apoyos a Cuba, acusaban intenciones más allá de las humanamente razonable. La “transformación” de las relaciones exteriores no encuentra aún, después de cuatro años, la cuadratura al círculo con el cual se mantuvo obteniendo gran respeto.
El presidente se negó a estar presente en cuatro reuniones internacionales de primer nivel y, en las últimas 72 horas se ha lanzado a cuestionar decisiones adoptadas por los poderes Judicial y Legislativo de dos naciones. En el caso de la vicepresidente de Argentina, no solamente lamentó la decisión de los jueces de ese país al condenarla a seis años de cárcel e inhabilitarla para volver a ejercer un cargo público. La felicitó por haber adelantado no participaría en las próximas elecciones por la presidencia. Intereses ajenos, conservadores, fueron, a juicio de López Obrador, los causantes de lo calificado como calumnia, cuando para llegar a esa sentencia, la cual todavía recorrerá camino para ser ejecutada, las autoridades argentinas realizaron las investigaciones necesarias y suficientes para emitir su dictámen.
En cuanto a Pedro Castillo, se justificó señalando: “si hay una injusticia en cualquier parte del mundo se puede opinar”. La opinión es una, la defensa es otra: “lamentamos mucho lo que sucedió porque desde que ganó legitimamente fue víctima de acoso, de confrontación, no aceptaron sus adversarios, sobre todo las élites económicas, políticas el que él gobernara, entre otras cosas porque lo consideraban serrano”, abundó al mencionar le comentó Castillo que cuando caminaba por Lima había señoras que cuando pasaba se tapaban la nariz. Aunque la revelación importante se dio cuando aceptó le llamó Castillo solicitándole asilo, lo cual fue aceptado “por la tradición” y, cuando iba para la embajada fue cuando lo arrestaron. Apenas 24 horas antes, Marcelo Ebrard negó la llamada, la solicitud de asilo y la disposición de enviar una aeronave para trasladar tanto al defenestrado mandatario como a su familia.
¿A cuál “tradición” se refiere don Andrés? Los antecedentes sobre la destitución del mandatario peruano señalan su determinación de disolver el Congreso, redactar una nueva Constitución, medidas tomadas por el terror de saber se avanzaba en investigaciones en su contra por corrupción y ante el registro de lo sucedido con ex mandatarios como Alan García, presidente inclusive reelecto y quien se suicidó cuando la policía llego para arrestarlo, o la experiencia de Alejandro Toledo, de Ollanta Humala, Martín Vizcarra, Fujimori, Pedro Pablo Kuczynski; tomó Castillo una determinación por la cual también se le acusa de rebelión y conspiración. Nuestro país, hasta ahora se mantenía al margen de juicios, sobre todo si estos provienen de Instituciones como sucede en ambos casos.
Desde la terquedad de seguirle el juego a un Donald Trump, también perseguido por diversos delitos fiscales en su país y no reconocer como lo hicieron los mandatarios de otras naciones el triunfo de Joe Biden, tal parece es una “tradición” para el tabasqueño desconocer a quienes sus pueblos eligen, en este caso a la nueva presidente de Perú Dina Boluarte. Resultó cómodo mandarle la responsabilidad del establecimiento de relaciones al canciller aspirante a candidato presidencial: “sobre la Alianza del Pacífico, no vamos a ir a entregar la presidencia…porque no hay condiciones, y lo lamentamos mucho y ahora Relaciones Exteriores va a tener que consultar con los otros presidentes para ver qué se hace, si mantiene México la presidencia o se le entrega a otro país…” Y aceptar la decisión adoptada por el Congreso cumpliendo con sustituir con el vicepresidente a quien deja la máxima responsabilidad, resultó acción negada.
Inexplicablemente surgió una exposición de esas con las cuales se ilustra la frase “curarse en salud”: “aquí en México no hay un golpe blando, no han podido ni podrán porque nuestro pueblo está muy avispado, muy despierto, muy consciente, es de los pueblos más politizados del mundo, ha dado muy buenos resultados la revolución de las conciencias. A este pueblo ya no se le engaña, pueden estar gritando y calumniando todos los días en los medios de comunicación y ya no funciona…” ¿Y eso?
Hay memoria, hay antecedentes y ahora ¿también intervención?
EN TERRITORIO NACIONAL
Al parecer de poco ha servido el llamado de Ricardo Monreal a actuar con estricto apego a la Ley, a la reglamentación legislativa, a llegar a acuerdos con las diferentes fracciones parlamentarias para obtener aprobaciones en donde se resalten las coincidencias, prevalezca el diálogo, se obtengan mayorías por convencimiento no por presiones o amenazas. El zacatecano es presionado por un lado por los senadores de oposición para que vote en contra del “Plan B” de la reforma electoral de López Obrador, en congruencia con sus últimas declaraciones en defensa de la democracia mexicana, y, por otro lado, resiste las presiones del sector oficial, del bloque morenista y sus aliados del PVEM y PT, y de la Presidencia de la República, para que la minuta electoral se apruebe en sus términos la próxima semana.
“La mayoría del grupo parlamentario, diría una gran mayoría o una aplastante mayoría, respalda al Presidente; quizá hasta la unanimidad, vamos a ver”, señaló Monreal, quien ya adelantó no habrá fast track y como constitucionalista considera es inviable una reforma electoral sin tocar la Constitución. Por lo tanto, la intención es que conozcan sus compañeros a fondo los cambios propuestos desde Palacio Nacional, lo cual al macuspanense no le conviene, pues se exhibirán a la opinión pública sus intenciones de controlar todo el proceso de su sucesión de manera anticipada. Sí la discusión del “Plan B” se lleva hasta el próximo año, quien saldrá perdiendo será el Presidente de la República.
La serenidad y seriedad de la exposición produjo expresara el presidente: “la reforma a la Ley Electoral pasará en el senado a pesar de las amenazas de Ricardo Monreal, y si no pasa cada quien su conciencia pero no pasaré a la historia como un presidente que convalidó todas las mentiras y prácticas antidemocráticas…” Desde el templete mañanero el tabasqueño se comprometió con un reportero a cambiar el proyecto de reforma si es que incluye un apartado que permite a los partidos seguir a pesar de que no cuenten con un porcentaje mínimo de votación, además, de habilitar a todos los partidos para guardar los presupuestos.
Las reformas secundarias a 6 legislaciones que modifican la estructura del INE y el Tribunal Electoral federal, acotan facultades de ambos órganos en temas de precampaña, e introducen disposiciones para ampliar la representación de minorías en cargos legislativos. Los cambios ya aprobados por los diputados federales fueron diseñados para pavimentar el camino para que las “corcholatas” de AMLO lleguen con más facilidad a la Presidencia de la República. La propaganda anticipada de Claudia Sheinbaum, desatada por todo el país sin aclarar el origen de los recursos para pagarla, así como la de Marcelo Ebrard, quien ya inició de facto su campaña presidencial, y la de Adán Agusto López (Plan B en caso de Sheinbaum no dé el ancho), e incluso la de Ricardo Monreal, ya tienen permiso.
Con las reformas, se cancela la prohibición de promoción personal de funcionarios públicos con fines electorales, por lo que los aspirantes presidenciales inscritos en la nómina del gobierno federal tienen carta abierta para sus actividades proselitistas adelantadas. Y ya también sin posibilidad de cancelar candidaturas, los amigos de los abrazos no balazos podrán enviar muy claramente sus contribuciones, sus aportaciones, señalando quien mandará en municipios y estados.
DE LOS PASILLOS
El rezago de la economía mexicana en este sexenio logrará se pierda importancia en el contexto internacional. Con un valor de 1.5 billones de dólares, el PIB de México se mantendrá en el lugar 15 a escala global en 2024, misma posición con la que estuvo en 2018, situación explicada por el magro crecimiento que tendrá el país en el sexenio de 0.2% promedio anual, según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI). En cuanto al PIB por habitante, la situación será peor: México pasará del lugar 72 en 2018 al 76 en 2024, resultado de la caída de 0.7% promedio anual en el sexenio.