La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Para demostrar inconformidad al Tlatoani, la mejor estrategia es la del tío Lolo
Ricardo Mejía, subsecretario de Seguridad Pública, es un funcionario cuyos resultados pueden ser tildados de mediocres (sin duda), además, la seguridad de los mexicanos es algo que le importa poco, porque el cargo lo ha usado como (fallido) trampolín político.
El personaje, que ha militado en el PRI y Convergencia (ahora es un ‘fiero defensor’ de la 4T), está haciendo berrinche, en virtud de que no fue elegido para ser candidato a la gubernatura de Coahuila.
Tal es su intemperancia que, por medio de su esposa, Marlenne de Mejía (es su alias en redes sociales), mandó un mensaje de muy mal gusto, al dirigente nacional de MORENA.
En efecto, en lunes pasado, la señora posteó lo siguiente en su muro de Facebook: “Buenos días paisanos ¿Cómo amanecieron? Qué bonito lunes ¿No les parece? Tan bonito que hasta dan ganas de mentarle la madre a Mario Delgado Carrillo pero pues no tiene ni tantita”.
Por cierto, para comprobar la ‘gran popularidad’ de Mejía (así lo afirma la pareja), después de 48 horas, el comentario había sido compartido en ¡11 ocasiones!
Volviendo al tema, no sobra decir que, durante muchas semanas, todos los jueves, el inconforme se ha reunido en ‘la mañanera’ con YSQ, por ello, si es tan mienta madres ¿por qué no le reclama al que manda, al que decide, el no ser favorecido con el dedazo?
Patética la reacción del susodicho, si conociera la urbanidad política (resultado de la inteligencia emocional), tendría dos opciones: seguir con su encargo o renunciar, pero no, es mucho pedir. Bueno, hay una tercera: que recurra de nuevo al Facebook.